La relación entre Leo Messi y el Fútbol Club Barcelona es cosa del pasado. El PSG ha anunciado el fichaje del astro argentino, quien dejó Can Barça después de estar los últimos 21 años vistiendo la elástica azulgrana. Prácticamente toda una vida como culé, la cuestión es ¿cómo se ha llegado a esto? ¿Qué ha pasado para que Messi haya abandonado el equipo de su vida? La historia entre Leo y el Barcelona, desde su llegada a su salida, se divide en diferentes capítulos:
1. Primer contrato y renovaciones
Con tan solo 12 años, Leo Messi firmó su primer contrato con el Barcelona. Todo sucedió en la cafetería del Club de Tennis Pompeia de la Ciudad Condal. Era un 14 de diciembre del 2000, cuando el acuerdo que unió al por entonces prometedor futbolista y al club blaugrana se plasmó en una servilleta.
"En presencia de los Sres. Minguella y Horacio (Gaggioli), Carles Rexach, secretario técnico del FC Barcelona, se compromete bajo su responsabilidad y a pesar de algunas opiniones en contra a fichar al jugador Lionel Messi siempre y cuando nos mantengamos en las cantidades acordadas", se puede leer en una de las servilletas más famosas de la historia.
¿Dónde está ahora ese primer contrato? Pues bien, la servilleta es posesión de Horacio Gaggioli, quien la tiene bien custodiada en una caja fuerte del banco Crédit Andorrà. Pese a haber recibido ofertas millonarias por este 'documento', él no piensa en una venta y ya aseguró que tan solo se cedería la servilleta, a modo de préstamo, al Museo del FC Barcelona. "Creo que debería estar allí, en un lugar preferencial junto a los Balones de Oro de Messi, ya que ese papelito es el que le cambió la historia contemporánea al club", explicó en su día Gaggioli al medio argentino Infobae.
Desde ese primer contrato, hasta en nueve ocasiones ha renovado el '10' de Argentina por el Barça. La primera de ellas se firmó cuando el futbolista recién cumplía la mayoría de edad. Así las cosas, en junio del 2005, Leo pasó de tener un contrato profesional a otro que le convirtió en jugador de pleno derecho del primer equipo, con fecha de vencimiento en 2010.
En septiembre de ese mismo año, Laporta volvió a subirle el sueldo ante el temor de que los grandes de Europa pudiesen tentarle. Tan solo dos años más tarde, en enero de 2007, llegó su tercera renovación. Así se prorrogó su contrato hasta 2014, ascendiendo su cláusula de rescisión hasta los 150 millones de euros. Sin esperar a la fecha límite, el Barça volvió a mejorarle el contrato un año más tarde, triplicándole ahora el sueldo hasta alcanzar los 8,5 'kilos' por temporada.
Con el triplete, el primero de su carrera, un nuevo contrato fue preparado para el de Rosario. Era 2009 y ampliaba su vinculación hasta 2016, pasando a tener de una cláusula de 250 millones de euros y 10,5 'kilos' de sueldo. Entonces pasaron hasta tres años para que Messi firmase una nueva renovación, la sexta. Su ficha ascendió hasta los 12 millones, para que en 2014, antes del Mundial de Brasil, volviese a poner estampar su rúbrica, disparándose su sueldo a los 20 'kilos'.
Todavía quedaban dos renovaciones más hasta su salida en 2021. Y fueron seguidas. La primera de estas, la octava en el cómputo global, se cerró en junio de 2017, y tan solo cinco meses más tarde, nuevamente el Barcelona mejoró el contrato a Leo Messi con la famosa cláusula de 700 millones y el megacontrato que luego detallaremos, el de los más de 500 'kilos'.
2. Rijkaard, el técnico que le hizo debutar
La alternativa con el primer equipo del Barcelona se la dio Frank Rijkaard. El técnico neerlandés llegó a Can Barça de la mano de Joan Laporta en el año 2003. Con él dio sus primeros pasos con los 'mayores' el rosarino y con él también como dueño del banquillo azulgrana, Lionel Messi se convirtió en futbolista de pleno derecho del primer equipo, con su mejora de contrato correspondiente.
