Tabarnia es una región histórica que abarcaba lo que ahora es geográficamente Tarragona y Barcelona. Tras los resultados de las elecciones catalanas del pasado 21 de diciembre, han aparecido movimientos, algunos en broma y otros en serio, en los que se pide la independencia de esta región de Cataluña con el resto si es que Cataluña se independiza de España.
Sus defensores alegan que "se diferencian en muchos aspectos al resto de Cataluña", se posicionan políticamente como "constitucionalistas" y quieren "seguir dentro de España de forma "incondicional". En Tabarnia están nueve de las diez ciudades más pobladas de Cataluña y en este territorio que agrupa 10 comarcas (Tarragonès, Baix y Alt Penedès, Baix Camp, Garraf, Baix Llobregat, Barcelonès, Vallès Oriental y Occidental y Maresme) ganó Ciudadanos de forma clara en los últimos comicios.
En Tabarnia, explican, tienen como ejemplo a la comunidad autónoma de Madrid ("fue parte de Castilla y es actualmente uno de los motores de España") y denuncian el déficit fiscal negativo con el resto de Cataluña, la validez de su voto "tres y cuatro veces menos con respeto a Girona y Lleida" y se presentan como un territorio contrario a la independencia también por el daño que le hace al turismo y a la convivencia.
Esta propuesta de nueva Comunidad Autónoma dejaría un mapa totalmente diferencia al de la actual Cataluña y, por ello, también en el fútbol catalán. Todo cambiaría radicalmente porque en el territorio que agrupa Tabarnia están los principales equipos catalanes. De los 43 mejores equipos de Cataluña, aquellos que están en las categorías más altas (tres en 1ª División, otros tres en 2ª, siete en 2ªB y los 20 del grupo V de Tercera División), solo ocho no pertenecen a Tabarnia.
¿Cómo quedaría una Liga Catalana sin Tabarnia?
Girona (1ª), Llagostera, Lleida, Olot y Peralada (2ªB) y Ascó, Figueres y Palamós (3ª) son los únicos clubes, de los que actualmente están en las cuatro primeras categorías españolas en las que participan equipos catalanes, que quedarían en la Liga Catalana. Para rellenar el torneo, los organizadores tendrían que recurrir a equipos de regional.
El Girona, actualmente 10º en Primera División en el que está siendo su primer año en la primera categoría, sería el gran favorito para ganar la Liga Catalana. Su principal rival sería el Lleida Esportiu, actualmente 13º en el grupo III de Segunda División B. El equipo ilerdense, además, está todavía vivo en la Copa del Rey, donde en el inicio de 2018 se enfrentará al Atlético de Madrid en los octavos de final.
Para la nueva Liga Catalana quedaría el Llagostera, que ha militado recientemente dos años en 2ª y ahora va 15ª en 2ªB, el Olot (18º en 2ªB), el Peralada (17º en 2ªB) y tres equipos de la Tercera División: Ascó, Figueres y Palamós. Habría que coger a equipos de regional para rellenar una Liga de un mínimo nivel para llegar a un torneo de al menos 12 equipos.
Así quedaría la Liga de Tabarnia
Cataluña se quedaría tan vacía a nivel de fútbol porque prácticamente todos sus equipos punteros están en el territorio de Tabarnia: Barcelona, Espanyol, Nástic de Tarragona, Reus, Sabadell, Cornellà, Badalona... la parte donde no se quiere la independencia es la más rica futbolísticamente.
En Tabarnia estarían el Barcelona y el Espanyol, dos de los tres equipos catalanes en 1ª División, el Nástic de Tarragona, el Reus Deportiu y el Barcelona B, los tres equipos catalanes en 2ª División, y tres de los siete equipos de 2ªB, precisamente los tres equipos que están mejor situados en la clasificación: Cornellà (3º), Sabadell (9ª) y Badalona (11ª). Además, 17 de los 20 equipos del grupo V de Tercera (el grupo catalán) son también conjuntos situados en el territorio de Tabarnia. Entre estos destacan Sant Andreu, L'Hospitalet o Terrassa.
Si nos basamos en los últimos resultados dentro de las competiciones españoles, la Liga de Tabarnia estaría liderada por el Barcelona, que ganaría el torneo todos los años, ya que siempre acaba por delante del Espanyol, su rival más inmediato. En tercer lugar, y contando por lo hecho en los últimos años, estaría el Nástic de Tarragona, aunque por clasificación histórica le supera el Sabadell, ya que los arlequinados han militado 14 años en Primera División.
Todos los equipos del área metropolitana de Barcelona así como el Reus, que pertenece a la comarca del Baix Camp (justo en la línea de esta nueva reivindicación territorial), completarían la Liga de Tabarnia que, viendo el nivel de sus equipos, podría contar con una plaza para la previa de la Champions para el ganador y otra para la previa de la Europa League si lo comparamos con otras ligas similares. Eso sí, si Tabarnia se independizara de la Cataluña independiente para querer seguir con España, no tendría sentido tener una liga propia, jugarían en la española.
Si este análisis lo completamos con otros deportes, en la Liga ACB de baloncesto los dos equipos catalanes están en Tabarnia (Barcelona y Joventut), tal y como ocurre con la Liga ASOBAL de balonmano (Barcelona y Granollers). Además, el circuito de Montmeló, otro de los lugares más reconocidos del deporte catalán y donde se disputa el GP de España de Fórmula 1 y el GP de Cataluña de MotoGP, también está en territorio de Tabarnia.
Queda la conclusión que el verdadero potencial del fútbol catalán, así como el resto del deporte, está en esta región ficticia denominada Tabarnia, un territorio que se parece en poco al resto de Cataluña y que dejaría a la tan añorada catalana prácticamente sin emoción. Aquí gana el constitucionalismo, se quiere seguir siendo España y sus habitantes son generalmente urbanos y cosmopolitas.