
Paula Sánchez Zurdo, exnovia de Miguel Palomo Danko, en un fotomontaje de EL ESPAÑOL junto al hijo menor de Palomo Linares.
Hablamos con Paula, la exnovia de Miguel Palomo Danko: "Al principio era encantador, pero dejó de parecerme el mismo"
EL ESPAÑOL charla con Paula Sánchez Zurdo después de demandar a los hijos del recordado Palomo Linares por un presunto delito de maltrato animal.
Más información: Sebastián Palomo Danko se querella contra la exnovia de su hermano tras acusarlo de un delito de maltrato animal
Paula Sánchez Zurdo sostiene que nadie la va a amedrentar ni a callar; va a seguir luchando por que se haga justicia en nombre de su querida Bronca. Ésta es una perrita que vivió en la finca El Palomar, propiedad de Sebastián Palomo Danko (47 años), el hijo mayor de Palomo Linares y la socialité Marina Danko (70).
Paula ha demandado tanto a Sebastián como al que fue su novio, Miguel Palomo Danko (44), por un presunto delito de maltrato animal. Alega esta mujer que el can pereció en un lamentable estado, víctima de un "linfoma de alto grado", como consecuencia de las secuelas que sufrió, siempre según la propia Sánchez Zurdo.
EL ESPAÑOL entrevista a Paula horas después de que Sebastián Palomo Danko se haya querellado contra ella por "calumnias". Los hermanos Palomo Danko niegan cualquier maltrato hacia ese animal, pero Sánchez Zurdo no se rinde. Tiene la fuerza de quien se sabe con la verdad y llegará hasta el final.

Paula Sánchez Zurdo junto a Bronca en una imagen de sus redes sociales.
Zurdo no sólo ha decidido alzar la voz a nivel mediático y judicial para narrar la tragedia que vivió Bronca, también ha escrito un libro, Bajo el mismo cielo. La historia de Bronca. Una historia real. Nada es suficiente para Paula con tal de honrar la memoria de su querida mascota.
¿Cuándo comienza su relación con Miguel Palomo Danko?
Mi relación con Miguel comenzó en 2017, nos conocimos casi por casualidad. En esa época me dedicaba a restaurar muebles y al llevar uno a una galería de arte coincidimos allí.
¿En qué momento entra en su vida Bronca?
Bronca llegó a mi vida casi al final de mi relación con Miguel. Solo estuve con ella tres meses. Era una cachorrita adorable, una bolita de peluche. Dormía conmigo y con mi otra perrita, Bala. Disfrutaba de los jardines de la finca y, dentro de la casa, le encantaba colocarse cerca de la chimenea. Me tenía completamente enamorada.
Desde el principio, ¿cómo fue la relación de Miguel con Bronca?
Mientras yo estuve con Miguel, su relación con Bronca era normal. Es cierto que no era tan cariñoso con ella como yo lo era con Bronca y Bala, pero nunca vi nada fuera de lo común. Jamás presencié que las maltratara.

Una imagen de Bronca con los ojos enfermos.
Explique la historia familiar de la finca El Palomar. ¿Quién era el propietario cuando usted llegó a la vida de Miguel y quién lo es ahora?
Cuando fui a vivir con Miguel a la finca El Palomar, su padre acababa de fallecer. Según tengo entendido, la finca pertenecía a la familia Lozano. Actualmente, hasta donde sé, el propietario es Sebastián Palomo Danko. No tengo más información sobre el asunto.
¿Cómo era la calidad de vida de Bronca en sus primeros tiempos con Miguel? ¿En qué condiciones estaba el animal?
Mientras vivía en la finca, Bronca tuvo una excelente calidad de vida. Era una perrita feliz y bien cuidada. Tenía todas sus vacunas, pienso de primera calidad, juguetes y todos los cuidados que requiere un cachorro. Yo me encargaba de ambas perritas para que no les faltara de nada.
¿Cuándo comienza usted a preocuparse por el bienestar de Bronca?
En 2022 me encontré con Sebastián en la calle. Me comentó que había comprado la finca El Palomar y que había echado a Miguel. Sé que nunca tuvieron una buena relación, pero en ese momento no me interesó demasiado el tema y no pregunté más.
En enero de 2023, un amigo mío buscaba adoptar una perrita de raza potencialmente peligrosa (PPP) y, en una conversación, me surgió la duda de si Bronca aún estaría en la finca. Llamé a Sebastián para preguntarle y me confirmó que Bronca seguía allí, que era de Miguel, pero que llevaba casi dos años sin ir a verla. Le pregunté si consideraría darla en adopción, pero me sugirió que hablara con Miguel. Sabía que después de cinco años sin contacto, él no me respondería.
Insistí para poder verla. Sebastián me advirtió: 'No te esperes un rottweiler de cinco años, parece muy viejo'. Me preocupó, pero él minimizó el asunto diciendo que solo tenía algo de artrosis. Seguí insistiendo para visitarla, pero él me daba largas. Finalmente, un día me llamó y me preguntó: '¿Tú crees que Miguel pudo haber pegado o atropellado a Bronca?'. Me sorprendí y le respondí que no lo creía. Me dijo que la perra no andaba.
Se asustó mucho.
Mi inquietud aumentó y le pedí una foto. Tardó en enviármela, pero cuando lo hizo vi a Bronca sentada dentro de una jaula, extremadamente delgada, con una herida en la zona del lomo y el ojo izquierdo visiblemente inflamado. Al preguntarle por su ojo, me respondió que solo era un efecto de la foto. En ese momento supe que algo iba realmente mal.
Decidí actuar con cautela para evitar que se negara a dejarme verla. Como seguía retrasando el encuentro, una noche fui a la Guardia Civil de Seseña para pedir ayuda. Me explicaron que, al tratarse de una finca privada, debía presentar una denuncia y esperar un juicio antes de que pudieran intervenir. Pero yo sabía que Bronca no podía esperar.

