Más descanso, menos egoísmo y el mismo grado de compromiso, que ya era el máximo. Estas tres podrían ser las claves para entender el Balón de Oro que acaba de ganar Cristiano Ronaldo, su quinto galardón. El portugués se reinventó en el año en el que parecía estar en declive y sus críticos le daban ya por jubilado. Pero resurgió. Y a un gran nivel.
Jugar menos para ganar más. Esa fue la filosofía de Cristiano en este 2017. El mejor jugador de la historia del Real Madrid entendió que, a las alturas de carrera en la que está, era más provechoso descansar en partidos que el club blanco podía ganar sin él para así reservarse en los grandes duelos. Las famosas rotaciones también le llegaron a Ronaldo. Lo que no consiguió Mourinho, Ancelotti o Benítez sí lo logró Zidane. El francés convenció al portugués y el Madrid arrasó.
Cristiano Ronaldo ganó este jueves el Balón de Oro 2017, el trofeo que le reconoce como el mejor jugador del año. Es el trofeo individual más preciado del fútbol y el madridista ya tiene cinco (2008, en el United, y 2013, 2014, 2016 y 2017). Hace cinco años estaba a tres de Messi y hoy están empatados. En eso también radica el éxito de Cristiano. Ha sido capaz de igualar al argentino en una época que parecía ser de única propiedad de Leo.
Unanimidad en el mundo del fútbol
Si el Balón de Oro conseguido en 2016, y también ganando la Copa de Europa con el Real Madrid, se debió principalmente a ser el líder de Portugal, que alcanzó la hazaña de ganar la Eurocopa, este de 2017 es íntegramente por sus éxitos en el club blanco. Su participación decisiva en Champions asombró al mundo y no dejó en duda a nadie.
También ganó el 'The Best', el premio que otorga la FIFA y en el que votan periodistas, seleccionadores nacionales y capitanes de todos los países. En el Balón de Oro solo votan periodistas, pero también han repetido los resultados del otro gran galardón. Prácticamente hubo unanimidad en el fútbol mundial. Cristiano, en 2017, fue mejor.
Y lo fue por una racha espectacular en el tramo decisivo de la temporada. El Balón de Oro, a diferencia del 'The Best', se da por lo realizado en año natural (de enero a diciembre) pero en el fútbol no es igual el mes de noviembre que el de mayo. En ambos podrá haber el mismo número de partidos, pero la trascendencia de los mismos es muy diferente.
Zidane le convenció para descansar y de ahí el éxito
Es por ello que no es igual destacar en el inicio de la presente temporada que en el final de la anterior. No es lo mismo marcar tres goles al Girona en Liga que al Atlético en semifinales de Champions. Y en eso Cristiano ganó por goleada. Marcó cinco goles al Bayern de Múnich en cuartos de final, tres tantos al Atlético de Madrid en semifinales y dos a la Juventus en la final. 10 goles en las tres rondas decisivas de la Champions no se habían visto nunca. Eso le hizo ser el mejor.
Y para arrasar en esos cinco encuentros, los más importantes del año (no ha habido ni Mundial ni Eurocopa), Cristiano tuvo que quedarse fuera de convocatorias en varios partidos de Liga. Zidane le convenció de que sería un mejor futbolista y más determinante si jugaba menos para después estar al 100% en aquello que disputaba, que además era lo más importante.
Cristiano no viajó a Leganés, Gijón, La Coruña y Granada cuando el Madrid se estaba jugando mucho, con la Liga apretada y sin el título asegurado. Ronaldo prefirió perder incluso el Pichichi y la Bota de Oro (la consiguió Messi) en pro del beneficio del equipo. Por eso, el Cristiano que hemos visto este año es el menos egoísta. Modificó aquello que tantos años le persiguió y además le vino muy bien a él y a su equipo.
Con el Balón de Oro ya en la mano, el cuarto en cinco años, Cristiano se dará cuenta de que también la gestión de Zidane le hizo estar este jueves ahí, bajo la Torre Eiffel de París, logrando una imagen icónica. El Cristiano más compañero entendió que su físico ya no daba para jugar 60 partidos al año. Por eso, este 2017 fue el primero de los últimos años en el que acabó bien la temporada, sin cansancio ni lesiones.
Debe disfrutar Cristiano de lo que hoy tiene porque ahora ya sí que es imprevisible si volverá a repetir éxito. Su triunfo es no haberse dado por vencido jamás a pesar de que todos los titulares iban a por Messi. Cuando llegó a estar a tres Balones de Oro del argentino, Ronaldo peleó y hoy tiene la recompensa. Quinto Balón de Oro. Eso no lo consigue un cualquiera. Cristiano es leyenda del fútbol.
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