Se ha hecho esperar, pero este lunes 11 de enero El Hormiguero enfrentaba su primera emisión del recién estrenado 2021. Para esta fecha tan especial, el invitado fue alguien de la casa, el presentador de informativos Vicente Vallés (57 años).
Eso sí, los planes iniciales de Pablo Motos (55) y el resto del equipo eran diferentes. En un principio, la invitada era Concha Velasco (81), pero los compromisos profesionales de la veterana actriz provocaron que su lugar fuera ocupado por el presentador madrileño, quien pasaba en apenas 15 minutos de despedir el Informativo de las 21 horas a entrar en el plató del talk show.
“Vicente Vallés estaba hace un rato en San Sebastián de los Reyes y ha llegado. El público también ha llegado. Nada malo del 2021”, explicaba Pablo Motos antes de dar paso a la primera pausa publicitaria, un poco más prematura de lo habitual por cuestiones de guion. Fruto de ello, el presentador de El Hormiguero volvió a tirar de speech, pero esta vez mucho más humorístico, preguntándose qué está pasando en este nuevo año. “Madrid parece Baqueira, la gente va con esquís”, bromeó.
A pesar del cambio, el nuevo invitado levantaba expectación. Sus críticas a la gestión del Gobierno central respecto a la pandemia no han pasado desapercibidas, por lo que su entrevista podría dar bastante juego. “Las vías principales están abiertas, y la gente está haciendo lo que debe, quedarse en casa, así que hemos llegado bien”, arrancó Vallés, comentando el trayecto rápido que acababa de recorrer.
Sobre su arranque del año, el periodista destacó que este 2021 “lo he empezado lo mejor que he podido; a la preocupación por la pandemia, se suma el temporal y el asalto al Capitolio, que ocurrió prácticamente en directo durante el Informativo”. En ese momento, Motos abrió el baúl de los halagos, el cual no cerraría en todo el programa. El invitado se restó importancia: “Creo que ese es el trabajo de los periodistas también, hay una parte de análisis, de poner las noticias en perspectiva. No me siento especialmente presionado, sino con la responsabilidad de siempre, es un servicio público, aunque estemos en un medio privado, es un trabajo importante para la sociedad que hacemos todos los profesionales”.
La preguntaNo tardó mucho en llegar la cuestión que a muchos espectadores les rondaba por la cabeza: ¿Qué piensa Vicente Vallés sobre algunas críticas que le tachan de facha? “Nada especial, porque en realidad cuando haces trabajo en público hay gente a la que le gusta y gente a la que no. Esto es parte de las circunstancias que se generan en torno a la profesión, el público también tiene derecho a opinar”, valoró.
Sobre su labor, Vallés ahondó un poco más: “Todos contamos la verdad todos los días, nos podemos equivocar, como cualquiera en su trabajo. Esta discusión se inicia en el mes de mayo, un día en el que pusimos en cuestión los datos de muertes que ofrecía el Gobierno. Lo hicimos porque creíamos que había que buscar la verdad. Los datos no eran del todo ciertos. Empezó ahí. Hubo que esperar unos meses para que se confirmara por otros organismos y medios de comunicación. Aquello se amplificó más porque dimos la noticia de que el criterio de contabilización que se estaba siguiendo no era el recomendado por la OMS”, recordó.
En el caso hipotético de que tuviera enfrente a Pedro Sánchez (48) en su espacio informativo, Vicente Vallés le preguntaría en primer lugar por algo muy íntimo: “Mi primera pregunta tendría que ver con su sentimiento personal, entiendo que la presión a la que tiene que estar sometido un gobernante debe ser tremenda. En eso soy muy comprensivo”, apuntó.
Oto político, en este caso Pablo Iglesias (42) también tuvo su lugar en la entrevista, en concreto sobre qué impresión le causó al invitado aquellas declaraciones en las que el líder de Podemos apelaba a la posibilidad que cada ciudadano tiene de insultar: “Estaba escuchando la rueda de prensa mientras iba en el coche. Me quedé muy sorprendido. Era julio, estábamos un poco mejor antes de la segunda ola de la pandemia, pero pensaba que con todos los problemas que había se está hablando de periodistas. Es una circunstancia que no se debe de producir, pero igual que llegó se fue”, valoró.
Y sobre las críticas al Gobierno central, el periodista recordó que “a todos” los Ejecutivos les cuesta llevarlas bien. Sin ir más lejos, recordó que en los tiempos de la crisis de 2008 y los años sucesivos “cuando De Guindos (60) anunció el rescate sin aludir a esa palabra, nos llamaron para que no usáramos esa palabra”. A ese hecho, el de recibir llamadas de presión lo restó importancia: “Toda la vida se han recibido. Alguna de ellas tiene razón, puede ocurrir que te hayas equivocado en un dato. Las noticias son las que son. Cuando hay un problema como el de esta semana, con tres administraciones que tienen que tomar decisiones te preguntas si se está dando la coordinación entre ellas”, razonó.
Desde EEUU a las vacunas
Un asunto que ya se había apuntado con anterioridad volvió a estar encima de la mesa. Vicente Vallés comentó que la primera pregunta que haría a Donald Trump (74) sería “por qué no ha dimitido ya”, algo que en su opinión “sería un gesto de dignidad, quizás el único de su mandato”. En relación al asalto al Capitolio lo calificó de “sorprendente” por las imágenes y en el que “la seguridad dejaba mucho que desear”. “He estado allí varias veces y las medidas de seguridad son muy fuertes. Ese día no era un día normal, en esta ocasión tenía que estar mucho más previsto”, destacó.
Sobre Trump, Vicente Vallés considera que su futuro como político “está acabado, ya que la petición de los demócratas del impeachment “busca un escarmiento y, además, tiene un efecto muy práctico: no podría presentarse a otras elecciones”. Aun en ese escenario, el presentador defiende que Trump “tendría pocas posibilidades de éxito”.
Dejando a un lado la actualidad norteamericana, Motos y Vallés tuvieron tiempo de hablar de la esperada vacuna contra el coronavirus. “El proceso ha comenzado mal, arrancar no es fácil, es muy masivo. No todas las administraciones han estado igual de bien, ya se sabía con antelación que iban a llegar las vacunas, por ejemplo, Madrid va lentísimo. Se van a acumular vacunas sin administrar, lo recomendable sería coger a todo el personal necesario para hacerlo”, apuntó el periodista.
Siguiendo con ese asunto, al presentador del Informativo le preocupa que “un centro de salud ya está suficientemente utilizado. Si a eso le sumas la tarea de la vacunación, no sé si lo van a saturar, pero es algo que se debería haber previsto. En Israel se está vacunando a la gente sin que se baje a los coches. Nos está pasando lo mismo que al inicio de las pruebas, que parecía que solo se podían hacer en determinados espacios. Hay que utilizar todo lo que sea, recursos personales y materiales, para que esto se haga cuanto antes”.
Antes de cerrar la entrevista, un apunte personal. Vicente Vallés está a punto de publicar un nuevo libro: “Los dos libros anteriores eran de investigación periodística y ahora estoy con una novela de ficción, justo en el trance de acabarla. Espero terminarla antes de la mitad de este año”, finalizó.
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