Momento de la entrega del falso premio de la paz a ThyssenKrupp

Momento de la entrega del falso premio de la paz a ThyssenKrupp Cedida Berlín

Cultura ACTIVISMO Y 'FAKE NEWS'

Y el Premio de la Paz es para... ¡un fabricante de armas!

  • Un colectivo berlinés crea un falso premio de la paz para un fabricante de máquinas de guerra.
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25 mayo, 2017 03:12
Berlín

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El premio germano-francés para la seguridad y la paz no existe. Lo que sí hay es una amplia gama de fragatas, corbetas y submarinos del gigante germano de la industria siderúrgica y armamentística ThyssenKrupp. La empresa alemana, conocida en España especialmente por la fabricación de ascensores, es uno de los actores cuyas ventas hacen de Alemania el quinto país exportador de armas a nivel mundial, según el prestigioso Instituto de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés). Delante de Alemania sólo figuran Estados Unidos, Rusia, China y Francia.

En su 'Ley Fundamental' – lo que aquí sería la Constitución –, Alemania dice que su pueblo está animado a “servir la paz en el mundo”. Según los últimos datos disponibles, sólo en la primera mitad de 2016, el valor de las exportaciones de armas alemanas alcanzaron los 4.020 millones de euros – 500 millones más que en el mismo periodo de 2015. Los activistas del Peng!-Kollective ven en esto una gran contradicción. La denuncian con enormes mentiras destinadas a generar debate en la sociedad.

Según la Constitución alemana deben "servir la paz en el mundo", pero en la realidad son el quinto exportador mundial de armas

“Alemania siempre busca presentarse como un país estable, a favor de la paz, nunca relacionado con conflictos armados desde la Segunda Guerra Mundial. Pero, en la práctica, hay una contradicción de ese principio, porque Alemania es un país líder exportador de armas en el mundo. Las armas que se venden son para matar gente”, dice a EL ESPAÑOL Nina Los, integrante del Peng!-Kollective.

De las oficinas berlinesas de este grupo compuesto por una escasa decena de periodistas y gente salida de las artes escénicas surgió la idea de entregar “el premio germano-francés para la seguridad y la paz” a ThyssenKrupp. Lo hicieron tras cerca de medio año de trabajo preparatorio. Montaron una falsa fundación, la Iniciativa para la Estabilidad Duradera en el Contexto Exterior Europeo (IDSAEK, por sus siglas alemanas).

Una performance para un espectador

Su página de Internet es escueta, pero todavía puede resultar creíble si no se sabe que es obra del Peng!-Kollective. IDSAEK convocaba el premio que ganó ThyssenKrupp. Con esa “iniciativa” el colectivo montaba con éxito una organización falsa pero idéntica a las instituciones y fundaciones que orbitan alrededor de la política y la industria de defensa.

Christian Stuve, antes de disponerse a recibir el falso premio para la paz

Christian Stuve, antes de disponerse a recibir el falso premio para la paz

Debió resultar creíble porque Christian Stuve, alto cargo de ThyssenKrupp, fue hace unos días a recoger el citado galardón ficticio en uno de los salones de actos del InterContinental de Berlín, un céntrico y lujoso hotel de la capital germana. Allí le esperaban una treintena de actores caracterizados de asistentes y responsables del premio.

“Fue una obra de teatro para una sola persona, porque sólo había una persona asistiendo a aquel evento que desconocía que aquello era falso”, dice Los, aludiendo a Stuve. Él es corresponsabe de política y estrategia de la sección dedicada a barcos y submarinos de guerra de la multinacional germana. Poco antes de que debiera recoger el premio, habiendo empezado ya la performance que el Peng!-Kollective le había dedicado, Stuve abandonó abruptamente el acto. Pero el daño ya estaba hecho.

Fue una obra de teatro para una sola persona, porque sólo había una persona asistiendo a aquel evento que desconocía que aquello era falso

Los medios de comunicación alemanes han contado el éxito de la falsa convocatoria del Peng!-Kollective en su particular campaña contra el lobby de las armas en Alemania. Ésta no sólo se ha limitado a poner en evidencia a Stuve. También la Unión Cristiano Demócrata (CDU) que lidera la canciller Angela Merkel y el reputado fabricante de armas ligeras alemán Heckler & Koch han sido víctimas en su iniciativa contra la industria exportadora de armas.

Políticos cristianos de mentira

La CDU se vio afectada a través de la figura de Brigitte Ebersbach, presidenta de una agrupación del partido cristianodemócrata en el pequeño pueblo de Schwenke, en el oeste alemán. Allí viven unas 600 personas. Por no haber, en Schwenke no hay ni iglesia. Ebersbach y su agrupación de la CDU son otra creación del Peng!-Kollective.

