Fichajes. El verano arranca y con ello esta ventana tan emocionante que se abre cada año en el mundo del fútbol: el mercado de fichajes. Todos los aficionados quieren conocer las nuevas caras que llegarán a sus equipos, pero este año, por culpa de la pandemia del coronavirus, apuntaba a que los movimientos iban a ser mucho más reducidos y de menor calado.
Los primeros días de mercado no están diciendo lo mismo. Los primeros grandes fichajes del verano ya se están produciendo y no parece muy diferente a lo ocurrido otros años. Hasta diez operaciones superan hasta ahora los 30 millones de euros. Dos de ellas se había anunciado antes de la crisis: Ziyech al Chelsea (40M) y Trincao al Barça (31M). Otros tres son opciones de compras ejecutadas: Morata por el Atlético (56M), Icardi por el PSG (50M) y Lo Celso por el Tottenham (32M).
Los primeros movimientos que se están produciendo ahora son sorprendentes. Desde Timo Werner al Chelsea por 53 'kilos' hasta Thiago Alcántara, que dejará el Bayern para firmar por el Liverpool por otros 35 millones. Movimientos que no presentan atisbos de una crisis que preveían los expertos. Y aunque los primeros fichajes lleven la contraria a los que esperaban una caída en picado del mercado, en la práctica se puede comprobar que los equipos están aprovechando métodos para 'esquivar' la crisis.
Timo Werner, durante un partido
El 'caso Chelsea'
La excepción sería el Chelsea, equipo que en dos movimientos (Ziyech y Werner) ya supera los 90 millones en gastos y va a por Kai Havertz, del Bayer Leverkusen, que como mínimo saldría entre 70-80 'kilos'. Pero tiene un porqué este desembolso tan elevado de los blues y es que el verano pasado no pudieron fichar por la sanción FIFA que sufrió. Así este mercado de verano parece que está dispuesto a saltar la banca pese a los daños financieros que haya podido sufrir por el parón y la puerta vacía.
Arthur Melo, durante un partido con el Barça
Trueques encubiertos
Otras dos operaciones que han sorprendido han sido las de Arthur Melo y Miralem Pjanic que han tomado caminos opuestos y cambiarán la camiseta del Barcelona por la de la Juventus y viceversa. Sus fichajes son los más caros por ahora, pagando la Juve por Arthur 72 millones y el Barça por Pjanic 60. Operaciones independientes una de otra, pero truques al uso.
El motivo de que sus precios sean tan altos es una estrategia para cuadrar las cuentas de ambos. El Barça, por ejemplo, debía ingresar 70 'kilos' antes del 1 de julio para cumplir con su previsión de ingresos por ventas. Con la de Arthur se cumplió de una tacada. Lo único 'real' de las cifras son los 12 millones de más que recibirá el Barça por ambas operaciones. Este ha sido el primer gran trueque del verano, pero vendrán mas.
Leroy Sané, en un entrenamiento del Manchester City
'Gangas' de mercado
Varios de los fichajes que se han visto tiene una tónica común y es que los jugadores entraban en su último año de contrato. Esto desde siempre ha significado un descenso en el precio de los futbolistas y este año no iba a ser menos. Así, pese a tratarse de grandes desembolsos, como Werner, Leroy Sané o el inminente traspaso de Thiago, estos se producen por un precio inferior al valor real.
Con Werner, su valor es de 64 y se pagan 53 millones. Con Sané la cosa aumenta y es que su valor es de 80 y lo pagado son 50 al Manchester City por el Bayern. Thiago, por último, tiene un valor de 48 y saldrá del club bávaro por 35.
La celebración del gol de Achraf Hakimi en protesta por la muerte de George Floyd
Grandes que venden
Si los grandes quieren no tener que ajustarse mucho el cinturón para hacer fichajes, la solución está en vender. Vender bien y en clave de jugadores que no supongan un drama para el equipo. Es el caso del Bayern, que ha sacado 35 'kilos' por Thiago que acababa contrato en 2021 para pagar tres cuartos del pase de Sané.
O el Real Madrid, que ha hecho una gran venta con los 40 millones ingresados de Achraf Hakimi. Con el puesto cubierto en el primer equipo con la presencia de Dani Carvajal y las pretensiones del propio jugador, que quería salir, el Madrid ha optado por una venta definitiva que puede ayudar a afrontar un futuro fichaje o sanear la arcas del club.
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