El Tour de Francia vuelve a estar en duda. A pesar de que se confirmaron las nuevas fechas, el resto del calendario de la Unión Ciclista Internacional se ha adaptado en torno a esta cita y Edouard Phillippe confirmara que la prohibición de los eventos deportivos hasta septiembre no afectaría a la ronda gala, la presencia o la ausencia de público pone en riesgo su celebración en este 2020.
Roxana Maracineanu ha sido muy clara con respecto a la posibilidad de que haya gente en las carreteras mientras pasa el pelotón ciclista. "El Tour no se llevará a cabo a puerta cerrada. No se hará a puerta cerrada, necesita espectadores, la alegría y la participación en el Tour. Por lo tanto, sólo se llevarán a cabo si el público también está autorizado", explicó de forma certera la ministra de Deportes.
La responsable ministerial ha explicado que están continuamente en contacto con la organización para conocer las novedades y plantear soluciones. "La realidad es que tenemos que tener en cuenta cómo se desarrollará la pandemia. No tenemos certeza al respecto. Hablamos regularmente con ASO. Depende de ellos decirnos cuándo es necesario decidir", desveló Maracineanu.
La responsable del deporte de Francia ve aún lejos el momento en el que podrán correr juntos los ciclistas. "Pasará un tiempo antes de que podamos ver competiciones en las que las personas entran en contacto, corran juntas o pedalean juntas en un grupo. Tendremos que ser pacientes, proceder con precaución", ruega la ministra de Deportes gala.
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