El gregario holandés que hace temblar al Sky
Wout Poels pide galones en el mejor equipo del mundo tras llevarse la etapa reina de la Volta a la Comunitat Valenciana.
7 febrero, 2016 03:36Noticias relacionadas
Esta semana se ha disputado el Dubai Tour en el Golfo Pérsico. Mientras en las llegadas llanas Marcel ‘Apolo’ Kittel ha confirmado con dos etapas y la general que recalar en Etixx (o, más bien, dejar Giant) ha sido mano de santo para su resurrección deportiva, en el árido final en cuesta del viernes el gaditano Juan José Lobato (Movistar Team) anotó un triunfo con un demarraje salvaje.
Era la primera victoria española de la temporada y halló réplica pronto por parte del ‘Gorrión’ Ángel Madrazo (Caja Rural), aguerrido cántabro que se impuso con una fuga agónica en la cuarta etapa de la Estrella de Bessèges, una ronda por etapas disputada en el sur de Francia.
Y sin embargo, estos dos triunfos no han sido la mejor noticia de la semana para el ciclismo nacional. Ésa ha tenido lugar en la Comunidad Valenciana, que ha recuperado su Vuelta, una prueba cuyos 80 años de historia se vieron truncados en 2008 por mor de la crisis económica del país y estructural del deporte de la bicicleta.
El evento renació este otoño gracias al impulso de los hermanos Ángel y Rafael Casero, que trabajando a marchas forzadas han logrado reunir casi un millón de euros para poner en escena una carrera bella y bien planteada deportivamente que está gozando estos días del favor de pelotón, público y medios de comunicación.
En la víspera de su inicio, la Volta a la Comunitat Valenciana vio cómo se caía de su cartel una de las principales estrellas anunciadas. Mikel Landa, que el año pasado se reveló en el Giro d’Italia y dirimió la Vuelta a España a favor de su entonces líder Fabio Aru, iba a debutar aquí con los colores de Sky. El plan del equipo británico con el escalador vasco es hacerle campeón en la próxima ‘corsa rosa’, donde se enfrentaría a su excoequipier Vincenzo Nibali.
Valencia era la primera parada en ese trayecto hacia lo más alto del podio del Giro. Y, extrañamente, no se ha producido. El equipo ha asegurado que no lo han alineado para que emplee la semana en trabajar la contrarreloj, su talón de Aquiles. Los mentideros hierven con rumores sobre la adaptación de Landa, un ciclista de inspiración, en Sky, un equipo de método.
Aun sin su líder, Sky está dominando en la ronda valenciana. La profundidad de su plantilla es tal que puede tener un bloque de rodadores peleando los sprints en Dubai, otro más compacto anotando victorias en Australia con Chris Froome al frente, y un tercero apareciendo en tierras españolas con el campeón del mundo contrarreloj, Vasil Kiryienka, como cabeza visible de un grupo de vueltómanos de postín.
De él ha emergido un neerlandés, Wout Poels (1987, Venray – Limburgo), que dio la campanada el primer día derrotando en la crono inaugural a Kiryienka y en el durísimo muro de Xorret de Catí, ha aplastado a la concurrencia. Poels, escalador espigado, llegó a Sky la pasada temporada con aire de promesa incumplida.
Una caída terrorífica en el Tour de Francia 2012 no le provocó un solo arañazo por fuera pero le destrozó por dentro. Tocó varios órganos vitales, entre ellos los pulmones y un riñón, y puso su carrera deportiva (y su vida) en solfa. Aquello truncó la proyección de un ciclista que parecía llamado a ser el gran especialista en carreras de tres semanas que los Países Bajos añoran desde Zoetemelk.
Cuando el invierno pasado se vistió de negro Sky, Poels se iluminó. Ganó una etapa extraordinaria en Tirreno-Adriático y fue clave para Chris Froome en el Tour de Francia, llegando a comandar etapas enteras en solitario para el anglokeniano. La dimensión de sus prestaciones le ha permitido postularse para dar un salto en la rígida jerarquía del conjunto británico. “Este año mi gran objetivo será volver a ayudar a Chris en el Tour”, declaró, “pero la próxima temporada quiero atacar la general de Giro o Vuelta”.
Cambiar de estatus será un reto mayúsculo para el gregario neerlandés. En el escalafón le preceden los citados Froome y Landa, amén de Geraint Thomas, Michal Kwiatkowski e incluso Peter Kennaugh ó Sergio Henao. Tal vez Poels pueda aprovechar que su contrato expira a finales de año para fichar por otro equipo que apueste decididamente por él, a imagen y semejanza de lo que ha hecho este invierno Richie Porte marchando a BMC.
Mientras tanto, a tenor de lo visto en Valencia, promete hacer temblar el orden establecido en Sky. Más allá del Tour, tendrá muchas ocasiones para ello. En su punto de mira están los Juegos Olímpicos, la Flecha Valona, la Tirreno-Adriático y la próxima Vuelta a Andalucía – Ruta del Sol, en la cual compartirá cartel con Landa salvo nuevo cambio de planes.