Álvaro Morte (45 años), más conocido internacionalmente como 'El profesor' por su trabajo en La casa de papel, se encuentra confinado en su casa pero, a pesar de la difícil situación que atraviesa España, este viernes será distinto. Este 3 de abril se estrena la cuarta parte de la serie en Netflix y por eso el actor está de celebración. Además, el hecho de que medio planeta esté encerrado en sus hogares impulsará las cifras de audiencia, y él será el primero, ya que podrá verla entera junto a su mujer y sus dos hijos.

El actor vive en un piso humilde, la fama mundial que ha tomado tras convertirse en el líder de una banda de atracadores en la ficción no le ha transformado en alguien avaricioso. Al revés, valora mucho más cada oferta de trabajo que le llega, porque es consciente de que sus compañeros de profesión no tienen tal suerte y él mismo ha vivido durante años esa escasez de papeles.

Su currículum está lleno de obras de teatro en las que ha participado y siempre ha sido un rostro habitual en series diarias de TVE o Antena 3. Pero un día llegó el éxito arrollador y unos abultados ingresos económicos sin necesidad de robar ningún banco. Fue tan inesperado que incluso su entorno más cercano y personal quedó sorprendido tras décadas de trabajo en el mismo sector. "Mi chica me decía: 'Tú ya no vas a pegar ningún pelotazo, eso es para veinteañeros", confesó en una entrevista para El País.

Afortunadamente, su pareja se equivocó de lleno. Ella es Blanca Clemente, estilista de profesión, y socia fundadora junto a Álvaro de la productora 300Pistolas, que crearon para dar salida al teatro español y a sus artistas. La madrileña es la testigo principal del ascenso de Morte, ya que se conocieron años antes de que el guion de La casa de papel fuera ni siquiera una idea lejana en la mente de sus directores.

Blanca es su compañera de vida, su apoyo máximo, su gran amor y la madre de sus dos hijos. Los pequeños León y Julieta son los mayores tesoros del actor. Y con ellos lleva a cabo siempre su plan perfecto: disfrutar de la naturaleza.

Cuando no está realizando castings, o de gira promocional, estudiando guiones o grabando, al intérprete le encanta perderse en la playa, el campo o la montaña. En estos lugares encuentra la calma y la desconexión ideal para dejar a un lado el ajetreado mundo de la 'farándula' y centrarse en lo que verdaderamente importa.

Le gusta hacerlo solo cuando está agobiado por el trabajo, pero su 'plan de escape' favorito es en compañía de su familia. Cuando su apretada agenda lo permite, Morte se pierde en bosques junto a Blanca, León y Julieta, quienes disfrutan tanto como él entre árboles, césped y hasta animales de granja.

Sus "ratones", como el propio actor llama cariñosamente a sus hijos, sacan de él su faceta más paternal, muy alejada de la frialdad emocional que muestra el Profesor en la serie de Netflix. De hecho, quienes le conocen aseguran que es todo lo contrario a su personaje; Álvaro es sensible y extremadamente empático con todos los seres.

En este sentido, los pequeños de la casa saben sacar el lado más divertido y cariñoso del actor. Con él juegan, aprenden, indagan sobre las maravillas de la naturaleza e incluso bailan mientras hacen las tareas del hogar como fregar la vajilla.

Esta faceta no estará presente en la nueva temporada de La casa de papel que se estrena este viernes. No al menos en la pantalla, pero seguro que este lanzamiento se convierte en la mejor excusa para que la familia Morte Clemente se reúna ante el televisor y se acurruque en el sofá con un gran bol de palomitas. Un plan de confinamiento perfecto, a la espera de ver cuál es el plan del Profesor para sacar a su banda, liderada por Úrsula Corberó (30), del Banco de España.

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