Las investigaciones sobre el supuesto examen falso aprobado por Luis Suárez para obtener el pasaporte italiano continúan. Sin embargo, la Juventus ha querido desmarcarse de todo el caso ante los accionistas del club. Agnelli, máximo representante de la entidad de Turín, se ha enfrentado a las preguntas de los más críticos y ha dejado claro que ni afecta ni afectará al club.
El presidente de la Juventus, ante las constantes preguntas sobre la vinculación del club con Luis Suárez y el posible fraude, ha asegurado que "no hay riesgo de responsabilidad" para la entidad y que las noticias publicadas donde se hacía referencia a conversaciones telefónicas de representantes de la Juve no son verdad.
"Las frases citadas no corresponden al contenido de las llamadas telefónicas. Son el resultado de una historia distorsionada hecha de repente por personas que están obligadas a observar el secreto de la investigación", ha indicado Agnelli.
"La investigación está en curso y es secreta, como reiteró repetidamente el Fiscal de Perugia, el Dr. Cantone". Por ello, el dirigente de la Vecchia Signora ha recalcado que "la Juventus no tiene nada que ver con el examen de Luis Suárez" y ha aprovechado para señalar al uruguayo. Las palabras de Agnelli no han pasado desapercibidas para nadie.
Este ha indicado que la prueba fue un "examen que el jugador ha decidido afrontar por su cuenta a pesar de que la Juventus ya le había comunicado y públicamente la voluntad de no ficharle". Es decir, que Luis Suárez continuó con el proceso de obtener el pasaporte pese a que la entidad italiana ya había descartado llevar a cabo la operación, tanto en público como en privado.
Y es que la obtención del pasaporte era fundamental para que Luis Suárez fichara por la Juventus. El club italiano, al contrario de lo que pensaba el delantero, sabía que la documentación no llegaría a tiempo y que, por ello, no tenía sentido que realizara el examen.
Tras estas palabras de Agnelli quitando cualquier peso a la Juve se reafirma la posición que en un primer momento trasladaron las autoridades italianas. Y es que en los días iniciales del caso, cuando todo eran dudas y acusaciones sin fundamento, la policía italiana quitó responsabilidad a la Juventus. "El club no está bajo investigación", indicaron.
Las dudas del examen
La prueba realizada por Luis Suárez no fue un proceso habitual. Ni antes del examen ni después, cuando se filtraron numerosos detalles de la investigación y que generó un notable malestar entre los mandos policiales. Uno de sus cargos llegó a criticar que la prensa estuviera siendo tan insistente con el caso.
Entre las preguntas que se realizaron al jugador estaba la de su nombre, la petición de decir el nombre de una ciudad italiana o simplemente explicar en dicho idioma a qué se dedicaba profesionalmente. Cuestiones sin gran complejidad y para las que se había preparado Luis Suárez durante las clases.
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