Tomas Vaclik fue uno de los grandes protagonistas del encuentro entre el Real Madrid y el Sevilla. Su actuación en el campo fue muy alabada por todos debido a las paradas que realizó, especialmente un mano a mano ante Gareth Bale que pudo cambiar el rumbo del partido.

Lo que nadie se podía imaginar es que el guardameta checo no había dormido nada la noche anterior. La hija pequeña de Vaclik sufrió una fuerte caída en el día anterior al choque y tuvo que pasar la noche anterior en observación para descartar daños, lo que hizo que el portero checo pasara la noche en vela, preocupado, como es lógico, por su pequeña. La niña se encuentra fuera de peligro.

Pablo Machín dejó en manos del arquero de 29 años si jugar o no en el Sánchez-Pizjuán y Vaclik no dudó. En su cuenta de Twitter subió una publicación con una imagen que era una declaración de intenciones, aunque en aquel momento nadie sospechaba lo que se ocultaba tras el tuit.

Un seguro sobre el campo

El resto de la historia no es un secreto para nadie, Tomas Vaclik fue de la partida ante el Real Madrid y cuajó una gran actuación. Puso un cerrojo a la portería sevillista y no le tembló el pulso en los momentos decisivos, destacando la parada ante Gareth Bale en un mano a mano que fue la ocasión más clara del Real Madrid.

Ya después del partido, dentro del vestuario, Pablo Machín destacó su actuación en la charla posterior al partido y sus compañeros le dieron una sonora ovación. Ya horas más tarde, volvió a utilizar su cuenta de Twitter para dedicar a los sevillistas la victoria del equipo en una gran noche para él que siguió a una de sus peores noches.

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