Con Rijkaard ganó sus primeros títulos como jugador profesional y pese a que desde entonces ha jugado bajo las directrices de otros entrenadores de la talla de Guardiola o Luis Enrique, Messi siempre ha mantenido que el técnico más importante de su carrera futbolista es Frank Rijkaard. Y es que en su día aseguró que de no haber estado este en el banquillo, tal vez él nunca hubiese llegado al primer equipo culé.
"Todos los entrenadores que tuve en Primera me dejaron cosas, pero creo que el más importante en mi carrera fue Rijkaard. Si él no hubiese decidido ponerme en el primer equipo para que entrenara y jugara quizás no hubiese llegado nunca al primer equipo. Siempre dije que fue para mí una persona muy importante porque confió en mí, me metió en el momento justo, me hizo jugar en el primer equipo", explicó Messi a la televisión egipcia MBC en 2016.
3. Guardiola y la época dorada
Del Barça de Rijkaard y Ronaldinho, Eto'o y el propio a Messi, a la limpieza de Guardiola del vestuario culé a su llegada. Las salidas reforzaron la figura de Leo como estrella y entender la etapa más dorada del club sin el seis veces ganador del Balón de Oro sería imposible. Catorce títulos conquistaron Messi y Guardiola juntos, aunque la época final de su alianza no fue tan buena.
Dos veces campeones del Mundial de Clubes, dos de la Champions League, dos de la Supercopa de Europa, tres de La Liga y tres de la Supercopa de España. Su leyenda se fue haciendo más grande de la mano de Guardiola, aunque también el desgaste fue haciendo mella en el proyecto campeón. Con la gran rivalidad ante el Real Madrid de José Mourinho y la alta exigencia de Pep, el técnico de Sampedor dijo adiós en medio de una fractura con los pesos pesados del vestuario.
Con el paso de los años, todo acabó quedando en el olvido. Pep Guardiola siempre ha mantenido que el mejor futbolista la que ha entrenado es Leo Messi, mientras que el argentino le explicó a Jordi Évole que "Pep tiene algo especial, te hace ver las cosas de una manera: cómo preparaba los encuentros, defensivamente, cómo atacar... te decía exactamente dónde estaba el partido, cómo había que atacar para ganar".
4. Messidependencia deportiva
La importancia de Messi fue haciéndose más y más grande en el FC Barcelona. Salidas como las de Ronaldinho o Eto'o impulsaron la figura del argentino, pero también provocaron que la dependencia en torno a Leo fuera creciendo. Nadie marcaba más que él en Can Barça. Nadie era tan decisivo en los últimos metros. Y ni que decir tiene que sus faltas al borde del área eran prácticamente como un penalti para el resto de los mortales.
Su grandeza dentro de los terrenos de juego se vio trasladada fuera de ellos en forma de trofeos, tanto a nivel individual como colectivo. En lo que se refiere a los premios que se ha llevado individualmente destacan los seis Balones de Oro conquistados en 2009, 2010, 2011, 2012, 2015 y 2019. A ellos hay que sumar un The Best de la FIFA (2019); tres galardones de Mejor Jugador de Europa (2009, 2011 y 2015); diez veces considerado como el mejor jugador de La Liga y en 22 ocasiones ha sido el máximo goleador de las diferentes competiciones que ha disputado.
En cuanto a los títulos ganados con el Barcelona en el plano colectivo, los trofeos más importantes pueden ser las cuatro Champions League (2005/2006, 2008/2099, 2010/2011 y 2014/2015). Además, también ha conquistado como blaugrana diez Ligas (2004/2005, 2005/2006, 2008/2009, 2009/2010, 2010/2011, 2012/2013, 2014/2015, 2016/2016, 2017/2018 y 2018/2019), siete Copas del Rey, ocho Supercopas de España, tres Supercopas de Europa y tres Mundiales de Clubes.
5. Poder en el vestuario
El creciente protagonismo de Messi le llevó a ser el gran dueño del vestuario azulgrana. Mucho se ha hablado durante los años de Leo en el equipo de elegir fichajes y también de señalar a jugadores para que se fuesen. Entre estos últimos, recordados son los episodios con algunos canteranos. Mito o realidad, lo cierto es que el conocido como 'el club de los amigos de Messi' se convirtió en el núcleo fuerte del equipo.
