Un palacio de unos 3.400 años de antigüedad ha salido a la luz en la región kurda de Irak, en la orilla oriental del río Tigris, a consecuencia de la fuerte sequía que asola la región. El estudio de las ruinas, halladas en el embalse de Mosul Dam, puede servir para aumentar el conocimiento sobre el reino de Mitani, uno de los imperios menos investigados que dominó amplias zonas de Mesopotamia entre los siglos XV y XIV a.C.
"Este descubrimiento arqueológico es uno de los más importantes que se han llevado a cabo en la región en las últimas décadas", ha señalado el arqueólogo kurdo Hasan Ahmed Qasim, uno de los expertos que integran el equipo destinado a indagar en el yacimiento. El palacio de Kemune -así se le ha denominado por su ubicación- se habría erigido en algún momento de los citados siglos y en una terraza elevada, a unos siete metros de altura del cauce del río.
Algunas de las paredes de ladrillos de barro de la antigua construcción miden casi dos metros de ancho y dos de alto. También se han descubierto rastros raros de pinturas murales en rojo y azul brillante. "Kemune es solo el segundo yacimiento de la región donde se han descubierto pinturas murales del período de Mitani", ha explicado Ivana Puljiz, de la Universidad de Tübingen, que ha calificado el descubrimiento de "sensación arqueológica".
Asimismo, se han registrado diez tablillas de arcilla cubiertas de cuneiforme, un antiguo sistema de escritura. Estos textos, tras ser fotografiados, han sido enviados a Alemania para su traducción y ver si pueden dar pistas sobre la cultura y las tradiciones del imperio. "De los textos esperamos obtener información sobre la estructura interna del imperio Mitani, su organización económica y la relación de la capital con los centros administrativos en las regiones vecinas", ha señalado Puljiz a la cadena CNN.
Los arqueólogos tuvieron noticias de las ruinas del palacio por primera vez en 2010, cuando, como ha sucedido en esta ocasión, el nivel del agua del embalse era muy bajo. Sin embargo, esta es la primera ocasión en la que los expertos han podido realizar tareas de excavación; aunque por un periodo de tiempo muy concreto porque el palacio ha vuelto quedar sumergido a consecuencia de la crecida del nivel del agua.
Este equipo de arqueólogos también descubrió en 2016 una ciudad de la Edad de Bronce en el norte de Irak con grandes casa, un palacio, una extensa red de caminos y un cementerio.