Ben Affleck se sincera y habla de su complicado proceso de desintoxicación
- El actor californiano anunció el fin de su tratamiento de cuarenta días de duración, pero seguirá recibiendo atención médica.
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Ben Affleck (46 años) está atravesando uno de los peores momentos de su vida. Este jueves se sinceró en sus redes sociales y compartió con sus seguidores sus últimas vivencias, en las que relata sus problemas con el alcohol. Su posición no es nada fácil. Este gesto valiente ha provocado numerosas reacciones entre los casi 13.000 comentarios de la publicación.
Hace unos días que abandonó el centro de rehabilitación en el que ha estado ingresado cuarenta días. El de California se ha abierto por completo y ha hablado sin tapujos de cómo ha vivido el proceso de desintoxicación de su adicción al alcohol, enfermedad contra la que lleva luchando desde hace años. A pesar de que en su día ya confesó que padecía este problema, en esta ocasión ha dado un paso más y ha logrado sacar su lado más profundo.
El actor sabe muy bien que, aunque haya terminado el intenso tratamiento de cuarenta días, todavía no está todo hecho. Ha confesado en su instagram que "seguirá con atención ambulatoria en las próximas semanas". Además no está solo. Sus seres queridos están cerca de él y le apoyan en todo, sobre todo su familia, que es el pilar fundamental en todo este proceso.
Lleva años luchando para superar sus problemas con el alcohol. Muchos intentos a las espaldas y muchas vivencias. La actriz y madre de sus hijos Jennifer Garner (46) ha jugado un papel muy importante en todo este asunto. Ella fue quién le ingresó en un centro de desintoxicación en Malibú. Ha pasado poco menos de un año desde que se divorciaron, pero mantienen una buena relación, sobre todo por el bien de sus tres hijos.
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Escribir y hablar sobre su enfermedad le ha venido bien. Además, la exposición puede servir de ayuda para otros que se encuentran en su misma situación. El el texto de Instagram no han faltado los agradecimientos a todas las personas que le han tendido su mano y dedicado su tiempo: “El apoyo que he recibido de mi familia, amigos y fanáticos significa más de lo que puedo decir. Me dieron la fuerza para poder hablar de mi enfermedad con otros”.
No tiene ninguna intención de rendirse, y así lo ha confesado recientemente. Sabe que no es tarea fácil y que la total superación es difícil de conseguir y requiere una lucha constante: “Luchar contra cualquier adicción es una lucha de por vida y difícil. Debido a eso, uno nunca está realmente dentro o fuera del tratamiento. Es un compromiso a tiempo completo. Estoy luchando por mí y por mi familia”, confesó el actor en la publicación.
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