Los Luis Suárez, Pique, Jordi Alba y compañía se ganaron los galones e incluso especulándose con sus salidas, siempre acabaron quedándose hasta la famosa salida del uruguayo, que llevó en su momento a Messi a plantearse su adiós al Camp Nou. Y tan famosos como sus amigos también lo han sido esos jugadores que no acabaron de convencer a Leo. Véase el caso de Griezmann.
El internacional francés desembarcó en Can Barça después de haberse consagrado en la élite en las filas del Atlético de Madrid. Pero cayó con el pie izquierdo. Detrás de esto, un Messi que no entendía cómo él sí y Luis Suárez no. El galo intentó acallar los rumores de una presunta mala relación en diálogo con L'Équipe: "¿Mi relación con Messi? Es buena. Nos entendemos bien. A veces nos escribimos mensajes, nos comunicamos mucho en los entrenamientos. En el campo, obviamente es un jugador muy fácil de jugar. Le envías un melón y él lo convierte en caviar".
Tal vez por estos rumores de malestar en el vestuario y en el campo entre Griezmann y Messi, haciéndose análisis de que en los primeros meses del francés en el equipo apenas interactuaban en el campo, tanto uno como otro escenificaron de manera pública que no había ningún mal rollo y que ambos eran compañeros, buenos compañeros. Aunque la leyenda urbana nunca se enterró del todo.
6. Lealtad del Barça
Pese a los desencuentros, que normales son en una relación de más de dos décadas, lo que es innegable es el apoyo que le ha dado el Barcelona a Leo Messi. Tal vez el punto más llamativo de esta lealtad fue en el momento de la lucha por el Balón de Oro del año 2010. Por aquel entonces, los máximos rivales del argentino por el preciado galardón dorado eran otros dos hombres de la casa: Xavi e Iniesta.
Los dos centrocampistas españoles lo ganaron todo aquel año. No solo con el conjunto azulgrana como Messi, sino que Xavi e Iniesta también consiguieron conquistar el Mundial de Sudáfrica con la Selección. Se abrió así el melón de con quién iba tanto el Barça como su afición y el claro vencedor fue Leo. Mientras desde los distintos rincones de España se pedía el Balón de Oro para nuestros internacionales, en la Ciudad Condal se hizo campaña por el argentino. ¿El desenlace? Messi ganando el trofeo.
7. Rivalidad con Cristiano Ronaldo
Entender la carrera de Lionel Messi es imposible sin hablar de Cristiano Ronaldo. Los dos monstruos del fútbol de este siglo consagraron la rivalidad hasta niveles insospechados. Nunca antes dos jugadores de su talento y talla coincidieron de manera tan brutal en un cara a cara. Tal vez todo tuvo tintes tan épicos porque uno defendía el escudo del Barça y el otro el del Real Madrid. Pero nada fue igual antes que ellos y nada volverá a ser lo mismo después de su era.
Se disputaban cada título a nivel de clubes, pero también cada trofeo en el plano individual. Seis Balones de Oro para Messi, cinco para Cristiano. Cuatro Champions conquistó Leo como azulgrana y otras cuatro ganó Ronaldo como madridista, aunque el luso ya tenía otra 'Orejona' de sus tiempos en el Manchester United. Dos extraterrestres que hicieron de La Liga el mejor campeonato del planeta tierra.
Todo lo bueno tiene su final. En la 2021/2022 ni Messi ni Cristiano jugarán en la liga española, pero nadie puede olvidar que ambos se hicieron eternos aquí. Y tampoco nadie puede discutir que Messi hizo más grande a Ronaldo, pero que también Cristiano hizo más grande a Leo. Ambos no lo han escondido. Y es que ni ellos mismos entienden sus propias carreras sin pensar en su eterno rival.
8. La salida de Neymar
El verano de 2017 marcó un antes y un después en el Barcelona. Neymar decidió dar un paso a un lado para intentar dejar de estar a la sombra de su amigo Messi y ser el buque insignia de un proyecto. Así se decantó por el plan de futuro del Paris Saint-Germain, en el que acabaría coincidiendo con Mbappé, la gran ilusión del fútbol francés en aquellos tiempos.
