María Jiménez (67 años) ha vuelto a cargar duramente contra el que fue su esposo durante más de 20 años, el actor Pepe Sancho (fallecido en 2013). La cantante acudió a Sábado Deluxe donde habló de las infidelidades del artista y de su situación personal y económica tras el divorcio. Sin embargo, no es la primera vez que María critica al actor, y es que desde que se separaron, la artista ha relatado cómo Pepe la maltrataba, la poca relación con sus hijos, los problemas en su relación, la obsesión de su exesposo con su imagen...
La pareja se conoció en 1979, cuando ella era un rostro conocido de los escenarios españoles y él un joven actor con mucho talento que poco a poco se habría paso en el mundo de la actuación. Fue un flechazo, y es que al año de conocerse, el 1 de junio de 1980, ya estaban pasando por el altar en su primera boda (se volvieron a casar en 1987). Fruto del matrimonio nació Alejandro, el único hijo de la pareja (ella tenía otra hija que murió a los 16 años), y que fue una parte esencial a lo largo de los años que duró su relación.
Al inicio de su matrimonio, muchos veían en la pareja un romance idílico, pero las apariencias terminaron dando paso a la realidad: un matrimonio marcado por las infidelidades, las inseguridades de uno y otro, y las continuas discusiones.
"Era un asesino cobarde"
Al poco tiempo de su segundo divorcio, María Jiménez escribió sus memorias, Calla canalla, donde relató cómo fue su vida con el actor. Por un lado, asegura que Pepe era un maltratador que hizo su vida insoportable. Después de tantos años de infelicidad, María aseguró que había llegado a una conclusión: "La única explicación que existe es que será un psicópata. Un asesino cobarde que no tuvo huevos para matarme de una vez e intenta hacerlo poco a poco volviéndome loca, haciéndome luz de gas para que sea yo misma la que me quite de en medio", declaró en una entrevista de esa época a la revista ¡Hola!.
Parte de ese maltrato se basaba en la obsesión del actor por controlarla. "Como mi marido siempre ha sido muy absorbente, tanto cuando nos casamos como durante todos los años que me ha tenido arrinconada, verme hecha un adefesio, hinchada como un globo, le hacía reafirmarse", recuerda la cantante. Aseguraba que parte de su autoestima se basaba en verla "cuanto más vieja y más gorda" mejor, ya que "menos tenía que preocuparse de nada". Algo que, en su opinión, era ridículo ya que ella siempre le había sido fiel.
Por otro lado, las continuas infidelidades de Pepe Sancho eran otro de los elementos que terminaron con el matrimonio. Según relata la artista, el problema no solo era que la engañara, sino el descaro con el que en algunas ocasiones cometió estas infidelidades. Uno de los cuernos que recuerda con más amargura ocurrió en el apartamento que la pareja poseía en Gran Vía cuando llevaban 22 años casados. Su hijo acudió al domicilio a recoger una cosa, y cuando entró en el "salón se encontró el bolso de una mujer y escuchó un ruido en el dormitorio", recuerda María. "O estaba follando o era la señora de la limpieza. Ya no podía inventarme nada para seguir engañándome, y decidí terminar con todo".
Otra de estas infidelidades que la actriz recordó en Sábado Deluxe ocurrió con Mila Ximénez, una buena amiga de la cantante. "Pepe se acostó con Mila estando casado conmigo. Me dijo que la había pillado con dos copas de más, y lo hicieron en mi cama cuando yo estaba haciendo una gala en Galicia". María lo descubrió porque "me encontré un reloj en mi coche que era de Mila". No obstante, no guarda rencor a la colaboradora de Telecinco, por el contrario, se lo tomó con humor, y ambas rieron ya que la cantante llevaba años queriendo separarse de Pepe.
Tras el divorcio "se llevó todo el dinero"
Después de 22 años de matrimonio con sus más y sus menos, María Jiménez todavía tiene muchas cosas que contar, y eso lo demostró el sábado. Durante su entrevista, la cantante afirmó que quien tenía el dinero al inicio de la relación era ella. "Hice separación de bienes, pedida por él antes de casarnos. A mi me daba vergüenza pedírselo, pero yo vi el cielo abierto cuando él me lo pidió, porque él no trabajaba". Así, durante mucho años de duro trabajo gracias al cual consiguió todo lo que tuvo porque lo "invertí y lo compré yo. Él no hizo nada. Él empezó a ganar dinero cuando hizo carne trémula", recordó.
Una situación económica dispar que se vio agravada tras su divorcio, después del cual Pepe le "dejó 4 millones de pesetas. Lo que había en el banco se lo llevó, se llevó todo". Aunque no puede dar las cifras exactas "porque él llevaba las cuentas", da a entender que era una cifra grande.
No obstante, la cantante también deja entrever que no era muy bueno en lo que al aspecto económico se refiero. En relación con la compañía que heredó su hijo, después de un juicio donde se le concedió la legítima, María asegura que se trataba de una "empresa llena de deudas".
En resumen, un conjunto de críticas y ataques contra Pepe que realizó tanto en vida como tras su muerte y que, previsiblemente, continuarán durante muchos años más.
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