Antonio David Flores (40 años), tendrá que acudir a juicio acusado de un presunto delito de alzamiento de bienes, penado con hasta cuatro años de prisión, según ha podido saber en exclusiva EL ESPAÑOL. El pasado 19 de septiembre, el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Alcobendas, que investiga la causa desde 2016, dictó un auto al que ha tenido acceso este medio en el que cierra las pesquisas por el uso de sociedades interpuestas para ocultar el cobro de ingresos, y concluye que hay "suficientes indicios" para acreditar que el ex guardia civil mintió ante la Justicia al declararse insolvente en 2012.
En el auto, recurrible todavía por la defensa de Antonio David, el magistrado explica que el exmarido de Rocío Carrasco (40) "ha podido llevar a cabo actos de ocultación de su patrimonio con la finalidad de generar una supuesta y ficticia situación de insolvencia, dirigida a evitar el pago" de las costas judiciales tras un pleito con su expareja. En su escrito, el magistrado define el qué, el quién y el cómo se desvió presuntamente el dinero. Y abre la puerta a la posible acusación de nuevos delitos al colaborador televisivo o su entorno, al situar tanto a su representante como a su mujer tras algunas de las sociedades presuntamente empleadas.
Con este auto, el magistrado concluye su investigación y da traslado a la acusación particular y a la Fiscalía, para que en el plazo de diez días formulen el escrito de acusación y soliciten la apertura de juicio oral.
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Una condena impagada
Fue el Juzgado de Instrucción número 3 de Alcobendas el que decidió embargar en 2011 los bienes del colaborador televisivo para hacer frente a una de sus deudas. Y fue Antonio David quien el 5 de diciembre de 2012 presentó un escrito en ese mismo juzgado declarándose insolvente.
A partir de ahí y según el sumario del caso, desvelado por EL ESPAÑOL, Flores realizó entre 2011 y 2015 diversos trabajos tanto en prensa como en televisión que fueron facturados por distintas sociedades, controladas bien por su mujer, o por su representante, Francesc Perallada. "Considera este instructor que de la propia declaración de Antonio David Flores se infiere que se realizan actos de ocultación de sus ingresos a fin de conseguir esa aparente insolvencia", refleja el auto, en referencia a la comparecencia del ex guardia civil en sede judicial.
En esa cita fue el propio Flores quien reconoció el cobro de estas cantidades, pero aseguró que se facturaron por sociedades de terceros para hacer frente a una deuda contraída con anterioridad por su representante tras una mala racha laboral, además de servir para cubrir los gastos de manutención de su familia. Un argumento insuficiente para el juez: "Con pleno conocimiento del derecho de crédito de la querellante, consigue desviar sus ingresos dimanantes de su actuación en programas televisivos, la asistencia a eventos y entrevistas, facturándolos a través de mercantiles administradas precisamente por su esposa y su representante artístico".
A juicio del juez instructor, de la declaración de Antonio David Flores, adelantada por EL ESPAÑOL, "se infiere un tímido pero claro reconocimiento consistente en que los ingresos obtenidos de sus colaboraciones y entrevistas, tras el oportuno prorrateo, superaban los 3.000 euros netos mensuales, los cuales si bien obtenidos a través de la mercantil Maita y Paito SL y Espilce SL eran disfrutados por Antonio David Flores".