Barcelona y Real Madrid, claves en el desarrollo del fútbol femenino español

El fútbol femenino continúa con un 2022 que apunta a ser histórico. El primer paso para la profesionalización de su liga llegó con el acuerdo alcanzado por todos los clubes de la élite. Sin embargo, no es el único gesto que puede ayudar a asentar la disciplina en el día a día de los aficionados españoles. La pugna entre FC Barcelona y Real Madrid también puede ayudar a alcanzar ese objetivo y el duelo que se vivirá en la Champions League es el ejemplo perfecto.

Los dos equipos se verán las caras tanto en la Supercopa de España, donde pelearán por un puesto en la final, como en los cuartos de la Champions League. La suerte del sorteo quiso unir a ambos conjuntos españoles en la carrera por un puesto en semifinales. Y, aunque el actual campeón Barça parte como claro favorito, el simple hecho de ver un Clásico de fútbol femenino en competición europea ya ha despertado el interés de decenas de miles de personas.

El partido no alcanzará la audiencia que acostumbra a generar El Clásico masculino. Pese a ello, sí que se prevé que haya un gran respaldo entre los consumidores, en este caso los aficionados. Por el momento, el Barcelona ha ayudado a que se acumulen fans en la grada abriendo el Camp Nou y situando el precio de las entradas en no más de 20 euros como tope. Una estrategia que, aunque el encuentro se disputará el próximo 30 de marzo, ya ha confirmado la máxima espectación.

El Camp Nou antes del partido Barça - Betis Reuters

El Clásico de la competición europea, por el momento, cuenta ya con 70.000 entradas vendidas en el feudo azulgrana. Todo dependerá de la autorización sanitaria y de la situación de contagios que haya en el momento del partido. Pero, a la espera de que se conozcan todos esos datos, es un hecho que el encuentro quedará marcado en la historia del fútbol femenino español.

Si se cumplen las expectativas de, como mínimo, 70.000 aficionados en las gradas del Camp Nou, El Clásico habrá batido todos los récords del deporte femenino en España. El Atlético de Madrid - Barcelona de 2019 se disputó en el Wanda Metropolitano y congregó a 60.739 espectadores, máxima asistencia a un partido femenino de la historia de todos los clubes. Ahora, El Clásico aspira a cambiar esa clasificación.

El FC Barcelona será quien abra el estadio, pero es innegable la importancia del Real Madrid en ese récord. El club merengue finalizó el proceso de compra del CD Tacón el pasado 2020 en su apuesta por el fútbol femenino. La primera campaña con el equipo en la élite y luciendo los colores del Real Madrid concluyó con el equipo clasificado para la Champions. Y en esta segunda campaña, con Alberto Toril en el banquillo desde diciembre, el objetivo es llegar lo más lejos posible en Europa.

La rivalidad entre los dos clubes con más aficionados del fútbol español, ahora trasladada al fútbol femenino, será uno de los motores para seguir generando espectadores y respaldos. Además, no solo supondrá un impulso a nivel nacional, sino que la proyección mundial de ambas entidades también permitirá sumarse a la ola de crecimiento de la disciplina que se está produciendo en otros países.

Pedri y Alexia Putellas ofreciendo sus premios al Camp Nou Reuters

La importancia de Putellas

Por encima de clubes y rivalidades, si hay un nombre propio en el fútbol femenino de 2021 ese es el de Alexia Putellas. La jugadora española, peso pesado del FC Barcelona, se convirtió en la referencia planetaria gracias a sus actuaciones sobre el césped. Clave en el triplete azulgrana, Putellas fue galardonada con el Balón de Oro y el Premio The Best que entrega la FIFA a mejor jugadora de mundo.

La catalana de 27 años es ya una referencia mundial y ha conseguido que un rostro del deporte femenino ocupe titulares y minutos de las principales televisiones nacionales. Todo un logro que se ha servido para aumentar la proyección de la competición nacional.

2022, con la creación de la primera liga de fútbol femenino profesional y con eventos de miles de espectadores como El Clásico de la Champions League aspira a ser el de la consagración del fútbol femenino en España. La aportación por proyección de los dos principales clubes del país, así como la del resto de entidades que en las últimas temporadas han mantenido su inversión en la categoría, será clave.

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