El distanciamiento entre la pareja formada por David Bustamante (35 años) y Paula Echevarría (39) es más que evidente. Concretamente, a día de hoy les separan más de 430 kilómetros. El cantante pasa unos días de vacaciones en San Vicente de la Barquera junto a su hija Daniella (8), mientras la actriz disfruta de los rayos de sol madrileños, a la espera de poder escaparse unos días a Asturias.

El cántabro recogió a su hija en el domicilio familiar de la capital el pasado viernes y puso rumbo a su pueblo natal para que la pequeña aprovechara parte de sus vacaciones escolares de Semana Santa para estar con sus abuelos y tíos paternos. La niña y Bustamante ya han sido vistos y fotografiados paseando por el municipio costero, unas instantáneas que, seguro, verán la luz en los próximos días bajo alguna cabecera del corazón.

Mientras tanto, Paula ha decidido refugiarse en su familia y su grupo de amigas. La actriz ha sido la única parte del matrimonio que ha tenido que enfrentarse a los medios y responder ante la noticia de su ruptura, tal y como ocurría el pasado miércoles en la presentación de su nueva fragancia. De hecho, cuando se vio en dicha situación no pudo evitar romper a llorar. Ahora, gracias a sus amistades y a las compras por el centro de la ciudad, parece que poco a poco recupera la sonrisa, o eso es lo que quiere mostrar en su redes sociales.

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Y es que esa sonrisa pierde parte de su credibilidad cuando descubrimos que en realidad sus últimas publicaciones están pensadas para hacer publicidad. La actriz ha aprovechado estos días que ha pasado sola en casa, sin la presencia de Daniella, para promocionar los productos de los que es embajadora; entre ellos, una marca de gafas de sol y una firma de relojes. Junto a la actualización diaria de su blog, la publicidad encubierta se ha convertido en su mejor 'pasatiempo' -muy bien remunerado-, ya que no tiene previsto ningún proyecto laboral hasta el mes de septiembre, cuando podría adentrarse en el séptimo arte además de seguir con algún papel en televisión.

El triunfito, por su parte, apura los últimos días de descanso antes de que comience su gira, y lo hace de la mejor manera posible: en su tierra y con la niña de sus ojos. Y es que Bustamante no quiere perder ni un minuto con su pequeña Daniella, pues en unos meses las rutas por carretera y los viajes en avión le impedirán verla todo lo que desearía. Será el próximo 28 de abril en León cuando se dé el pistoletazo de salida de su Tour Amor de los dos que le llevará a tener un ajetreado verano recorriendo la península y seguidamente por varios países de América Latina, donde se prevé que agote las entradas.

Pese a la ruptura y a los desencuentros que pudiera tener la pareja, lo cierto es que el amor hacia su hija y su lucha por reinventarse en el trabajo, es algo que ambos siguen compartiendo. Del resto, el tiempo dirá.