A principios de junio del pasado año, Ana Soria (23 años) tomaba la drástica decisión de eliminar su perfil de Instagram, desde donde hasta ese momento compartía sus fotografías más personales y románticas junto a Enrique Ponce (50). Al borrar su rastro del mundo virtual, la estudiante de Derecho estaba siguiendo los pasos del torero, que ya se había despedido de las redes justo una semana antes.

Mediante las imágenes que Ana publicaba para sus miles de seguidores, no solo había estampas en pareja, también posaba con sus estilismos de diario y los looks para citas especiales. Entre todos ellos tuvo una gran repercusión mediática un outfit que parecía un homenaje claro y directo a la profesión de su novio.

Soria compartía un breve álbum con tres fotos en las que aparecía con una prenda muy especial: una chaqueta de estilo torero. La joven, como si de una modelo profesional se tratara, se dejaba ver desde diferentes ángulos con el llamativo diseño como la pieza estrella de su look. 

La pieza estilística en cuestión pertenece al catálogo de la firma Capote, una marca muy presente en el armario de Enrique Ponce y de la incluso ha ejercido de embajador. De este modo, Ana se aliaba a una de las empresas de moda favoritas de su pareja y conseguía que su fotografía luciendo la torera se hiciera viral por la connotación que escondía.

Ha pasado un año desde que Soria publicara la imagen en sus -ya desaparecidas- redes, pero la prenda aún puede adquirirse en la tienda online de la firma. Las características de la pieza son las siguientes, según se dicta en la web oficial: "Chaquetilla Torera de manga larga en terciopelo negro con detalles en oro. En la Espalda lleva nuestro Capote bordado con más de 10.000 puntadas, botones en hilo metálicos hechos a mano. Pasamanería artesanal exclusiva hecha a mano".

En el momento en el que Ana Soria presumió de la nueva prenda de su vestidor, la chaqueta se vendía a un precio de 389 euros. Sin embargo, actualmente está rebajada y se puede encontrar por 'solo' 199 euros. Esta notoria reducción seguro que atrae a muchos clientes a dar el paso y comprarla, para así arrasar tanto como lo hizo la joven almeriense. No obstante, actualmente las únicas tallas disponibles son la L, que equivale a una 40, y la XL, que sería una 42.

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