Sin embargo, nada salió como estaba planeado. Ni Messi volvió a ganar la Champions con el Barça ni tampoco Neymar consiguió levantar la 'Orejona' en el Parque de los Príncipes. Comenzaron así los rumores sobre un posible regreso a la Ciudad Condal del brasileño, quien mantenía abierto un proceso judicial contra el club. Ni eso paraba las especulaciones.
A aumentar los rumores ayudaba un Neymar que no acababa de renovar con el PSG y que decía alto y claro que quería volver a jugar al lado de Messi. Entonces parecía imposible que esto fuese a suceder lejos de Can Barça, pero curiosamente, es lo que ha acabado sucediendo. Estos dos buenos amigos volverán a ser compañeros, pero no en el Barcelona, sino en el PSG.
9. Cara y cruz
Si algo ha quedado claro hasta este punto es que la etapa de Messi en el Barcelona se puede calificar como triunfal. 35 títulos en 17 temporadas con el primer equipo le catapultaron hasta el olimpo del deporte. El debate ya no era si Leo es mejor que Cristiano, sino si la 'Pulga' estaba por encima de otras leyendas como Maradona, Pelé o Di Stéfano.
Sin embargo, no todo ha sido de color de rosa para Messi. Las críticas le han perseguido por sus actuaciones con la Albiceleste. La 'Pulga' lideraba, ganaba y batía récords de partidos y de goles como azulgrana, pero mostraba una versión muy discreta cuando se ponía la camiseta de su país. Tal vez por esto, explotó de emoción cuando este mismo verano de 2021 levantó la Copa América con Argentina. Su primer gran título con su país, además de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
10. Problemas con Hacienda
Uno de los puntos más negros de la historia de Leo Messi en España fue el problema que ha mantenido con la Hacienda Pública de nuestro país. El contencioso comenzó en el mes de junio del año 2013. Entonces, la Fiscalía, a instancias de Hacienda, se querelló contra Lionel y Jorge Messi -padre y administrador de la fortuna del futbolista-.
La Audiencia de Barcelona impuso una condena de 21 meses de cárcel al futbolista, pero la Fiscalía aceptó después la sustitución de esta pena por una multa de 255.000 euros después de la evasión de 4,1 millones de euros de los beneficios obtenidos por la explotación de sus derechos de imagen, mediante un entramado de sociedades interpuestas.
El ministerio público aceptó así suspender la pena del futbolista y su padre, teniendo en cuenta que son "delincuentes primarios", que carecen de antecedentes penales, y que ambos aceptaron devolver a Hacienda los 4,1 millones de euros defraudados. A esa cantidad de 255.000 euros se llega después de que la Fiscalía apoyase como primera opción que la pena de cárcel de Messi y su padre fuese sustituida por multa, siempre que se les impusiera la cuota máxima, de 400 euros diarios, lo que suma ese total de 255.000 euros.
11. El burofax y la guerra con Bartomeu
El pasado 25 de agosto, los cimientos del Barcelona se tambalearon después de que Messi mandase un burofax al club anunciando que se quería ir. Entonces comenzó un culebrón con Leo decidió a salir y con Bartomeu y su Junta Directiva trabajando para impedirlo. Detrás de todo esto había una guerra interna entre el futbolista y el presidente de la entidad.
Al argentino no le ha gustado la manera de gestionar el club que tenía Bartomeu. Mientras el presidente consiguió retenerle pese a la salida de Ernesto Valverde o el adiós de Luis Suárez. Decisiones como estas fueron las que propiciaron que el de Rosario quisiera abandonar Can Barça. En el futuro vio una salida: las elecciones a la presidencia que tendrían lugar en marzo. Y así Bartomeu se convirtió en el presidente que logró retener al mejor jugador de la historia del Barcelona.
12. Los números de su megacontrato
En el año 2017, Messi firmó su última renovación con el Barça. Se deslizaba que su sueldo ascendía a más de 50 millones de euros, pero fue El País el que destapó un contrato que ha acabado siendo la perdición del club a nivel económico y que ha finalizado con el '10' fuera del Camp Nou. Un contrato de 555.237.619 euros.
