Manuela Carmena y Florentino Pérez han llegado a un acuerdo por la remodelación del Santiago Bernabéu. Tras el verano de 2018 y una inversión de más de 400 millones de euros, el club blanco dará a conocer el cambio de cara de su estadio.
El Real Madrid se ha plegado a las exigencias del Tribunal Superior de Justicia, que prohibía un aumento de la edificabilidad. Es previsible que el grueso de las obras se desarrolle durante el parón liguero de 2018 para aprovechar un descanso más largo de lo normal debido a la celebración del Mundial, que acogerá Rusia.
El terreno de juego del actual campeón de Europa quedará envuelto en piel de plata y el césped no podrá atisbarse desde el exterior. En un par de temporadas, nadie podrá mojarse en el Bernabéu. Todas las localidades se cubrirán y se instalará una cubierta retráctil, que podrá mostrar y esconder el campo a gusto de la dirección madridista. Abrir y cerrar, cubrir y descubrir, no exigirá más de quince minutos.
Un estadio más alto
Para dar el paso, el proyecto contempla un incremento de la altura del estadio. Con este cambio en la superficie, Florentino Pérez pretende convertirlo en un referente arquitectónico internacional.
El Consistorio mira conforme el techo y las paredes proyectadas por lo que tiene que ver con la contaminación lumínica y acústica, que se verán notablemente reducidas.
Pero la piel de plata del Bernabéu no será uniforme. De noche se tornará camaleónica gracias a la tecnología LED y podrá proyectar imágenes y escenas, lo que convertirá la pared en una pantalla gigante en mitad de la Castellana.
Florentino Pérez ha decidido 'democratizar' la calefacción para sus aficionados. Hasta ahora, las butacas privilegiadas contaban con este 'extra', pero el boceto aprobado recoge la instalación de un anillo calefactor, que rodeará todo el estadio. También se mejorará la ventilación, que aparece descrita como "natural" y que conllevará una "mejora de la eficiencia energética".
3.000 butacas en el lateral este
Otro de los cambios que más llamará la atención de los aficionados será el marcador. De las pantallas en los extremos, a la enormidad. Terminadas las obras, el Bernabéu contará con un luminoso 360 grados.
Las gradas conocerán una variación sustancial en el lateral este. Se construirán 3.000 butacas más, sin suponer esto un aumento del aforo del estadio. La reforma pasa por reestructurar desperfectos y mejorar la comodidad de algunas localidades.
Florentino no descarta el hotel
En un primer momento, Florentino Pérez mostró su intención de construir un hotel de lujo en el interior del estadio y ampliar su carácter comercial. Esto entrañaba el incremento del terreno edificado, viéndose afectado el Paseo de la Castellana.
El proyecto ha dado un giro en este sentido y se demolerá el centro comercial 'La Esquina del Bernabéu'. El lado oeste, conocido por los furgones policiales y los espectadores cruzando la carretera, se convertirá en una plaza peatonal con zonas verdes y, previsiblemente, se construirá un gran atrio de entrada donde se ubica el centro de compras.
No obstante, el presidente no descarta la construcción del hotel. En la presentación del proyecto, ha asegurado que dispondrán de más de 15.000 metros cuadrados libres debido al traslado de unas oficinas, que viajarán a Valdebebas.
En tiempo de Ana Botella, Pérez quiso aumentar su espacio en más de 31.900 metros cuadrados, de los cuales 12.000 se destinarían a usos terciarios. Esto suponía 'comerse' parte de la Castellana y por eso ofreció a cambio al Ayuntamiento unos terrenos en Carabanchel, un extremo que no aceptaron los tribunales. El club blanco ha reculado y peatonalizará este lugar dotándolo de una zona ajardinada, además asumiendo los costes de la obra.
Las tripas del Bernabéu
Hoy día las acciones de carga y descarga se desarrollan en la avenida de Concha Espina. El Real Madrid ha proyectado que los repartos sean subterráneos una vez finalice la remodelación.
Las entregas serán bajo tierra y se instalará un anillo perimetral interno que facilite la distribución a lo largo del Bernabéu. También se ha especificado un túnel de carros, que tendrá acceso al campo y que servirá para que los servicios médicos salten al césped.
¿Cambiará el nombre del estadio?
El Real Madrid suscribió un acuerdo de patrocinio con IPIC -compañía internacional de petróleo-, que impulsará algunos de los proyectos blancos, entre ellos el del estadio.
Florentino Pérez ha reconocido que el Santiago Bernabéu podría llevar un nuevo apellido una vez terminadas las obras. Se baraja el "CEPSA Santiago Bernabéu", al estar la compañía española participada por IPIC en un alto porcentaje.