Claire Foy, actriz protagonista de la exitosa serie The Crown, ha sido indemnizada con 200.000 libras (algo más de 225.000 euros) tras revelarse que su compañero en la ficción de Netflix, Matt Smith, cobraba bastante más dinero que ella por cada capítulo. Ambos actores han protagonizado los 20 episodios relativos a las dos temporadas de la serie emitidas hasta ahora. Según publicaban medios británicos, Smith habría estado cobrando más de 10.000 libras (13.500 euros) por encima de Foy, quien originariamente se embolsaba 29.000 libras (35.000 euros) por capítulo. Con la polémica en el foco mediático y las protestas de sus seguidores en redes sociales, los responsables tuvieron que dar un paso al frente y aclarar la controvertida situación. Los productores se escudaron en la experiencia en pantalla del actor, sobre todo por su papel en el serial británico Doctor Who.
La intérprete de Isabel II también quiso pronunciarse sobre la situación en la a que era víctima. Al respecto comentó lo siguiente: "Definitivamente esto me ha abierto los ojos a muchos cosas. Verdaderamente no voy a ser una ingenua con esto. Me ha abierto los ojos sobre lo que se me permite opinar, y sobre lo que se me permite defenderme. Y creo que eso realmente ha cambiado mi enfoque hacia mí misma y hacia otras mujeres en esta industria. Ha sido algo positivo, aunque vergonzoso".
Por su parte, su compañero, Matt Smith, también rompió una lanza a favor de su Foy declarando que "Claire es una de mis mejores amigas, y creo que se nos debe pagar igual y justamente y que debe haber igualdad para todos". Fuentes cercanas a la serie han afirmado a Main on Sunday que "la diferencia salarial entre Matt Smith y Claire Foy durante estos 20 episodios ya ha sido resuelta. Todo se ha arreglado amistosamente".
En un comunicado oficial, Left Back Pictures, una de las productoras de la serie han informado de que "como productores, somos responsables de los presupuestos y los salarios. Los actores no son conscientes de quiénes reciben qué y no pueden ser considerados responsables por el pago que perciben el resto de sus compañeros. Estamos absolutamente concienciados con el salario justo, más allá del género, y el equilibro y el tratamiento igualitario de la figura de la mujer en la industria, ya sea delante de las cámara o detrás de ellas". La serie producida por Left Bank Pictures y Sony Pictures Television está considerada como la más cara de la historia con un presupuesto de 130 millones de dólares por temporada.