Paula, feliz, jugando con Bronca en una instantánea publicada en sus redes.
¿Qué hizo?
Llamé a Sebastián y le dije que estaba en la Guardia Civil. Le advertí que, si no me entregaba a Bronca, el Seprona intervendría y lo denunciaría. Se enfadó, me insultó, pero al final accedió y acordamos que iría al día siguiente a las 12:00.
El 11 de febrero de 2023, fui con mi padre a la finca El Palomar. Allí encontramos a varios perros en jaulas en condiciones deplorables. En una de las jaulas más alejadas estaba Bronca, tumbada en un rincón al sol, en los huesos, con el ojo en muy mal estado, la piel quemada y las patas traseras completamente rotas. Cuando la llamé, vino arrastrándose y llorando.
Rompí a llorar. Mi padre, al ver que estaba a punto de perder la calma, me dijo: 'Vamos a cogerla y nos vamos'. Sebastián y el guarda de la finca insistieron en que la cogiera yo porque, según ellos, era agresiva. ¿Cómo iba a ser una perra agresiva sin fuerzas, al borde de la muerte? Pero me contuve para evitar problemas y poder llevármela.
Mi padre la tomó en brazos con un cariño que aún me emociona. La colocamos en el asiento trasero del coche y, en el camino, ella me daba la patita y apoyaba su cabeza en mí, como si supiera que la estaba salvando. Lloré de tristeza y de alivio.
Acto seguido, ¿qué hicieron?
La llevamos de inmediato al veterinario Avenida del Mediterráneo. Los médicos lloraron al verla. Me informaron que tenía leishmaniosis avanzada, anemia severa, órganos desplazados, 20 kilos menos de lo normal, piel quemada por el frío y el calor, y que sus patas traseras tenían los ligamentos rotos. Además, su ojo izquierdo estaba ciego por un fuerte traumatismo.
Luché por ella con todas mis fuerzas. Gasté casi 20.000 euros en tratamientos veterinarios. Dos meses después, le diagnosticaron un linfoma de alto grado. Recibió quimioterapia semanalmente, con la esperanza de prolongar su vida. A pesar de todo, vivió un año y ocho meses más conmigo. El 27 de octubre de 2024, murió en mis brazos, tranquila y sin dolor. Aún tengo el corazón roto. Bronca fue lo mejor que me ha pasado en la vida.

La expareja de Miguel Palomo Danko acariciando a Bronca.
¿Cuándo termina su relación con Miguel y cuál fue el motivo?
Terminamos a principios de 2018. Fui yo quien decidió poner fin a la relación. Supongo que, como en muchas parejas, las cosas simplemente se acaban. No tengo mucho más que decir sobre eso.
¿Cómo definiría su relación con Sebastián mientras estuvo con Miguel?
Siempre tuve una buena relación con Sebastián. Nos llevábamos bien y le tenía bastante cariño.
¿Qué la enamoró de Miguel y cuándo cambió su percepción sobre él?
Al principio me trataba como una reina. Era muy encantador. Pero con el tiempo dejó de parecerme el mismo. Supongo que al inicio de cualquier relación todo es bonito, pero luego conoces realmente a la persona. Con el tiempo, dejó de gustarme y decidí terminar.
¿Cómo la trató la familia Palomo Danko? ¿Cómo era su relación con Marina Danko?
Siempre me trataron bien. A Marina la conocí en un viaje a Mónaco y tuvimos una relación cordial, aunque no coincidimos demasiado.
¿Actualmente mantiene contacto con algún miembro de la familia?
No, y tampoco quiero. Me han decepcionado profundamente. Marina incluso publicó un mensaje defendiendo a sus hijos, diciendo que sus hijos eran el claro ejemplo de amor por los animalitos, cuando el silencio la beneficiaba más.
¿Qué espera de la declaración de los hermanos como investigados?
Espero una sentencia ejemplar. Que se apliquen las leyes y que los maltratadores de animales se lo piensen dos veces antes de hacer daño.
¿Cuándo fue la última vez que habló con Miguel?
No hablo con él desde hace siete años. Nunca me ha llamado para preguntar por su perra ni por su estado. Nada, absolutamente nada.