Aída Nizar (44 años) vuelve a estar en problemas. El programa Socialité de Telecinco ha informado este sábado a mediodía de que tenía unas comprometidas imágenes de la colaboradora en las que estaría comiendo un presunto delito. Ha sido el reportero Javier de Hoyos quien ha comunicado a su presentadora, María Patiño (48), el contenido de la secuencia.
Ambos, con el consentimiento de la dirección del formato de La Fábrica de la Tele, han optado por entregar ese clip a la Policía Nacional para que, en el caso de ser necesario, tomen medidas de oficio contra Nizar.
"Voy a hacer entrega de estas imágenes que nos han llegado de Aida Nizar en las que podría estar cometiendo un delito muy grave. Vamos a saber qué nos dice la Policía sobre qué tipo de delito estaría cometiendo", ha apuntado el periodista en una conexión en directo mientras entregaba el pen drive.
En las imágenes se ve a Aida Nizar conduciendo su coche descapotable por el centro de Madrid. La tertuliana lo hace mientras se graba con su teléfono móvil, lleva el cinturón mal puesto y no observa lo que sucede a su alrededor. En ese estado de euforia, comenta un experto, la percepción y la capacidad de reacción baja notablemente si sucediera cualquier imprevisto típico de la ciudad o la carretera.
Una portavoz de la Policía Local de Madrid ha intervenido en el programa en directo para anunciar que hay abierta una investigación y que, probablemente, presenten una denuncia contra la colaboradora que no solo podría costarle una cuantía económica sino la pérdida de varios puntos del carné de conducir.
Problemas con la Justicia
No es la primera vez en lo que va de año que Aida Nizar se encuentra de frente con un problema con la Justicia. El pasado 21 de abril, JALEOS publicaba en exclusiva que la vallisoletana era detenida en su domicilio de Madrid después de haber amenazado, presuntamente, a su pareja, Fernando, con un cuchillo.
Según el relato de la supuesta víctima a los agentes, Aída se enfrentó a él cuchillo en mano, amenazándolo gravemente y echándolo de su casa con lo puesto. Cuando llegaron las autoridades, Nizar se negaba a abrir la puerta de su domicilio para explicar lo sucedido y que Fernando pudiese recoger algunas pertenencias.
Finalmente, tras la insistencia de los agentes y la advertencia de acceder por la fuerza, la supuesta agresora les permitía la entrada a la vivienda, siendo detenida de inmediato para prestar declaración sobre lo sucedido, según fuentes de la Policía Nacional. Tras varias horas en la comisaría del barrio de Hortaleza, la colaboradora era puesta en libertad.
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