Pilar Rubio (38 años) dejaba este jueves a la audiencia con el corazón en un puño cuando empezó a convulsionar al intentar de batir su récord de apnea en El Hormiguero. Lo conseguiría finalmente alcanzando una marca de 2 minutos y 30 segundos, 23 segundos más que su anterior marca. Sin embargo, la actriz terminaba exhausta y sin poder articular palabra. "En un minuto y medio creía que me moría. Creía que no llegaba. Gracias a la tranquilidad que Pablo me transmite, lo he conseguido", dijo.
Esta no es la primera vez que Rubio se la juega, ni probablemente será la última. Y es que a la mujer de Sergio Ramos (30) le cuesta decirle que no a su jefe Pablo Motos (51). "Alguna vez le he tenido que parar los pies. Pero yo soy tan kamikaze como él. Protesto al principio, pero al final lo intento. Por amor propio. Soy un poco competitiva, la verdad", confesaba a JALEOS hace unas semanas.
La que fuera presentadora de Operación Triunfo estrenó su sección en el programa de Antena 3 a primeros de año poco después de ser madre por segunda vez. En ella tiene tiene que aprender en una semana cosas que enseñan los tutoriales más locos de Internet.
Al principio empezó con retos más sencillos como aprender a hacer figuras con globos, llorar como una auténtica actriz de Hollywood o cantar en directo. Sin embargo, con el tiempo, los retos se han ido dificultando hasta el punto que hace unas semanas se enfrentaba al reto de meterse en una caja y ser atravesada por ocho flechas. “Ha pasado muy cerca”, decía Rubio.
La caja de la muerte
Otro reto que también tuvo a una caja como protagonista fue la de La caja de la muerte. Entonces, la colaboradora tenía que aprender a meterse en esta caja por arte de magia.
El flechazo
También tuvieron como protagonista a las flechas el reto en el que la actriz tenía que aprender la técnica del tiro con arco. Finalmente, como suele ser habitual, lo superó.
Surf en la calle Alcalá
Un reto menos peligroso fue el de tener que hacer surf en plena calle Alcalá de Madrid gracias a una piscina de 15.000 metros cúbicos. En este caso, no obstante, estuvo acompañada por el invitado de aquel día, Joaquín Reyes.
Volando
Un reto parecido fue el de aprender a volar en un túnel de viento. “Ahora te doy envidia, lo sé”, le dijo Rubio a su jefe tras su exhibición.
Bailer flamenco
Dispuesta a demostrar todo su arte y de paso contentar a su pareja, Ramos tuvo que aprender a bailar flamenco en siete días.
Lenguaje de signos
También le tocó bailar La Gozadera, aunque con lenguaje de signos. "Aprueba con un diez", dijo la profesora que le había enseñado.
Acrobacia con pizzas
Su reto más 'gastronómico fue aprender a hacer pizza acrobática. La colaboradora enseñó a los invitados a hacer unos movimientos básicos.