María Luisa de Parma era la nieta del monarca francés Luis XV, predecesor del guillotinado Luis XVI durante la Revolución Francesa. A los catorce años contrajo matrimonio con su primo carnal, el futuro rey Carlos IV. Sus continuos coqueteos con miembros de la corte y demás nobles incomodaron a Carlos III, quien jamás confió en ella.
No obstante, una vez fallecido, María Luisa de Parma se convirtió en reina consorte en 1788 y tuvo casi tantos hijos como abortos con el nuevo rey español. Al menos esa es la descendencia que se conoce. Sin embargo, la infidelidad de la reina ha sido ampliamente investigada y discutida por los historiadores españoles, los cuales defienden que varios de los hijos de la reina son del político español Manuel Godoy.
Godoy era un joven procedente de Extremadura que se integró en la Guardia de Corps. Su rápida ascensión política se vincula estrechamente con la relación amorosa que mantuvo con la reina. Además, gozó de la confianza de Carlos IV —en parte influido por su mujer—, quien depositó en él grandes competencias estatales. "Ella es quien reina. Las observaciones que hace, su aprobación o su negativa son ley irrevocable. Sacrificando siempre los intereses de la monarquía a sus gustos y antojos más escandalosos, envilece y hace odioso el reinado de Carlos IV, que es el mejor de los hombres y el más débil de los reyes", escribió el embajador francés sobre la reina.
No son los únicos testimonios históricos que se conservan sobre su vida en la corte. El escritor del Romanticismo José de Espronceda, quien también fue miembro de la Guardia Real, llegó a calificar a María Luisa de Parma de "impura prostituta".
Sus constantes embarazos pasaron factura a su salud, la cual se agravó cuando padeció de pulmonía. En su lecho de muerte, la reina confesó que ninguno de sus hijos era realmente de Carlos IV. "La dinastía Borbón se ha extinguido en España", afirmó.
De todos modos, la controversia que existe entre los historiadores es muy amplia. Algunos no dan credibilidad a las palabras de la reina en el momento justo antes de morir, mientras que otros defienden que solo los últimos cuatro hijos son de Godoy. Entre ellos destaca el hijo menor Francisco de Paula de Borbón, quien fue Infante de España, y María Isabel de Borbón, reina de las Dos Sicilias, tal y como se relata en el libro Los desconocidos infantes de España.