Isabel Preysler, Tamara Falcó, Enrique Solís y Vicky Martín Berrocal con el palacio de la Motilla de fondo en un fotomontaje de El Español.
Los Solís, los aristócratas que sólo emparentan con sagas de abolengo: de la casa de Alba a los Falcó y Martín Berrocal
Desde hace unos días, Enrique Solís, hijo pequeño del marqués de la Motilla y Carmen Tello, ha vuelto a la actualidad por estar de nuevo ilusionado.
24 febrero, 2024 00:55Millonarios y discretos. Así son los Solís, una de las familias aristocráticas con más relumbrón de la sociedad andaluza que tiene por norma no figurar en la prensa del corazón. Sin embargo, desde hace unos días, Enrique Solís Tello (33 años) ha acaparado el interés de los paparazzi a raíz de su relación sentimental con Vicky Martín Berrocal (50), que se convirtió en personaje a raíz de su boda en 1997 con Manuel Díaz El Cordobés (55). Fruto de su matrimonio nació Alba Díaz Martín (24), que pertenece a la última saga de influencers hijas de famosos.
Antes de continuar con las andaduras románticas del hijo menor de Miguel Ángel de Solís y Martínez Campos, XI marqués de la Motilla (76), y de Carmen Tello Barbadillo (68) -casada desde 2003 con Curro Romero (90)- es menester recordar cuál fue la primera gran aparición social de la familia Solís en las revistas del corazón, cuando empezaron a unirse con algunos de los apellidos más famosos de nuestro país.
Para ello hay que remontarse hasta el 18 de junio de 1988 cuando Matilde Solís (60) se casó por primera vez en el altar mayor de la catedral de Sevilla con Carlos Fitz-James Stuart y Martínez de Irujo (75), XIX duque de Alba, primogénito de Cayetana Fitz-James Stuart, XVIII duquesa de Alba, la mujer con más títulos nobiliarios del planeta.
El conde de Osorno Carlos Fitz-James Stuart y Belén Corsini, acompañados por el duque de Huéscar, Matilde Solís, duque de Alba y Sofía Palazuelo, tras su enlace matrimonial en 2022. GTRES
Como solía ocurrir décadas atrás, el pueblo sevillano se echó a la calle para ver a los protagonistas de la noticia y sus 2.000 invitados. En aquel día tan especial, la novia, de tan solo 25 años -15 menos que el novio-, lucía la legendaria tiara de los Alba La rusa creada por los joyeros Ansorena en platino y brillantes. Cayetana la vendería años después, ya que necesitaba liquidez para comprar un caballo pura sangre a su hijo Cayetano que por entonces era jinete olímpico.
A sólo 600 metros de distancia, el palacio del marqués de la Motilla y el palacio de Liria quedaron unidos para la historia. Entroncar con los Alba ha sido el mayor hito histórico de los Solís. Fruto de aquel matrimonio nacieron dos hijos, Fernando (33), XVII duque de Huéscar y heredero del ducado de Alba que está casado con Sofía Palazuelo (32), y Carlos (32), XXII conde de Osorno, unido a Belén Corsini (35).
El matrimonio de Carlos y Matilde -décima de los once hijos de Fernando de Solís-Beaumont y Atienza, X marqués de la Motilla y XIII marqués de Valencina, y de María Isabel Martínez de Campos y Rodríguez de la Boeta- quedó anulado en 2006. Conviene hacer un poco de historia con los Solís porque descienden de los Beaumont, la rama bastarda de la Casa Real de Navarra a la que también pertenecían la reina Fabiola de Bélgica y su hermano Jaime de Mora y Aragón.
Carlos Fitz James Stuart y Matilde Solís, en el entierro de Isabel Martínez Campos en 2017. GTRES
Tal y como hemos referido en el segundo párrafo, Fernando, hermano mayor de Matilde, se casó en 1977 con María del Carmen Tello, única hija de los cuatro vástagos que tuvo el prestigioso ginecólogo Enrique Tello Pérez con María del Carmen Barbadillo. El matrimonio duró hasta 1991. A la actual esposa del diestro Curro Romero aquel enlace la posicionó a nivel social ya que ostentaba el título de marquesa de Valentina, lo que le permitió frecuentar los círculos aristocráticos en los que mandaba Cayetana de Alba.
Su tren de vida fue elevado ya que su esposo era presidente y consejero del Banco de Andalucía y consejero del Banco de Vasconia, Banco de Crédito Balear y Banco de Castilla, filiales regionales que absorbió el Banco Popular en 2008 y que quebró una década después.
Además, varias de las empresas del aristócrata le reportan millonarios emolumentos como Abecera SL (producción agrícola combinada con la producción ganadera) que en el ejercicio de 2021, adquirió ganancias de 1.369.905 euros sobre unas ventas de 4.584.566 euros y tenía un activo de 22.807.469 euros. Con Solcampo (alquiler de bienes inmobiliarios por cuenta propia) los beneficios del ejercicio de 2022 ascendieron a 190.427 euros y tenía unos activos totales de 15,437.804 euros. Con El Prado Solar SL (producción agrícola combinada con la producción ganadera) según el balance de 2022 del Boletín Oficial del Registro Mercantil, los beneficios fueron de 266.724 euros, con unas ventas de 485.142 euros y un activo total de 5.582.340 euros.
Enrique Solís y Carmen Tello en la Semana Santa de 2017. GTRES
De los cuatro hijos del marqués de la Motilla y Carmen Tello es el pequeño, Enrique, el que más páginas rosa ha acaparado. Su romance con Tamara Falcó (42) se destapó en 2011 y finalizó un año más tarde, pero ninguno de ellos oficializó aquella relación de la que se hicieron eco todos los medios. Hasta esa fecha, el empresario había desarrollado su carrera en el anonimato y, desde entonces, los focos empezaron a posarse sobre el atractivo hijo de Carmen Tello. Desgraciadamente no pudo formar parte del celebrado clan Falcó Preysler.
El joven nuevamente es noticia por sus amoríos. En esta ocasión con la diseñadora Vicky Martín Berrocal, heredera de una gran fortuna andaluza ya que su padre, José Luis Martín Berrocal, era dueño de las empresas de autobuses Dama y La Sepulvedana, además de haber sido propietario de la ganadería El Toril, apoderado de grandes toreros como Manuel Díaz El Cordobés, empresario de Las Ventas y presidente del Recreativo de Huelva. Por méritos propios, su línea de moda la gestiona White and Brilliant SL que pertenece al grupo Scalpers, con la que facturó 1,8 millones de euros en 2019 y 2,3 millones de euros en 2021.
Por su parte, Enrique también es un hábil emprendedor ya que en 2013 fundó la cadena One Shot Hotel, que ya cuentan con establecimientos en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, San Sebastián y Oporto. Además de gestionar varias empresas que se encargan de actividades de otras sociedades holding, creó la firma de moda masculina Seëlk y es gestor de inversiones en Millenium Hospitality Real Estate dedicada a la adquisición y conversión de activos en hoteles de lujo.
