Este pasado sábado, 2 de diciembre, el escenario del madrileño Teatro La Latina tuvo como telón una gran fotografía de Concha Velasco, quien fallecía horas antes a los 84 años. En las tablas, donde tantas obras presentó, se le despidió. Desde las 13:30 y hasta las 22:00, familiares, amigos y centenares de seguidores anónimos dieron su último adiós a la chica ye ye. 

El féretro con los restos de la artista fue recibido al grito de "viva Concha" alrededor de las 14:00. Los primeros en llegar al Teatro La Latina fueron sus hijos, Manuel y Paco. El primogénito, como venía haciendo desde hace un tiempo, ejerció de portavoz. "Gracias por todo el cariño que nos tenéis. Es la mejor persona del mundo. La mejor madre del mundo, súper generosa. Y el talento como actriz... descomunal. El miércoles estaba muy bien y ayer se puso muy malita. Ha muerto con Paco y conmigo, de la mano", expresó sin poder contener las lágrimas.

Una vez dentro del teatro, Manuel y Paco no se separaron del féretro donde reposan los restos de su madre. Se fundieron en un cálido abrazo y atendieron a todos aquellos que quisieron despedir, para siempre, a la intérprete vallisoletana. 

[Primeras palabras de Manuel, el hijo mayor de Concha Velasco: "Ha muerto con Paco y conmigo, de la mano"]

Manuel y Paco, los hijos de Concha Velasco en la capilla ardiente de la actriz. Gtres

Paco estuvo arropado por su hijo, Samuel, el único nieto de Concha y uno de los protagonistas de la capilla ardiente. El joven, de 15 años, acudió junto a su madre, vestido de riguroso luto y llevando un cuadro de su abuela que más tarde se situó al lado del féretro. Tras ellos, y visiblemente conmovida, llegó la actriz Manuela Velasco (49 años), quien siempre estuvo muy unida a su tía. 

Manolo, único hermano de Concha y a quien la intérprete reclamaba su visita en la residencia en la que vivía, también estuvo presente, arropando a sus sobrinos. Fue la pasada primavera cuando Aurelio Manzano informó en Fiesta que la intérprete se habría quejado ante su amigo Giorgio Aresu de que el padre de la actriz Manuela Velasco no la visitaba y que tan sólo la llamaba por teléfono.

Al margen de la familia, a la capilla ardiente de Concha Velasco también acudieron figuras políticas. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (51), fue uno de los primeros en acercarse al Teatro La Latina. "Es un ejemplo de dedicación, trabajo constante y compromiso. No solo con la cultura, sino también con España", decía sobre la actriz.

Isabel Díaz Ayuso (45), que visitó a Concha Velasco en varias ocasiones mientras vivía en la residencia de mayores, también se acercó a la capilla ardiente de la vallisoletana, recordándola como una mujer "alegre, vibrante, desinhibida, buena... Divertida, creativa y con una memoria inmensa". La política del PP aseguraba que le tenía "una estima enorme". 

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Nadia Calviño (55) o Margarita Robles (67), fueron otras de las políticas que quisieron dar su último adiós a la chica ye ye. La vicepresidenta primera y ministra de Economía aseguró que Concha Velasco "no solo era una gran artista, una dama del teatro, del cine y de la televisión", sino que también era "una gran persona, generosa, positiva, siempre con energía y ayudando a los demás".

Por su parte, la ministra de Defensa contó ante los medios que la trató "mucho en los últimos tiempos". "Me enviaba muchos wasaps y siempre me decía 'tenéis que seguir trabajando. Tenéis que seguir haciendo'. Yo creo que eso nos da fuerza a mujeres como ella, mujeres que han escrito una página en la historia de España y que nos marcan mucho el camino, ese camino de seguir trabajando, de seguir unidos", dijo Robles.

Tampoco faltaron sus compañeros de profesión. José Sacristán (86) no quiso contar anécdotas, pero sí se deshizo en elogios hacia la intérprete: "Tenía la voluntad de vencer cualquier tipo de adversidad. En el trabajo y en la vida. Marisa Paredes (77), por su parte, la describió como "una actriz completa y una maravillosa compañera".

Paula Echevarría (46) o Marta Hazas (45) también acudieron a la capilla ardiente y se mostraron muy cercanas y cariñosas con los hijos de Concha. Otra de las que acudió al Teatro La Latina fue Carmen Borrego (57), en solitario. Llamó especialmente la atención la ausencia de su hermana, Terelu (58), quien tenía una gran relación con la actriz. Según ha podido saber EL ESPAÑOL, la colaboradora de Mañaneros no pudo estar en el último adiós a la vallisoletana porque recientemente se sometió a una operación de boca. 

Este domingo, 3 de diciembre, los restos de Concha Velasco serán trasladados a su Valladolid natal. El funeral será oficiado en la catedral de la ciudad, según informaron fuentes municipales y más tarde confirmó el hijo mayor de la actriz, Manuel. Posteriormente, está previsto que la eterna chica ye ye sea enterrada en el Panteón de Personajes Ilustres, en el Cementerio de El Carmen.