La Juventus está como loca por llevarse a Higuaín, hasta ahí todo normal, el problema es el precio. El Nápoles lo ha dejado bien claro, quien quiera hacerse con el argentino tendrá que abonar 94,7 millones de euros. Esto puede suponer un shock para cualquier aficionado al fútbol español. ¿Qué ha pasado en el mundo para que Higuaín cueste 95 millones de euros?. Eso es precisamente lo que se intenta responder a continuación, cómo ha cambiado Higuaín para que su precio se haya disparado.
Marrotta, jefe de operaciones de la Juventus, ha sido claro: “No queremos pagar la cláusula de Higuaín (94,7 millones)”. Desde el Nápoles han lanzado un órdago, si le quieren tendrán que poner el dinero, ni rebajas, ni jugadores que abaraten su coste. Esta situación llamará la atención para aquellos que perdieron de vista al delantero una vez se marchó del Real Madrid. Siempre fue objeto de debate sobre su aptitud, pero todo el mundo parecía coincidir en que los 40 millones que pagó el Nápoles en verano de 2013 eran un buen negocio para los madridistas. Seguramente, si alguien les dice a esos aficionados que Higuaín ahora cuesta 95 millones, les habría sonado casi tan raro como que estuvieran jugando al Pokémon en 2016. Pero Higuaín pese a ser similar al de 2013, no es el mismo, en el fútbol italiano ha ganado recursos, regularidad, mucho músculo y, sobre todo, confianza.
Por mucho que en los partidos más importantes de Argentina siga acumulando fallos impropios de él, como le ocurría en Madrid, el Higuaín napolitano es uno de los mejores goleadores de la actualidad.
Los mejores goleadores de Europa
La temporada 2015/16 es sin duda la mejor de la carrera de Gonzalo Higuaín. Un año magnífico para el punta que con sus 36 tantos en Serie A se ha convertido en el anotador más prolífico de la historia en una edición de la competición italiana, arrebatando el récord a Nordahl tras más de seis décadas. Si repasamos la producción goleadora del delantero de los 95 millones, nos encontramos con que las cifras avalan las sensaciones mostradas, Higuaín está entre los mejores delanteros de la actualidad. Para ello hemos comparado sus cifras de goles por cada 90 minutos de juego y su acierto en la finalización (número de goles entre número de remates) para ver que sólo Luis Suárez, Ibrahimovic y Benzema han estado con un nivel de acierto cara a portería similar. El argentino es élite mundial.
Qué ha cambiado desde su adiós a España
Esta mejoría respecto al Higuaín que era demasiado bueno para ser suplente, pero no lo suficiente para quitar el puesto a Benzema, se explica por algo más que simple acierto. Higuaín ha cambiado, ha continuado esa evolución que se apreció en Madrid. Del atacante más ágil que podía jugar cerca de la banda y pisar área, a nueve más fuerte y potente, de desmarques más cortos, mejor juego de espaldas, más habilidad para chocar y más presencia en el área.
Sin duda la producción y el acierto del argentino ha ido más allá de eso. Ahora mismo Higuaín define mucho mejor. Aunque es capaz de anotar con ambas piernas, sus remates con el interior del pie derecho son mucho más precisos. Basta repasar sus goles en España e Italia para ver que ahora mismo angula mucho más los disparos, busca zonas más complicadas y que en España, aunque dejara varios tantos de bella factura, sus tiros pasaban más cerca de los porteros. Además, sabe leer mucho mejor dónde aparecer en zonas de remate, en moverse sin balón para anticiparse a los centrales en espacios reducidos.
La explosión de esta temporada también se explica por el cambio de entrenador en su club. Maurizio Sarri reemplazó a Rafa Benítez y eso tuvo un efecto positivo en el delantero. Sarri es un técnico más ofensivo que da más apoyos arriba y busca más movilidad y presencia en los metros finales. Los 38 goles de Higuaín en la 2015/16 han contado con la participación de Insigne, Callejón, Hamsik, Jorginho y, en un segundo plano, Dries Mertens. Es decir, el mejor momento rematador de Higuaín ha coincido con un cambio ofensivo en su club. Factores que han provocado que el argentino haya anotado más de un gol (1,04) por cada 90 minutos jugados este curso.
El gol y la mentalidad
A Gonzalo Higuaín siempre le han perseguido y le perseguirán una serie de errores en los días clave. Desde la final del Mundial en 2014, a las finales de la Copa América 2015 y 2016, incluso si nos remontamos a su paso por Madrid, aquel palo contra el Lyon en octavos con Cristiano solo para empujar el esférico. Siempre se le ha achacado que le falta puntería en las grandes citas y, si miramos su registro en Champions, vemos que es así: 9 goles en 48 partidos. Contando solo las eliminatorias de Champions únicamente ha anotado dos tantos en veinte choques como madridista (ante Galatasaray y CSKA de Moscú). Algo similar ocurrió en su andadura en la Copa del Rey, donde en 21 encuentros sólo marcó frente a Real Unión, Mallorca, Murcia y Ponferradina.
El cambio a Italia le ha dado galones. Él es la estrella del Nápoles y lo sabe, es consciente de que es la referencia del proyecto y por eso le blindaron con 95 millones de cláusula. Ese aumento de confianza en sí mismo, unido a jugadores que le buscan como primera opción de cada ataque le han hecho mejor y, sobre todo, encadenar goles como consecuencia de esa confianza y, a su vez, aumentar autoestima gracias a esos tantos. El círculo nada vicioso de un delantero.
Todo esto se resume en que el fútbol y la sociedad italiana están pendientes de la negociación por su fichaje. Su firma no sólo sería por mucho la contratación más cara en la historia de la Serie A, sino que complicaría aún más la relación de odio entre el sur y el norte de Italia, que tiene su máxima expresión en el balompié y, precisamente, en el Nápoles contra Juventus.