La supuesta cristianodemócrata se presentaba en la acción del colectivo berlinés como una militante cristiana implicada en las labores humanitarias con los demandantes de asilo llegados durante la crisis de los refugiados y responsable de una campaña a favor de la renuncia de Alemania de exportar armas ligeras. “Su base electoral cristiana apela a su empatía”, decía Brigitte Ebersbach en un vídeo destinado a la canciller Angela Merkel. El mensaje fue subido a las redes sociales y pudo verse en otra página web falsa de la CDU, www.cdu-mit-gefuehl.de.

La agencia de prensa estadounidense Associated Press (AP) nos contactó. Nosotros nos hicimos pasar por la CDU y se creyeron toda la información

El resultado fue tan creíble que varios medios de comunicación internacionales de prestigio dieron por auténtico lo planteado por el Peng!-Kollective. “La agencia de prensa estadounidense Associated Press (AP) nos contactó. Nosotros nos hicimos pasar por la CDU y se creyeron toda la información. No confirmaron con la sede federal de la CDU en Berlín o con la Cancillería Federal”, cuenta Los. “En el actual ciclo de la información, que dura las 24 horas del día, la industria de las noticias está obligada a hacer noticias permanentemente y, a veces, los contenidos se hacen sin verificar lo suficiente”, agrega.

AP hizo su teletipo, que se publicó en el prestigioso diario The New York Times de Estados Unidos, y que tuvo su eco en la cadena de noticias conservadora de ese país Fox News, pero también en Radio Vaticano, entre otros. El Peng!-Kollective acabaría aclarando que todo era una invención suya.

Captura de pantalla del teletipo de AP sobre la campaña del Peng!-Kollective en The New York Times

Captura de pantalla del teletipo de AP sobre la campaña del Peng!-Kollective en The New York Times

“Lo nuestro no es sólo difundir noticias falsas. Las difundimos con la intención de que la gente se pregunte: '¿Es esto cierto?'. Queremos obligar a la gente a posicionarse respecto a un tema”, dice la integrante del colectivo de activistas. “Queremos ayudar a generar pensamiento crítico a partir de un momento de desorientación”, agrega, antes de reconocer los parecidos de sus acciones con las “noticias falsas” que han contribuido al auge de figuras políticas como Donald Trump y al desprestigio de Hillary Clinton en Estados Unidos. “Ambos utilizamos un contenido fabricado. Pero nuestra construcción sirve para debatir, las otras 'fake news' tienen fines propagandísticos”, sostiene.

Cartas falsas de Heckler & Koch

La determinación ha llevado al Peng!-Kollective a mandar correos físicos falsificados a clientes de Heckler & Koch en Estados Unidos para pedirles, haciéndose pasar por la propia compañía germana, que devuelvan las armas que han comprado. En el escrito enviado a cientos de vendedores de armas ligeras de esa compañía germana, se informaba a los minoristas estadounidenses de que Heckler & Koch había sometido “su política exportaciones a una revisión ética”. Ésta implicaba retirar las las armas del mercado estadounidense.

Una de las cartas de Heckler & Koch falsificadas

Una de las cartas de Heckler & Koch falsificadas

Hasta hace unos días Heckler & Koch presentaba en su página web un mensaje para negar la veracidad del correo. “Se han enfadado mucho, se decían víctimas de un ciberataque y esas cosas, dicen que van a denunciarnos”, apuntan, aunque no parecen preocuparse por las consecuencias de ese enfado. El Peng!-Kollective siempre trabaja con asesoramiento legal. Aún así, Los reconoce que ahora van a estar “unos días más tranquilos”. Lo achaca principalmente al excesivo trabajo que ha implicado de la campaña contra el lobby de las armas.

Lo nuestro no es sólo difundir noticias falsas. Las difundimos con la intención de que la gente se pregunte: '¿Es esto cierto?'. Queremos obligar a la gente a posicionarse respecto a un tema

Aún es pronto para saber qué efectos tendrán en el debate político los esfuerzos de Los y compañía. La CDU ha hecho oídos sordos ante las informaciones en prensa, radio y televisión generadas por la campaña de los activistas. Pero está claro que el Peng!-Kollective va a seguir trabajando en este y otros temas.

El grupo cuenta con una considerable ayuda de las instituciones públicas para los dos próximos años valorada en 150.000 euros. “No es tanto dinero como parece, cuando tienes que dar empleo a entre siete y diez personas, más los costes de producción de las acciones, no es para tanto. En las producciones buenas de teatro, 150.000 euros cuestan sólo el vestuario y los decorados”, concluye Los.