El internacional argentino pasó a percibir hasta un máximo de 138 millones de euros por temporada entre fijo y variable. Además, se incluyeron otras dos primas millonarias. La primera ya solo era por aceptar dicha renovación. Una prima de renovación fijada en 115.225.000 euros. A esta se unió una segunda cláusula. Esta en concepto de fidelidad, ascendiendo hasta los 77.929.955 euros.
Además, en el contrato también se estipularon las primas por competición: 2.365.766 por ganar La Liga; 591.442 por conquistar la Copa del Rey; 1.419.458 por llegar a las semifinales de la Champions League y misma cantidad si se alcanza la final, además de los 3.548.644 euros por levantar la 'Orejona'.
Es decir, este contrato que le puso sobre la mesa Josep Maria Bartomeu y que Lionel Messi firmó en noviembre de 2017 hizo que el ahora nuevo jugador del Paris Saint-Germain ganase al día desde que firmó 380.299 euros brutos diarios o lo que es lo mismo: 210.297 euros netos.
13. Adiós a su amigo Luis Suárez
Si hay algo que dolió a la 'Pulga' durante su estancia en el Barça, esto fue la salida de su gran amigo Luis Suárez. Este fue uno de los detonantes del antes comentado burofax diciendo que quería irse. Messi criticó las formas del club, cómo se portaron con el uruguayo y es que este recibió una corta llamada para decirle Koeman que no contaba con él para la 2020/2021.
Messi culpó a la directiva del adiós de su amigo. Una amistad que ha perdurado. Desde que Suárez se marchó al Atlético de Madrid, a ambos se les ha visto en varias ocasiones juntos, la última este mismo verano compartiendo vacaciones con sus respectivas familias y la de Cesc Fàbregas.
"Te merecías que te despida como lo que sos: uno de los jugadores más importantes de la historia del club, conseguiste cosas importantes tanto en lo grupal como individualmente. Y no que te echen como lo hicieron. Pero la verdad es que a estas alturas ya no me sorprende nada", dijo Messi ante la salida de un Suárez que afirmó que le habían menospreciado.
14. Retorno de Laporta a la presidencia
Con las elecciones y la llegada del nuevo presidente, la mayoría pensó que Joan Laporta conseguiría que el rosarino firmase la ansiada renovación. Los meses fueron pasando y a Leo Messi se le veía cada vez más contento en el Barcelona. Todo apuntaba a que iba a continuar, mientras que desde el club se mostraban confiados en que todo llegase a buen puerto.
Las semanas fueron pasando. Los meses... y llegó el 30 de junio sin que se anunciase la renovación. Messi se convirtió en jugador libre, pero aun así se siguió afirmando que continuaría vistiendo la elástica blaugrana. Lo cierto es que parecía que Leo estaba convencido también de ello, pero como a lo largo de la temporada, el tiempo fue pasando sin que se anunciase la firma del argentino con el que ha sido el equipo de su vida.
Desde la Ciudad Condal se daba por hecho que esta particular 'renovación' de Messi era cuestión de días, de horas. Pero no. Cuando las portadas hablaban de "anuncio inminente" o "Messi ya", el culebrón dio un giro de 180 grados. Messi se iba. Messi no volvería a defender más el escudo del Barça en partido oficial. Un jarro de agua fría para todo el barcelonismo, pero en especial para un Laporta que será el presidente con el que el '10' dejó el Camp Nou.
15. Salida con el acuerdo con LaLiga y CVC de por medio como solución
En esa recta final del culebrón, pareció salir a la luz un acuerdo entre LaLiga y CVC que parecía salvar la economía del Barça para poder inscribir a Messi, así como al resto de fichajes que todavía no pueden jugar con el conjunto culé en partido oficial. Pero esta presunta solución no fue tal. De hecho, 'Jan' Laporta rechazó de pleno el negocio de Javier Tebas.
Ese fondo ha sido rechazado de pleno por clubes como el propio Barcelona, el Real Madrid o el Athletic. No están de acuerdo en esa venta de los derechos de televisión por 50 años y tampoco ese agua para hoy, sed para mañana. Laporta rechazó esta solución de LaLiga, algo que también va ligado a la creencia firme en que la Superliga Europea resolverá los problemas del fútbol. Sin acuerdo y sin dinero, Messi es del PSG.
[Más información - El inesperado dorsal de Leo Messi con el PSG: ya no es el '10']