Antonio Sánchez Casado tuvo claro desde siempre que lo suyo era la comunicación y, en concreto, la televisión. El periodismo para él es absolutamente vocacional. La hemeroteca, siempre tan caprichosa y selectiva, lo recordará como rostro indispensable del mítico programa Tómbola, pero también como polemista en Telecinco en el programa de Ana Rosa Quintana (67 años).
Se puede decir, sin miedo a equivocarnos, que su carrera ha sido de éxito, participando en los programas más punteros de la televisión y colaborando en tertulias de corte rosa o en realities como Gran Hermano. En los últimos años, se le ha podido ver participando en el programa que presentaba Vicky Martín Berrocal (50) en TEN TV, #TENdencias. También centrado en la historia del arte, una de sus grandes pasiones. Recientemente, ha reaparecido en el espacio Así es la vida.
Sánchez Casado siempre ha hecho un tipo de televisión mucho más blanca, de corte familiar y en la que no cabía la demanda ni el insulto. Si bien se decía antes que lo suyo era totalmente vocacional, hay que puntualizar que no siempre se dedicó Antonio a lo que realmente estaba llamado. "En realidad yo soy historiador del arte y trabajaba en el Museo del Prado cuando la televisión vino a visitarme y a partir de ahí me fui involucrando cada vez más hasta hoy", desveló hace unos años.
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Antes de que la televisión llamara a su puerta, trabajó varios años en el gabinete didáctico del Museo del Prado como profesor de historia. No obstante, pronto se dio cuenta de que lo suyo no era eso. Su andadura pública arrancaba en 1992 en Telemadrid presentando la sección de Objetos imposibles en el programa La noche se mueve presentado por el Gran Wyoming (68) en el que fue el primer late night de la televisión en España.
Llegó a la televisión sin pretenderlo y haciendo historia. Pronto el público se dio cuenta de que en él había madera. Antonio ha participado en programas de Antena 3 y Canal Sur, así como en Tómbola, programa pionero del show rosa. "A principios de los noventa, cuando arrancaban las cadenas privadas, había esa energía de que era todo nuevo, todo valía. Ahora, todo ha ido poco a poco a la alcantarilla. La gente no quiere ver ese tipo de cosas, sino cosas que les sirvan", reflexionaba en 2017 cuando se enroló en TEN.
El año 1993 fue decisivo en su vida: ingresó en Telecinco. Su vida estaba a punto de cambiar. Dirigió y realizó la sección de vÍdeos de humor en el programa Este país necesita un repaso, presentado por José Luis Coll. Era la primera vez que se realizaban en televisión vídeos humorísticos de contenido político.
En 1995 se convierte en referencia del programa ¡Qué me dices!, que acabará presentando en 1998. El programa informa del mundo del corazón en tono de humor, lo que da un vuelco histórico al tema y cuyas consecuencias aún perduran. Cabe puntualizar que este espacio fue la antesala de lo que, tiempo después, desembarcaría en la cadena de Fuencarral: Aquí hay tomate. "La televisión tiene que evolucionar y espero seguir en esa evolución", aseguró hace unos años. Es un privilegiado, y lo sabe.
Puede presumir, además, de haber trabajado con los más grandes, como Ana Rosa Quintana y María Teresa Campos (82). En 2004 aterrizó en Día a día, y en 2005 en El programa de Ana Rosa. En esos años también probó suerte como polemista y comentarista de realities como Gran Hermano. Una de sus mayores señas de identidad es que siempre se alejó del perfil histriónico.
Quiso aportar el lado bueno y amable, tomando distancia de otros perfiles más aguerridos. No solamente en el mundo de la televisión ha dejado su huella e impronta, también en el literario: ha publicado dos libros, El kitsh español e Historias de amor entre hombres que hicieron historia.
En Twitter, el periodista muestra su otra gran pasión, la música y la danza. El arte, en general. Promociona con mucha frecuencia actuaciones en el Teatro Real. Más allá de sus recomendaciones culturales, Antonio Sánchez Casado también utiliza sus redes para subir fotos de paisajes y viajes. Además, en YouTube, Sánchez Casado, un apasionado de la cultura y la literatura, recita relatos de Don Quijote de la Mancha, grabándose vídeos.
No esconde que ha hecho de todo y en su orden: "Sobre todo, en televisión. Antena 3, Telecinco, Canal Nou, Canal Sur, Telemadrid, TVE... pero también tuve una sección en Radio Nou, he escrito artículos para prensa y varios libros". Cuando en su día dijo en casa aquello de 'quiero salir en la tele', no fue fácil. Así lo contó en 2013: "La verdad es que lo de la tele a mis padres no les gustó mucho. No les parecía serio, pero creo que ya se van haciendo a la idea".
Cuando no está en la pequeña pantalla, "me encanta esquiar, montar en bici, tenis o pádel, pero en la tele solo veo la gimnasia deportiva". Y para terminar, advierte dónde se lo puede ver cuando no está haciendo pantalla: "Mi proyecto continuo es buscar proyectos pero, mientras tanto, investigo temas relacionados con el arte".
En 2021, EL ESPAÑOL pudo entrevistarlo y confesó que está felizmente enamorado: "Estoy casado con un señor estupendo, que también me ayuda a pasar esta etapa de mi vida". En la actualidad, ha hecho una reaparición televisiva en el espacio Así es la vida, de Telecinco.
Cuando este medio lo entrevistó, habló así de retornar a la pequeña pantalla: "Yo nunca he renunciado a nada. Nunca he dicho 'nunca más volveré a hacer esto'. Es un medio en el que me lo he pasado genial y guardo muchos recuerdos. He aprendido y he crecido. Estoy en otra etapa. Me parece triste ir en contra de la corriente. Si no interesas, te vas".
Como no podía ser de otro modo, departió también de arte y de su día a día: "Trabajo mucho en casa ahora. Me dedico más a la historia del arte, en concreto a la historia del mueble".