En Telecinco llevaban toda la semana anunciando el momento más emotivo de la octava gala de Got Talent y, finalmente, cumplió las expectativas. La joven canaria Aya pisaba el escenario y se presentaba entre lágrimas: "Para mí la música es un pilar fundamental, sufrí bulimia y durante todos los años en los que la viví sola lo único que tenía era esto", expresaba antes de comenzar su actuación.
La conmovedora historia de la chica cautivaba al público y al jurado. Pero la verdadera sorpresa llegaba cuando Aya comenzaba a cantar su particular versión de Hello de Adele con estrofas en árabe. La potente voz que estuvo a punto de perder por la bulimia se ganaba los síes de Edurne (33 años), Paz Padilla (50) y Dani Martínez (36). Risto Mejide (44), el miembro más crítico de la mesa del jurado, era el último en posicionarse con un sincero discurso: "Tú das sentido a mi trabajo", expresó antes de otorgarle el cuarto 'sí' que la catapultaba a las semifinales por unanimidad.
El otro momentazo de la noche también lo protagonizaba un artista con una emotiva historia. Pitu, un coreógrafo y bailarín de 24 años, llegaba dispuesto a romper con los prejuicios y demostrar que el talento no depende del aspecto físico. El joven contaba los miedos que se instalaron en él durante su dura infancia: "Se metían conmigo por mi condición física y mi condición sexual", confesaba.
Sin embargo, Pitu dejó atrás su inseguridad y se vino arriba en su actuación y lo dio todo con una coreografía que evolucionó desde el lírico al dance, poniendo en pie a todo el recinto.
Mientras los miembros del jurado alababan el número de Pitu, Santi Millán (51) hacía aparición en el escenario y se acercaba a la mesa para supervisar las votaciones. Después de que Risto le diera un 'no' porque la actuación le dejó "un poco frío", el resto del jurado le daba un rotundo 'sí'. Pero, cuando el artista ya se disponía a abandonar el plató feliz por su pase a semifinales, el presentador le detenía: "Para lo que has hecho me parece poco tres síes", comentaba antes de pulsar el botón dorado, otorgándole así el penúltimo pase de oro de esta edición.
Lo cierto es que Got Talent sigue cautivando a la audiencia española en la que es su quinta edición en este país. Así, en la última entrega de este lunes Telecinco conseguía sobrevivir al debate electoral que emitían sus principales competidores, marcando un digno 14,5% de share y una media de 1,9 millones de espectadores.
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