Arda, ¿el James del Barça?
Criticado por su actuación en el Clásico, el turco cumple tres meses en la Ciudad Condal sin mucha participación, pese a ser el atacante más preciso en el pase. Será titular en Anoeta.
9 abril, 2016 00:34Noticias relacionadas
Tres meses en un club como el Barcelona no es mucho tiempo, pero el Clásico terminó de señalar a un jugador: Arda Turan, el ídolo turco, cuya entrada por Rakitic cuando faltaban 15 minutos coincidió con la peor fase en el partido del Barcelona, finalmente acorralado por un equipo que jugaba con diez y dio la vuelta al partido en un alarde insólito.
Luis Enrique tuvo que responder varias veces a preguntas sobre Turan en los días posteriores y le defendió sin matices: "Sería triste personalizar cuando hay una derrota. Arda salió en el peor momento del partido. Estoy encantado con él. Tiene mucha calidad y estoy contento con su rendimiento [...] No todos los jugadores se adaptan al Barça a la misma velocidad. Arda está totalmente adaptado, conoce todos los mecanismos".
"¿Qué pasa con Arda?"
Y sin embargo, el turco no termina de adaptarse al juego culé. Llegó el pasado verano a Barcelona en calidad de gran fichaje (unos 40 millones de euros), pero nueve meses después de su presentación sigue estando por debajo de lo esperado. Es cierto que no pudo jugar los seis primeros por la sanción 'FIFA' al club, pero en el primer trimestre del año su rendimiento no ha generado pasión alguna: ni mal, ni bien, sino todo lo contrario. (Hasta el Clásico, donde sí llamó la atención negativamente). Sus cifras, pese a mostrar el mayor acierto en el pase (91,5%) de los atacantes culés, no son particularmente brillantes. Ha pasado de ser esencial en el Atlético, aunque tuviese que correr sin descanso, a ser un jugador complementario.
El caso de la ex estrella colchonera recuerda al de James Rodríguez: brillan con sus selecciones, pero no encuentran hueco en el 'once' pese a su cotización. Al igual que el colombiano con su combinado nacional, Turan marcó un gol con Turquía durante la semana del 'parón FIFA' (en Austria), justo antes del Clásico. Regresó a Barcelona y mostró un ritmo físico algo menor al de sus compañeros, aunque entrase de refresco.
El turco había saltado al campo en el minuto 74 del Clásico, en sustitución de Rakitic, con 1-1 en el marcador. Tuvo mala suerte: naufragó en medio del bajón físico de sus compañeros y ni siquiera contra diez hombres (tras la expulsión de Ramos) pudo comandar la remontada. Más bien al contrario: el equipo acabó perdiendo la imbatibilidad en un final inesperadamente entretenido y preocupante para los azulgrana, arrollados por las oleadas de Bale, Carvajal, Jesé y Cristiano. El cuarto de hora de Arda sirvió para confirmar las dudas sobre su condición física, un rumor instalado entre la hinchada barcelonista y justificado por lesiones musculares que complican aún más su optimización física en un equipo extraordinariamente competitivo.
Ofertas y competencia
Turan ha jugado 700 minutos en Liga y va camino de completar su temporada más discreta en muchos años (un riesgo que asumió, como Aleix Vidal, cuando fichó por un club sancionado). Ha marcado dos goles en partidos resueltos y ha sido perjudicado por la falta de continuidad en una plantilla sobrepoblada de 'cracks'. Su versatilidad (puede jugar de interior, mediapunta o segundo delantero) quizá le ha perjudicado, al no ser un primer recambio evidente para ningún titular (pero poder sustituir a varios). "¿Qué le pasa a Arda?", titulaba el domingo pasado el diario deportivo Sport, cercano al club.
Su paso por el Barça podría ser, de hecho, efímero si el club y el jugador aceptasen la súperoferta que ha recibido (según la prensa catalana) por parte del fútbol chino. Luis Enrique no quiere prescindir de él, pero la opción no está ni mucho menos descartada en una plantilla rebosante de talento.
El regreso de Rafinha sólo incrementa la competencia para reemplazar a Iniesta o Rakitic. El martes pasado, contra el Atlético, el hermano de Thiago Alcántara volvió a disputar minutos oficiales tras siete meses y medio de recuperación. Entró antes que el turco, en el 63, por Rakitic. Arda ingresó al campo en el 82, para los minutos de la pedrea. Rafinha (otro futbolista versátil) solía ser el jugador número 12 para Luis Enrique antes de lesionarse. El turco es muy apreciado en el vestuario culé por su carácter extrovertido, su calidad y su carisma en el campo. Y es el capitán y líder indiscutible de su selección (rival de España en la Eurocopa). Pero la ola de entusiasmo popular que levantó su fichaje por el Barça se apaga lentamente sin que quepa vislumbrar (salvo lesiones) una ventana de esperanza para consolidarse como titular. El 'orgullo de Bayrampasa' espera tiempos mejores.