Rihanna (29 años) no soporta más la presión y las críticas a las que ha estado sometida desde que apareció en el Festival de Cannes con unos kilos de más. La cantante, harta de estar en el punto de mira, ha contestado con un punto ácido a los que se meten con ella por su condición estética. En su cuenta de Instagram ha compartido una imagen del antes y el después del rapero Gucci Mane (37). En la primera con un abultado abdomen y en la otra presumiendo de su nueva, atlética y esbelta figura. "Si no puedes conmigo como Gucci Mane en 2007, no me mereces en mi Gucci Mane 2017", fue el texto que puso la intérprete de Umbrella para acompañar las instantáneas junto a una icono llorando.
En cuestión de minutos la publicación se ha llenado de mensajes de apoyo para la de Barbados. "Tú eras, eres y serás siempre perfección", escribió uno de sus seguidores. "Mantente natural, no escuches a otros", aseguró otro. La estrella estadounidense sigue siendo considerada una de las mujeres más atractivas del planeta. Sus fans especularon con la posibilidad de que su aumento de peso se debiera a un embarazo, pero su representante negó estos rumores. "Rihanna no está embarazada, siento decepcionar a todos, pero no. Ella tiene algo que contar, pero es privado", afirmó una fuente cercana al portal HollywoodLife.
LO QUE HAN DICHO DE RIHANNA
No solo personas anónimas han participado en el debate generado tras el cambio físico de Rihannna. Algunas publicaciones americanas han contribuido también a alimentar más si cabe la polémica. The Shade Room compartió una foto de la artista en Instagram con la frase: "Rihanna ha estado comiendo bien". En Twitter, Barstool Sports inició un desafortunado debate sobre la misma imagen: "¿Conseguirá Rihanna que la gordura sea una tendencia?".
De momento Rihanna no se ha pronunciado sobre qué es lo que le ocurre. Otras celebrities antes que ella se vieron obligadas a confesar sus problemas de salud ante las críticas por su nueva figura. Es el caso de Gigi Hadid a la que criticaron por su extrema delgadez. La modelo explicó que padecía la enfermedad de Hashimoto (trastorno en la tiroides) que le hacía bajar peso.
En España también hay un caso reciente, el de Tamara Falcó (36), quien también tuvo que dar explicaciones por sus kilos de más. La hija de Isabel Presyler (66) contó abiertamente que tenía un problema de tiroides que se estaba tratando y que había sido el causante de su nueva imagen. Con la simpatía y naturalidad que la caracteriza, ella llegó a decir "que había prendido a amar sus curvas".