Etapa caracterizada por la presencia a medio camino de la subida pedaleable de Portella Mandrazzi. Desde Catania hasta las puertas de Taormina, hay que recorrer caminos bastante anchos, pero planimétricamente salpicados de curvas, con algunas secciones rectas, aunque son sustancialmente planas en altitud. Una vez que se abandona la costa, se enfrentan a la larga subida de Portella Mandrazzi (pendientes de alrededor del 4% de promedio) que, seguido de un descenso muy largo, conduce a la costa norte de la isla. Los últimos 40 km están en caminos bastante anchos y planos, con pocos centros habitados y con pocos cambios de dirección.
Ciclismo