El Fútbol Club Barcelona se sumará este martes a la huelga general impulsada por la Mesa de la Democracia en Cataluña. Sus oficinas permanecerán cerradas, al igual que una Ciudad Deportiva en la que no se entrenarán ni los equipos profesionales del club ni tampoco los formativos.

Por tanto, la medida afecta no sólo a los jugadores del primer equipo de fútbol que no participen del parón de selecciones, sino también a los de las plantillas de baloncesto o balonmano, por ejemplo, y a la totalidad de las categorías inferiores. El propio Barça ha oficializado que nadie trabajará en el club a través de sus redes sociales.

La decisión ha sido adoptada por la Junta Directiva azulgrana en su reunión de este lunes, sumándose a una huelga general convocada el domingo tras el referéndum independentista. Este ya estuvo cerca de provocar la suspensión del partido de fútbol entre el Barcelona y la Unión Deportiva Las Palmas, aunque finalmente el encuentro se disputó a puerta cerrada.

Las divisiones internas al respecto de si los jugadores debían saltar al césped del Camp Nou acabaron provocando la dimisión de hasta tres directivos del Barça: el vicepresidente Carles Vilarrubí (responsable de las Relaciones Internacionales e Institucionales), Jordi Monés y Xavi Vilajoana.

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