Manu Tenorio (43 años) ha tenido que pasar de nuevo por el quirófano debido a las consecuencias de la descarga eléctrica que recibió este verano. Tras el accidente, el cantante sufrió graves quemaduras en su rostro, brazos y manos de las que todavía se está recuperando en la actualidad.
El cantante ha sido el encargado de relatar esta nueva visita al hospital a través de sus redes sociales. En sus stories ha publicado una imagen en la que aparece tumbado en una camilla de un hospital de la Comunidad de Madrid, junto al mensaje: "¡Ya está! Es absurdo retrasar lo inevitable".
Una intervención de la que se ha recuperado al poco tiempo, tal y como atestigua en sus siguiente stories. El cantante aparece sosteniendo una guitarra con su mano izquierda, repleta de vendas, y junto al mensaje: "Es lo que hay... Mientras queden dedos que se defienda y un corazón combativo".
En noviembre ya anunciaba que era probable que tuviera que volver a pasar por la mesa de operaciones: "El problema es que en el brazo todavía tengo una herida que todavía tiene que cicatrizar y estamos viendo si pasar otra vez por quirófano. Pero bueno, estoy bien", aseguraba.
En agosto el artista tuvo un accidente en su domicilio, cuando el cuadro eléctrico produjo un cortocircuito que desembocó en varias quemaduras en el brazo, el antebrazo y la mano. Como consecuencia, Tenorio tuvo que estar ingresado en el hospital La Paz de Madrid donde los médicos le trataron las heridas.
Poco después, el propio artista reaparecía en distintos medios y en sus redes sociales para relatar cómo había vivido esta experiencia traumática. Desde este verano Manu ha tenido que llevar distintas partes de su cuerpo vendadas, para cubrir las graves quemaduras del cortocircuito.
Además, ha tenido que hacer frente a los fuertes dolores de los tratamientos posteriores: "Me llenaron los brazos de grapas, porque me pusieron como una especie de segunda piel, que lo que hace es mantenerte tensa la tuya para que no se te vaya y por debajo se te regenerara, que para sujetarlo se usan grapas".
En casa la situación también fue bastante complicada. "Te quitan los tubos y te tratan de paliar el dolor con medicamentos, pero el dolor es insufrible", narraba visiblemente afectado el artista en El programa de Ana Rosa.
El brazo izquierdo (el que aparece en la segunda imagen que ha compartido esta semana el artista) ha sido el más perjudicado. Unas consecuencias tan graves que ha tenido que pasar de nuevo por quirófano.
Durante todo este tiempo su gran apoyo ha sido su mujer y madre de su hijo, Silvia Casas (44), "su bastión", como el propio Manu la califica. La actuación de su pareja en ese momento fue primordial, pues "reaccionó inmediatamente" y evitó que las consecuencias pudieran ser más graves.
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