"Las personas mayores nunca pueden comprender algo por sí solas y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones", escribía el novelista Antoine de Saint-Exupéry en su obra cumbre, El Principito.
En tiempos de pandemia, a menos de un mes de la Navidad más solitaria que ha existido, resulta saludable -e incluso conveniente- adoptar esa inocencia y constante alegría que vemos en los ojos de los más pequeños. Por ello, de la mano del director Ignasi Vidal, el Teatro Cofidis Alcázar de Madrid estrena del 26 de noviembre al 13 de diciembre -y del 19 de diciembre al 10 de enero en el Teatro EDP Gran Vía- Antoine, un gran pero a la vez pequeño musical que pretende, tal y como explica el productor ejecutivo Dario Regattieri, explorar la vida de este escritor "inconformista y soñador".
"La obra apela al niño que todos llevamos dentro", comenta Ignasi Vidal en una entrevista concedida a EL ESPAÑOL. Poca gente queda que no haya leído la gran novela de Antoine, llena de reivindicaciones a la infancia y su propia vida. Y es que, aunque desconocida, la vida de Antoine de Saint-Exupéry bien podría ser una obra más. Ahora, gracias al teatro, lo es.
Un piloto incansable. Así era Antoine de Saint-Exupéry.
"Nosotros hemos planteado un espacio en consonancia con el mundo onírico de Antoine", apunta Vidal a este periódico. Así, gracias a una mezcla entre la vida del autor y el interior de su obra, presentan un musical para todo el mundo que oscila entre el público familiar y el adulto.
Y es que, tal y como señala el director de la obra, el mensaje universal de Antoine de Saint-Exupéry es de suma importancia en los tiempos que corren: "Es una vida que vale la pena conocer y un pensamiento que vale la pena conocer".
Para ello, el reparto cuenta con un elenco ambicioso. La música es parte del trabajo del grupo barcelonés Elefantes y su cantante y compositor, Shuarma, interpreta el papel de El Principito. "Cuando ves Antoine entiendes todavía más la dimensión del personaje y de la historia", ha compartido Shuarma respecto al musical. La obra la completan Javier Navares, Beatriz Ros, Alberto Vázquez, Carmen Barrantes, Paula Moncada y Víctor Massán.
¿Quién fue?
Antoine de Saint-Exupéry nació en el año 1900 en Lyon pero su hogar siempre sería el cielo. Al igual que en El Principito, Antoine fue piloto. A lo largo de su vida trabajó para empresas de correo y transporte aéreo en África y Sudamérica e intentó batir todo tipo de récords aéreos, arriesgando su propia vida para alcanzar sus metas.
Paralelamente, se dedicaba a la escritura y reflejaba en ellas poéticamente muchas de sus experiencias en el aire. En 1926 publicó El aviador, y en 1943, ya en plena Segunda Guerra Mundial, la novela por la cual todo el mundo le conoce.
El equipo que presentará 'Antoine'.
Pese a haberse instalado en Nueva York en tiempos de guerra, quiso aportar su granito de arena y utilizó sus conocimientos surcando los cielos para ayudar a los Aliados a ganar la contienda.
No obstante, Saint-Exupéry desapareció sin dejar rastro alguno mientras realizaba un vuelo de reconocimiento el 31 de julio de 1944, a un año de finalizar la guerra. De hecho, los restos de su P-38 Lightning no fueron hallados hasta el año 2000 en las profundidades del Mediterráneo.
Cultura segura
A la hora de organizar una obra, estaba claro que la vida de Antoine podía aportar mucho más de lo que se conoce actualmente. Vidal afirma que uno de los motivos por los que decidieron representar su recorrido en lugar de versionar El Principito se debe al desconocimiento que tiene el gran público respecto a un personaje tan complejo.
De esta forma, Dario Regattieri viajó a Francia y planteó la posibilidad de contar la vida de Antoine de Saint-Exupéry como una prolongación de su obra, sumergiendo al equipo en El Principito y creando este musical compuesto por 9 actores que se estrena el jueves 26 de noviembre.
Representación de 'Antoine'.
En definitiva, Ignasi Vidal anima a todos aquellos que disfrutaron de su literatura acudir al teatro para conocer la vida de Saint-Exupéry y deja un mensaje claro. La cultura es segura y los teatros también. "Al margen del momento es una función que va a alimentar el pensamiento de la gente y la imaginación de la gente", concluye.