Así es Elke Büdenbender, la anfitriona de Letizia en Alemania: su difícil pasado y un estilo sobrio
La Reina comienza su nuevo viaje de estado el lunes de 17 con una agenda en la que compartirá muchos actos con la esposa del presidente federal.
13 octubre, 2022 02:57Han pasado cuatro años desde que se encontraron por primera vez y ahora volverán a verse en el viaje de estado que los Reyes inician el próximo lunes 17 de octubre y que es el primer destino internacional de este 2022. Letizia (50 años) tendrá como anfitriona a la primera dama alemana, con quien protagonizará algunos actos en una agenda paralela a la del Rey. Ella es Elke Büdenbender (60), la esposa del presidente federal Frank-Walter Steinmeier (66), que lleva en el cargo desde 2017.
Un año después fue cuando se produjo su cita institucional en España, durante un almuerzo en Zarzuela, donde la Reina y su invitada mostraron una especial sintonía. Entonces no pudieron pasar mucho tiempo juntas porque fue una visita breve del mandatario alemán, sin embargo, en este viaje tendrán la oportunidad de compartir inquietudes y un programa muy del gusto de ambas, con el arte y la mujer como foco. Asistirán juntas a la exposición Escribir todos sus nombres, en el Palais Populaire de Berlín, una muestra que reúne obras de mujeres artistas.
Tienen mucho en común y las dos están muy comprometidas con causas solidarias y tareas de cooperación. La historia personal de Elke Büdenbender ha forjado su carácter a golpe de esfuerzo y de superar algunas dificultades. Discreta, ha ido adaptándose poco a poco a la expectación que despierta como primera dama y también ha transformado ligeramente su estilo, sobrio y muy clásico.
Nacida Siegen, una ciudad cerca de Bonn, sabe lo que es trabajar desde muy joven pues lo hizo en una fábrica como dependienta al terminar la educación secundaria. Posteriormente estudiaría Derecho en la universidad de Gießen y aprobaría las oposiciones para juez, desempeñando su cargo en el tribunal administrativo de Berlín. Se vio obligada a dejar su carrera cuando su marido ganó las elecciones para acompañarle en su camino político al frente del país.
No en vano llevan casi 30 años juntos. Elke y Frank-Walter Steinmeier se conocieron en la facultad y se casaron en 1995. Son padres de una hija llamada Merit (26), que ha cursado la carrera de árabe y que apenas se deja ver en público salvo en algún acto político de su progenitor. La pareja siempre ha estado muy unida y en el año 2010 tuvo que enfrentar un serio contratiempo de salud, cuando los médicos le comunicaron a la primera dama alemana que necesitaba un trasplante de riñón para poder seguir viviendo.
El presidente no lo dudó un momento y tras pasar las pruebas diagnósticas que confirmaron que su órgano era compatible, ambos pasaron por quirófano para someterse a la ansiada intervención. Frank-Walter estuvo varios meses convaleciente, pero valió la pena ya que su mujer se recuperó y actualmente lleva una vida completamente normal.
A diferencia de lo que sucede con Letizia debido a su posición como reina consorte, Elke no tiene una agenda especialmente predefinida ni cerrada, más allá de estar presente junto a su marido en todos aquellos actos que sean necesarios, como viajes de estado, campañas electorales, recepciones oficiales, etc. Sin embargo, eso no quiere decir que no tenga sus tareas, que están relacionadas con la cooperación y las causas benéficas; dos de los pilares también de las funciones de la Reina española. Como ella, Elke también colabora activamente con Unicef.
En lo que sí se diferencian es en cuestiones de estilo, pues la primera dama es bastante más sobria y funcional que la esposa de Felipe VI (54). En aquel primer encuentro entre ambas en 2018, la exjueza alemana optó por un sencillo vestido blanco de largo por la rodilla con una chaqueta satinada, mientras que Letizia destacó con un look en rojo de Hugo Boss con aberturas en las mangas. Ambas elegantes, pero muy diferentes.
El armario de Büdenbender está compuesto por prendas de cortes minimal, aunque de vez en cuando luce estampados florales, siempre en colores discretos, y conjuntos de aire dandi de pantalón y blusa sedosa. Uno de sus estilismos más llamativos lo llevó el año pasado durante la visita del presidente alemán a Suecia cuando animó su abrigo retro con un sombrero a juego. No es muy de complementos para el pelo, algo que comparte con la Reina.
En cuanto a sus vestidos de gala, que tendrá que lucir el lunes 17 de octubre para la cena con Letizia y el Rey, quizá vuelva a innovar como hizo el pasado noviembre cuando sorprendió con un vestido de lentejuelas en un la ópera. Casi se podría apostar a que elegirá el rojo o el azul, dos de sus tonalidades favoritas. Son varias las citas que tendrá que presidir durante este viaje de Estado que durará tres días.