El Rayo Vallecano, el mismo equipo que hace justo 20 inviernos dejó sin empleo a Jorge Valdano tras ganar 1-2 al Madrid en el Bernabéu, metió el miedo en el cuerpo al madridismo durante 25 minutos y dejó este domingo electoral una hermosa estampa de honra futbolística, en el mismo escenario, antes de que una mezcla de errores propios y arbitrales le precipitase al vacío. La primera media hora de partido (tres goles, un penalti, dos expulsiones) pudo traer bochorno y pitos al estadio de Concha Espina, pero jamás aburrimiento.
El Rayo Vallecano, que ocupa puestos de descenso, se plantó adelantado en el césped de Chamartín y se dedicó a tocar la pelota desde el primer minuto: sin prisa, sin pausa, sin rifas, con Javi Guerra como faro delantero. Dos acercamientos en los dos primeros minutos anunciaban el descaro rayista, anestesiado inmediatamente por un zarpazo de Danilo (el más activo en la primera parte) por la banda derecha. 1-0, minuto 3, el Rayo perdía pero conservaba la pelota.
Nueve minutos después (goles de Amaya y Jozabed) los visitantes ya habían remontado y el cielo se abría sobre la cabeza de Rafael Benítez. El juego era del Rayo y Lass se incrustaba entre líneas a su gusto y placer. La tarde era gris y el partido franjirrojo. El Madrid no daba tres pases seguidos y la bronca no dejaba oír al vecino en la grada. Hasta que el central Tito se pasó de vueltas en una balón dividido en media cancha y realizó una fea entrada a Kroos con los dos pies por delante. Tarjeta roja directa y absurda, minuto 15. Santa Claus visitaba al entrenador madridista antes de tiempo.
Perdió el Rayo la posesión a continuación, como cabe esperar, pero sin recular demasiado. No dejaría de triangular en toda la noche, ni siquiera con 8 ó 9 goles encima. Bale hizo el 2-2 en el 24, tras otra internada de Danilo por la derecha, y dos minutos después el árbitro señaló penalti de Baena a Ramos en un saque de esquina: segunda amarilla y expulsión. Ronaldo convirtió la pena máxima y el Madrid respiró aliviado. En el descanso ganaba 4-2 a un admirable Rayo con 9 hombres y era pitado de camino a los vestuarios. Jémez saludaba a cada jugador suyo en la banda.
Poco interesante se puede decir de un partido de 11 contra 9, salvo que las estrellas madridistas hicieron caja goleadora, como contra el Malmöe, el Madrid jugó al tran-tran y los visitantes no cambiaron de actitud en ningún momento. Algunos espectadores del Bernabéu les aplaudieron incluso en alguna fase del partido: representaban un ejemplo de solidaridad y la encarnación de una idea de juego clara y valerosa (con un ramalazo suicida). En una tarde extraña, con una entrada bastante menor a la habitual y otras muchas cosas en juego fuera del estadio, Bale metió cuatro goles jugando contra nueve y lo celebró por todo lo alto, como si hubiese realizado una proeza. Benítez, en la banda, parecía el Pedro Sánchez del domingo liguero. Gracias a Tito, comerá turrón estas Navidades. El próximo partido, en diez días contra la Real Sociedad. Y el día 3 visita a Mestalla.
FICHA TÉCNICA
Ficha técnica:
10 - Real Madrid: Keylor Navas; Danilo, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo (Lucas Vázquez, m.62); Kroos, Modric, James (Kovacic, m.65); Bale (Arbeloa, m.74), Cristiano Ronaldo y Benzema.
2 - Rayo Vallecano: Yoel; Tito, Amaya, Zé Castro (Montiel, m.80), Nacho; Baena, Trashorras, Jozabed, Lass (Bebé, m.63); Pablo Hernández (Quini, m.21); y Javi Guerra.
Goles: 1-0, m.3: Danilo. 1-1, m.10: Amaya. 1-2, m.12: Jozabed. 2-2, m.25: Bale. 3-2, m.29: Cristiano de penalti. 4-2, m.41: Bale. 5-2, m.48: Benzema. 6-2, m.53: Cristiano. 7-2, m.61: Bale. 8-2, m.70: Bale. 9-2, m.79: Benzema. 10-2, m.90: Benzema.
Árbitro: Iglesias Villanueva (Comité gallego). Amonestó a Danilo (72) por el Real Madrid; y a Nacho (27) por el Rayo. Expulsó con roja directa a Tito a los 14 minutos y a Baena por doble amonestación (19 y 28).
Incidencias: encuentro correspondiente a la 16a jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 61.564 espectadores.