La caída está asumida. Duele –y mucho–, pero da igual. El Atlético sabe que lo ha hecho mal en esta fase de grupos, es plenamente consciente de que no ha merecido el pase. Reconoce entre bambalinas que no tuvo que empatar en ninguno de sus dos encuentros contra el Qarabag, que no sirvió de nada la victoria ante la Roma en el Metropolitano y que no se dio la carambola en la última jornada (los colchoneros empataron en Stamford Bridge y los italianos hicieron sus deberes en el Olímpico). Todo eso ha castigado a los rojiblancos, que se han quedado fuera de octavos de Champions por primera vez desde que llegó Simeone. Pero eso pasado. Lamentarse ya no sirve de nada. Ahora, los rojiblancos tienen que pensar en el futuro. O lo que es lo mismo, en la Europa League, en la Copa y en la Liga. Y tienen un plan, eso nadie lo duda.



Lo prioritario, a estas alturas, es que el equipo termine bien la primera vuelta de la Liga. Los dos pinchazos del Barcelona (empates ante Valencia y Celta) han colocado a los rojiblancos a seis puntos del liderato. Pues bien, el objetivo es seguir como mínimo a esa distancia cuando la competición pare por Navidades. Cronológicamente, el Atlético se enfrentará a Betis, Alavés y Espanyol antes de irse de vacaciones. La consigna, por tanto, es sumar nueve puntos e ir a comerse el turrón.



Después se incorporarán los fichajes. En primera instancia, Vitolo y Diego Costa, fichados en verano, pero inscritos durante el mercado invernal. Ambos llegarán en buena forma a la segunda mitad de la temporada. El ex del Sevilla, tras sufrir una lesión, dejó Las Palmas y viajó a Madrid para tratarse. El club ya está trabajando para que se incorpore al grupo con normalidad a partir de enero. Y lo mismo le ocurre a Diego Costa, que ya entrena con sus compañeros desde hace tiempo, pero no ha podido debutar. Ha vuelto a su peso ideal y se encuentra en perfectas condiciones. Es decir, los rojiblancos incorporarán dos jugadores de garantías.

Los jugadores del Atlético celebran el gol de Saúl. Reuters



A partir de ahí llegan las hipótesis. O, más bien, las dudas. El Atlético necesita varios jugadores más si no quiere sufrir en la segunda mitad de la temporada. Sin contar con las bajas, Simeone sabe que necesita un lateral izquierdo para suplir a Filipe Luis, que se ha lesionado en reiteradas ocasiones esta temporada, y un centrocampista.



Pero, obviamente, alguien tiene que salir para que lleguen los mencionados fichajes. Y, por orden, los candidatos a abandonar el Atlético son Vrsaljko, que ya le ha hecho saber al club que quiere marcharse; Gaitán, que quiso irse en verano y, tras recibir la negativa, va a intentarlo ahora; Vietto, que no ha marcado este curso; y Gameiro, que, a pesar de marcar goles, sigue sin convencer a Simeone.



Por tanto, más allá del lateral izquierdo que necesita Simeone, el Atlético podría incorporar uno derecho (ha jugado Thomas hasta el momento, pero el Cholo prefiere que juegue en el centro del campo), un centrocampista creativo que podría llegar para sustituir a Gaitán y quizás un delantero si finalmente Gameiro o Vietto salen en enero. En ese caso, el equipo tan solo se quedaría con tres (Torres, Griezmann y Diego Costa), y el Atlético podría rastrear el mercado para incorporar a otro más.



Este es el plan: seguir como hasta ahora e incorporar jugadores que sumen a un proyecto que tiene como objetivo culminar en 2019, en el Wanda Metropolitano, y con la final de la Champions como escaparate y premio. Hasta entonces el Atlético luchará por la Europa League, una competición que se le da muy bien, y la Liga, muy apetecible y factible viendo el estado de forma de Madrid y Barça esta temporada. A estas dos se les suma la Copa, la otra posibilidad. Tres títulos y un equipo renovado en enero. Esa es la estrategia. ¿Le saldrá bien al conjunto rojiblanco? Ya se verá.

Los jugadores del Atlético celebran el gol de Griezmann ante la Real Sociedad. Reuters

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