Tras dieciohcho días en prisión, Ernesto Neyra (58 años) ya disfruta de la libertad absoluta en su casa con su pareja Rocío, a la que se la pudo ver salir de su casa con un casco puesto y subiéndose en la moto. Y es que su novia se ha convertido en su gran apoyo en estos momentos tan duros para el bailaor flamenco. Como no podía ser de otra manera, Ernesto ha recibido muchas visitas en su domicilio, gente querida que se ha preocupado por cómo estaba tras haber estado más de medio mes entre rejas.

Neyra ha recibido la visita de sus amigos. Muchas personas entran y salen del hogar, personas a las que tiene aprecio y que se han querido preocupar por el estado emocional del bailaor. Y es que para celebrar tan buena noticia, como es la libertad absoluta de este, muchos acudieron a su encuentro.

Han sido días muy duros para Ernesto Neyra que ha visto cómo su imagen pública se veía manchada por las declaraciones de su expareja, Lely Céspedes, quien ha acudido a los platós de televisión para hablar del infierno que pasó al lado de él.

Ernesto Neyra fue detenido y encarcelado el pasado lunes día 10 de agosto en Matalascañas -Huelva- donde se encontraba alojado en un hotel junto a su actual pareja, Rocío.

El bailaor, sobre el que pesaba una orden de busca y captura desde el pasado 20 de mayo, fue detenido por la Policía Nacional en el citado municipio costero onubense al incumplir con la obligación de ingresar en prisión de manera voluntaria tal y como se le dictó el 13 de febrero de este año. Se le impuso una pena de tres meses por un delito continuado de impago de pensiones a los tres hijos que tiene con su exmujer.

Su padre da la última hora

Cuando una persona pasa por el peor momento de su vida o quizás, por una situación muy delicada, no solamente el malestar se adueña de él, también de las personas que le rodean. Esto es lo que le ha ocurrido al círculo más cercano de Ernesto Neyra, quienes han sufrido la entrada a prisión del bailaor.

El padre de Ernesto Neyra se ha mostrado de lo más agradecido con la prensa, pero ha preferido guardar cautela frente a las actuaciones que emprenderá su hijo una vez fuera de la cárcel. Y es que como ya confesó para Sálvame, va a tomar medidas legales contra Lely Céspedes por los testimonios que ha arrojado sobre él en televisión.

A primera hora de la mañana abandonó el domicilio de Ernesto Neyra donde seguramente se encontraba acompañándolo en estos momentos tan difíciles para la familia. Muy discreto con sus respuestas, solo confesaba cómo se encontraba el bailaor después de haber abandonado la prisión: "Está muy bien, gracias".

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