Irene Montero (30 años) ha encabezado este domingo la manifestación convocada en Madrid contra la violencia machista. La número dos de Podemos se encuentra de baja por maternidad tras el nacimiento de sus mellizos, Leo y Manuel, que llegaron al mundo de forma prematura el pasado 3 de julio con tan solo 27 semanas de gestación.
Es la primera vez que Montero se separa de sus hijos, que están a punto de cumplir cinco meses, para acudir a un acto público. La ocasión no ha sido elegida al azar sino que es una causa con la que la política se siente estrechamente comprometida. La portavoz de Podemos en el Congreso de los Diputados ha querido dar visibilidad e importancia en el Día Internacional por la eliminación de las Violencias hacia las Mujeres para "demostrar la fuerza del movimiento feminista".
Sonriente, afable y cómplice con las mujeres que se acercaban a saludarla, Montero ha reaparecido tras un tiempo de recuperación y protección continua a sus dos pequeños. Leo y Manuel Iglesias Montero nacieron el pasado 3 de julio con apenas seis meses de gestación. Tanto Pablo Iglesias (39) como la propia Irene (30) han estado volcados al cien por cien en los cuidados de los pequeños desde que nacieran.
Justo dos meses después, el 3 de septiembre, el líder de la formación morada volvía a la vida pública y lo hacía no sin antes publicar una emotiva carta en la que hablaba, junto con Irene, del sufrimiento de sus mellizos: "Hemos estado con nuestros pequeños cada día, pero con nosotros estuvieron nuestras familias y nuestros amigos y compañeros que no han dejado de cuidarnos en ningún momento. Sin los abrazos de nuestra tribu todo habría sido mucho más difícil" [...] "Somos republicanos pero recordaremos que un rey y una reina llamaron para preguntar por nuestros hijos y que todos nuestros rivales políticos preguntaron con frecuencia cómo estaban. Somos ateos pero explicaremos a nuestros hijos que nuestros amigos creyentes rezaron por ellos. Nos consta que la Virgen del Tránsito, Santa Rosa de Viterbo y Santa Maria Liberatrice fueron interpeladas (y nunca se sabe…)".
Un momento que su compañera de partido y de vida también aprovechaba para enviar un mensaje independiente a través de sus redes sociales. Un comunicado con el que no solo agradecía todas las muestras de cariño sino que anunciaba que "seguía de baja maternal", pendiente de sus pequeños, pero "atenta a las cosas que pasan en nuestro país, a la actualidad y a las cosas que nos preocupan".
En estos días ya se encuentran todos en casa, tras haber recibido el alta hospitalaria el pasado 8 de octubre del Hospital Materno Infantil del Gregorio Marañón, el lugar en el que los hijos de Irene y Pablo han estado ingresados más de tres meses. Los mellizos, según publicó JALEOS en exclusiva, deberán seguir acudiendo a consulta de neonatos y en el caso de necesitarlo también serán asistidos en atención temprana. La ayuda de profesionales con revisiones periódicas es clave para evaluar tanto el estado físico como el psicológico de los bebés.
Irene Montero continúa de baja maternal y ocupará de nuevo su escaño en el Congreso de los Diputados a partir del mes de enero. La pareja política deja atrás un año agridulce. Feliz, por el nacimiento de sus dos primeros hijos en común, aunque complicado por la forma inesperada y prematura en que llegaron.
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