La asociación de Abogados Cristianos ha interpuesto una querella criminal por profanación contra el artista Abel Azcona, por utilizar hostias consagradas en su exposición, Desenterrados, que se exhibe en Pamplona. "Asistí a 242 eucaristías y con las hostias consagradas guardadas hice la palabra pederastia", decía hace unos meses el artista en su cuenta de twiter.
La exposición se inauguró el pasado viernes en la sala del Ayuntamiento de Pamplona, institución gobernada por EH Bildu y a la que los querellantes avisan que ampliarán su denuncia, si no cierran la exposición. Entre las fotografías e instalaciones artísticas que componen la muestra se encuentra "un plato de formas consagradas y unas fotos en las que se escribe la palabra pederastia con las hostias", se puede leer en la nota de la asociación.
Los querellantes señalan que el autor reconoce haber guardado la hostia en 242 misas a las que asistió, destacando que esto constituye un "delito reiterado de profanación y un delito contra los sentimientos religiosos", recogidos en el código penal. Está previsto que la exposición se mantenga hasta el día 17 de enero, pero la asociación pide su cierre inmediato y advierte que, de contrario, la denuncia se ampliará a la concejala de Cultura, Maider Beloki.
También en change.org se ha abierto una petición para que se cierre la exposición, que lleva ya más de 60.000 firmas. "Es una profanación explícita en su máximo grado en una sala de exposiciones sufragada con nuestros impuestos", puede leerse en la página.
Gobierno pide investigación
El Partido Popular de Navarra anunció también su disconformidad con la exposición "Se trata de una agresión contra la iglesia católica y contra los sentimientos religiosos de una gran parte de los pamploneses, que rechazan totalmente la pederastia", manifestó la portavoz y candidata del PPN al Senado, Cristina Sanz.
Asimismo, la delegación del Gobierno en Navarra ha trasladado al Ministerio Fiscal un informe sobre una exposición, para que se estudie si la muestra "incurre en un delito contra los sentimientos religiosos, contraviniendo lo recogido en el artículo 525 del Código Penal".
El lunes, la Unión del Pueblo Navarro, apoyada por el PPN, presentó en el Parlamento una iniciativa que instaba a la Cámara a mostrar su "total repulsa" por la exposición de Azcona, al considerar que "atenta contra las creencias de una parte de la sociedad". Sin embargo, el texto se ha rechazado con el voto en contra de todas las formaciones, con excepción de las dos que la presentaban.
'Eating Koran'
Ésta no es la primera vez que Abel Azcona se ve envuelto en polémica por hacer una performance con la religión como telón de fondo. En enero de 2013 el artista denunciaba haber sido víctima de amenazas por el trabajo Eating Koran, donde el artista comía un Corán durante casi seis horas, como crítica al fundamentalismo religioso.
"Creo en la libertad de expresión, la provocación y la libertad artística para expresarme libremente y seguiré haciéndolo hoy, mañana y siempre. Desde que empecé a utilizar el arte como herramienta de expresión acepto las críticas pero no van a cambiar en ningún momento mi forma de pensar y de trabajar, es más las amenazas me aclaran mi camino, y sé que estoy en el correcto", dijo el artista en ese momento a la Plataforma de Arte Contemporáneo.