“¿Stéphane Hessel? No sé quién es”

Empecemos por el final: ¿quién es el escritor y artista que no sabe quién es Stéphane Hessel (1917-2013), a pesar de publicar un manifiesto a favor de la necesidad de crear “un movimiento nacido de un cambio en la conciencia que desafíe los supuestos en los que se fundamenta nuestra sociedad? Raoul Martinez es británico y acaba de lanzar en Paidós Crear libertad. El poder, el control y la lucha por nuestro futuro, en el que propone más empatía que indignación para llamar a la sublevación de los ciudadanos.

Hubiera sido maravilloso incluir el 15M, pero se estaba haciendo tan largo que a mis editores les preocupaba lo largo que me estaba quedando

Habla de un cambio radical de la democracia, sin miedo a ser calificado de “antisistema”, si por antisistema se entiende “el movimiento que se rebela contra un sistema antidemocrático”. De su propio libro dice que es ambicioso, “decididamente”, porque ha escrito “el libro que me hubiera gustado leer cuando era más joven”.

“Hay un vacío de libros de este tipo de análisis. La especialización es un problema, yo dejé la educación formal a los 17 años y me pude centrar mucho tiempo en las preguntas que eran importantes, con análisis que cruzan géneros y disciplinas”. ¿No son esos los libros de Naomi Klein? “Ella es magnífica y me ha inspirado, pero mi trabajo es más filosófico”. Más fuentes de referencia: Noam Chomsky, “otro autor de análisis amplios, que no acostumbran a publicar los medios de comunicación”. También señala psicólogos que trabajan sobre la motivación.

La empatía y la compasión son el método de la revolución

De hecho, la propuesta que hace para proponer una alternativa al sistema es la unión de la comunidad a partir de la solidaridad. “Todos los sistemas de opresión y explotación dependen de la negación de esta igualdad”, escribe. Así que si nos ponemos en la piel del otro, nada podrá detenernos. “La empatía y la compasión son el método de la revolución”, cuenta a este periódico. “Es cierto que existe una ira contra el sistema, pero creo que un movimiento inspirado en estos valores nobles -empatía y compasión- atraerá y resonará con más fuerza que uno que esté motivado simplemente por una fiebre revolucionaria que aspire a colapsar el sistema”, dice.

Desconocimiento 

Al parecer, ni siquiera ese sistema antidemocráctico. ¿Esa es la razón por la que en el libro tampoco cita ni una sola vez a Stéphane Hessel? “No sé quién es”. Es un autor que hace seis años llamó a la revolución con el primer panfleto best-seller titulado ¡Indignaos!, del que se han vendido cerca de un millón de ejemplares por todo el mundo. “El mayor motivo por el que no lo menciono en el libro es porque no lo he leído”. Tampoco menciona a José Luis Sampedro, ni al 15M, a pesar de haber empezado a escribir el libro en 2012 y de mencionar a Ocupa Wall Street.

¿Por qué no ha incluido nada del 15M en un ensayo en el que propone lo que hizo este movimiento hace cinco años? “Hubiera sido maravilloso incluirlo, pero se estaba haciendo tan largo que a mis editores les preocupaba lo largo que me estaba quedando. Tuve que recortar unas 30.000 palabras. Hay muchísimas cosas importantes que no incluí. El movimiento en España fue un ejemplo inspirador. Es algo sobre lo que me gustaría aprender más”. ¿Vino aquí los días de 15M? “No, pero estuve vinculado a Ocupa Wall Street, que es nuestro movimiento paralelo”.

Puede que haya gente que lleve cinco años de activismo, pero desgraciadamente son una minoría

¿No le parece un tropiezo notable en su libro? “Bueno, no pretende ser un repaso completo, porque no era mi intención hacer un recuento total de los movimientos. Es un análisis multidisciplinario y detallado del problema. El lector debe entender que una transformación radical es necesaria”. Pero está contando cómo salir a la calle y rebelarse a la gente que ya lo ha hecho. En España, lo que cuenta en el libro se hizo hace cinco años.

Imagen de la Puerta del Sol la noche del 15M de 2011. Efe

“Es verdad que hubo un movimiento importante y culminó en el crecimiento de Podemos a una velocidad increíble. Pero sigue existiendo una enorme resistencia a las ideas que ese movimiento representa y queda mucho por luchar. Ojalá fuera demasiado tarde para este libro, pero estamos en la primera fase: plantarle cara al sistema. Puede que haya gente que lleve cinco años de activismo y sepan lo que falla en esta democracia y puede que muchas partes del libro les resulten familiares, pero desgraciadamente son una minoría”.

'Artivista'

Curiosamente, en Crear libertad ataca a todos los cínicos que menosprecian el poder de las minorías para gobernarse. “La gente está muy adoctrinada y uno de los problemas es que están convencidos de que no se puede hacer nada, de que no tienen poder. La ignorancia del problema justifica la inacción”, señala. “No podemos caer en el cinismo que justifique la inacción. La gente tiene que unirse y luchar”, explica, a pesar de que lo acaba de hacer al hablar de “minorías”.

La solapa del libro asegura que Raoul Martinez es “escritor, artista y un aclamado cineasta”, cuyo mayor reconocimiento es el premio Artivist Spirit 2012 Award en el Artivist Spirit de Hollywood. La entrevista se desarrolla en las instalaciones de Abante, una asesoría de productos financieros, cuyos objetivos son, entre otros: “¿Cómo gestiono mi patrimonio y mi cartera para vivir de las rentas?”. Es uno de los reclamos extraídos en su página web.

El autor de Crear libertad. El poder, el control y la lucha por nuestro futuro.

¿Sabe qué es Abante? “No, realmente, no. Una especie de inversores”. Sí, asesores financieros. ¿Es un poco extraño para dar una conferencia sobre la revolución? “Sí, un poco”. ¿Por qué se habrán fijado en usted para dar la charla? “A lo mejor es que no se han leído el libro. Bueno, es una de las contradicciones del sistema en el que la riqueza está tan concentrada”. Va a hablar de revolución, en un centro que fomenta la riqueza, ¿qué puede pasar? “No veo contradicciones en usar plataformas ofrecidas por la concentración del poder, para promocionar un mensaje. Los canales sociales de comunicación están monopolizados por los ricos”. Paidós, la editorial que publica Crear libertad, pertenece al grupo Planeta, con más de 100 empresas en su poder, de siete áreas de negocio diferente. Es el grupo editorial en castellano más importante en el mundo.