El entrenador del Mirandés, Andoni Iraola se ha mostrado muy contento con el partido que ha hecho su equipo en el que ha eliminado al Villarreal y se ha clasificado para semifinales, algo que a juicio del técnico es "un recuerdo que queda para toda la vida".
"Me alegro sobre todo por los jugadores que han hecho un esfuerzo brutal", reconoce el técnico, que desde que era jugador siempre ha tenido un idilio con la Copa del Rey, la cuál cree que "es muy bonita si apuestas por ella y salen las cosas bien". En cuanto al rival, el técnico no olvida su pasado como jugador y afirma que "ojalá pase el Athletic", que este jueves se enfrenta al FC Barcelona.
Avisó de que el Mirandés tratará de "dar guerra también" en los dos partidos que volverán a ser históricos en semifinales, sin olvidarse de la liga, donde la próxima cita será en El Molinón ante el Sporting de Gijón, Iraola ha sido claro y quiere "hacer cuanto antes los 50 puntos que marcan la permanencia" ya que afirma que "la segunda división es muy complicada".
Sobre el tiempo que tardará el equipo en asimilar esta victoria, Iraola confesó que ahora están "en una nube" y que probablemente no sean del todo conscientes. "Es una gozada tener noches así y hay que disfrutarlas porque no hay muchas. Ha sido todo bonito. Los jugadores han hecho un esfuerzo terrible", agregó.
Un equipo con mucho espíritu
Además, el técnico del Mirandés consideró que es un equipo que tiene "mucho espíritu". "Hemos cometido errores, no ha sido un partido perfecto, nos han empatado dos veces, hemos seguido insistiendo y nos ha llegado el premio", explicó. Sobre el amuleto que siempre le acompaña, manifestó que "te sientes más seguro" y que no le está yendo mal por lo que "seguirá".
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