Getafe y Celta firman un empate sin goles en el Coliseum Alfonso Pérez
Ambos equipos no consiguieron anotar ningún tanto en un encuentro de mucha igualdad.
7 marzo, 2020 23:21
El Getafe chocó contra el Celta y firmó un empate sin goles en el Coliseum Alfonso Pérez, donde el equipo de José Bordalás se estampó contra la jaula que montó su rival, cerrada a cal y canto para rascar un punto en uno de los estadios más complicados de Primera División. [Narración y estadísticas: Getafe 0-0 Celta]
Con el Inter en el horizonte y con la pelea por el tercer puesto ardiente, el Getafe recibió a un equipo necesitado de puntos para intentar despegarse de una vez de los puestos de descenso. El Celta sigue coqueteando con ellos y cada vez quedan menos jornadas. Sin duda, el Coliseum Alfonso Pérez, a priori, no era el mejor lugar para intentar dar el primer paso para alejarse de las últimas plazas.
Sin Iago Aspas, su jugador franquicia ausente por sanción y en un estadio en el que sólo ha ganado una vez en Primera División, el equipo de Óscar García apostó por olvidarse de su estilo e intentó repetir la jugada maestra de Julen Lopetegui. El técnico del Sevilla, hace dos jornadas, bajó al barro y consiguió un meritorio 0-3 en el Coliseum.
Con cinco defensas, dos de ellos carrileros largos (Hugo Mallo y el uruguayo Lucas Olaza) y el regreso del croata Filip Bradaric al centro del campo con Santi Mina en el lugar de Aspas, el Celta intentó achicar espacios ante un equipo que tiene como mejor arma la presión asfixiante, el robo de balón con espacios y las estocadas de sus delanteros.
En esta ocasión, Bordalás utilizó arriba Jorge Molina junto a Jaime Mata y sentó al brasileño Deyverson Silva y a Ángel Rodríguez. Con el camerunés Allan Nyom en el lateral izquierdo en el lugar del lesionado Mathías Olivera, y con el regreso de Marc Cucurella, el Getafe se las prometía felices con un inicio excesivo.
Consciente de que una victoria le servía para acabar la jornada en la tercera plaza, las revoluciones, siempre muy elevadas, fueron excesivas desde los primeros segundos. Nyom y Cucurella marcaron territorio con dos faltas innecesarias y el Celta, salvo un disparo del ghanés Joseph Aidoo que detuvo David Soria, no volvió a acercarse al territorio dominado por el portero azulón.
Así consiguió el Getafe amedrentar a su rival, que aunque no podía vivir de la fantasía del brasileño Rafinha Alcántara, sí pudo sujetar las acometidas del cuadro madrileño. Sin embargo, pese a su dominio, el equipo de Bordalás sólo tuvo dos oportunidades claras en el acto inicial: un lanzamiento desde fuera del área que sacó de milagro Rubén Blanco y un cabezazo a bocajarro de Jaime Mata que botó en exceso para marcharse por encima del larguero.
Eso fue todo. Los primeros 45 minutos dejaron un fútbol muy físico y muy táctico en el que el Getafe salió ganador a los puntos sin poder noquear al Celta. Los hombres de Óscar García aguantaron con orden y se encomendaron a alguna jugada aislada para llevarse la victoria en la segunda parte.
En la reanudación, el Getafe salió envalentonado y con ganas de resolver el partido por la vía rápida. Bordalás dio entrada a Ángel y durante 15 minutos estuvo a punto de conseguir su objetivo, pero Rubén detuvo un cabezazo de Jaime Mata y un disparo de Ángel, a quien después anularían un tanto por fuera de juego.
El Celta sólo consiguió sacarse de encima el dominio del Getafe con la entrada de Brais Méndez, que sentó en el banquillo a un desdibujado Rafinha. Con él sobre el césped, y con Smolov enchufado, el cuadro gallego consiguió respirar durante 15 minutos.
Pero quedaba el tramo final. El tercer puesto era muy goloso para el Getafe, que tocó a rebato para superar al Sevilla en la clasificación. Empujó con un picotazo del brasileño Robert Kenedy, pero justo después las tornas cambiaron con la expulsión por doble amonestación de Arambarri.
El Celta, con un hombre más durante el último tramo, vivió cómodo esperando el final. No tuvo mucha ambición y se dejó llevar. El Getafe tampoco fue capaz de hacer mucho más. Sólo algún arreón sin final feliz. No pudo con su rival y perdió una oportunidad de oro de firmar una jornada redonda tras los empates del Sevilla, del Atlético y del Valencia y la derrota de la Real Sociedad.