El Barcelona sufrió una de las derrotas más dolorosas de su historia en Anfield. Los culés llegaron a las islas británicas con el autoestima por todo lo alto después del 3-0 cosechado en la ida. Pero un equipo sin actitud y con falta de fútbol cayó derrotado por 4-0 ante un Liverpool muy superior en el global de la eliminatoria. Esto dejó tocado al vestuario, en especial a un Leo Messi que no pudo evitar las lágrimas.

Según desvela The Guardian, el delantero argentino lloró dentro del vestuario. Allí se encontraban todos sus compañeros que vieron como uno de los mejores del mundo volvía a fracasar en la competición más importante a nivel de clubes. En el vestuario reinaba un silencio absoluto, solo interrumpido por el llanto de Messi. Era el más dolido por la decepción en la Champions League.

Se esperaba que el futbolista fuese uno de los que diesen la cara tras la debacle contra el Liverpool en Anfield, pero no fue así. Lionel Messi no habló ante los medios de comunicación y solo Busquets y Luis Suárez hablaron ante la prensa en la zona mixta del mítico estadio inglés. El primero, además, también dio la cara a pie de campo, donde se le vio frustrado y evitando llorar por el ridículo gestado.

Messi quería la Champions

Si hay un futbolista del Barça que soñaba como ningún otro con hacerse con 'La Orejona' ese era Messi. El '10' blaugrana dijo a principios de temporada que quería recuperar "esa copa tan linda y deseada", pero vio este sueño naufragar en uno de sus peores partidos de la temporada, que se unió a los fallos en defensa y a la pasividad en el cuarto gol del Liverpool. Leo se fue en silencio de Anfield, después de pasar el control antidopaje, y tan solo acompañado por su inseparable Pepe Costa.

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