Jesulín de Ubrique (46 años) quiere sacarle rentabilidad a Ambiciones, la mítica finca de la familia Janeiro que compró hace 30 años. El torero ha comenzado a hacer obras y reformas para alquilarla, a partir del próximo año, con el fin de realizar allí eventos de lujo.
De acuerdo con Semana, el torero no está solo en esta nueva aventura empresarial. Su hermano mayor, Humberto Janeiro (48), y un familiar político, también forma parte de este proyecto que, según estiman, podría comenzar a mediados de 2021. De acuerdo con la revista, la mujer del diestro, María José Campanario (41), es otra de las que tendrá un papel importante en este negocio con el que Ambiciones volvería a habitarse.
Portada de la revista 'Semana'.
La familia Janeiro vivió en la enorme finca durante décadas. También lo hizo Belén Esteban (47), expareja de Jesulín, a pesar de que -según ella misma contó a su salida- nunca la sintió como su hogar. Sin embargo, desde hace muchos años se encuentra deshabitada. Dentro de su terreno, desconocido para la gran mayoría, se encuentra una serie de espacios que hacen de Ambiciones un lugar atractivo para llevar a cabo diferentes eventos.
La finca se encuentra en Prado del Rey, a pocos kilómetros de Ubrique, Cádiz. Posee más de 300 hectáreas de terreno y una amplia residencia que, entre sus comodidades, incluye 10 dormitorios, gimnasio, sala de juegos y sala de trofeos. Además, cuenta con sus propia plaza de toros y una capilla que serviría a las parejas que deseen contraer matrimonio.
María José Campanario y Jesulín de Ubrique frente a la finca Ambiciones.
Jesulín de Ubrique compró Ambiciones en 1990, cuando vivía sus años dorados, por una cantidad cercana a los 90 millones de pesetas. Ahora, 30 años después y tras la muerte de su padre, Humberto Janeiro, ha visto en ella una oportunidad de negocio. Fue precisamente su progenitor, quien en aquel momento administraba sus bienes. Él, de hecho, vivió allí hasta 2003.
El adiós a Humberto Janeiro
El padre de Jesulín falleció el pasado mes de agosto, a los 76 años de edad tras haber estar ingresado durante varios días en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Jerez de la Frontera. Hasta allí había llegado desde la clínica privada San Juan Grande, a la que acudió de urgencia aquejado de una infección en el pie provocada por su diabetes.
Según adelantaba en su momento el programa Viva la vida, en las últimas horas, y pese a que la familia pensaba que había una mejoría por el hecho de haber abandonado la UCI y haber sido trasladado a planta, Humberto sufrió un fallo multiorgánico que le ocasionó la muerte.
En los últimos años, el padre de Jesulín había tenido varios baches de salud. En 2009 se le implantó una prótesis de rodilla y avanzado ese mismo año, volvió a ingresar para ponerse un marcapasos. En 2015, regresó al quirófano para ser operado de la cadera tras un accidente de tráfico. Meses antes de su muerte también fue intervenido. Entonces, él mismo aseguró que no había sido nada grave.
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