91.553 es un número para la historia, el número de espectadores que en el Camp Nou batió el récord mundial de asistencia a un partido de fútbol femenino. El Clásico entre FC Barcelona y Real Madrid es ya un hito, pero pasada la fiesta toca mirar hacia adelante y lograr que algún día esto sea lo habitual y no una noche excepcional.
Javier Tebas, presidente de LaLiga, aguó la fiesta a ojos de muchos cuando este jueves dijo: "Prefiero una liga femenina con 5.000 aficionados en todos los partidos de los fines de semana que con 90.000 en un partido". Un baño de realidad acorde con la que vive el fútbol femenino en España a diario.
En este sentido, lo primero que debe ayudar es la creación de la primera Liga profesional femenina. Aprobada el pasado día 14 de marzo por el Consejo Superior de Deportes (CSD), se pondrá en marcha para la temporada 2022/2023 igualada con las ligas de fútbol y de baloncesto masculinas. El siguiente paso es elegir presidente/a de la patronal de la nueva competición bajo el consenso de los clubes.
Con la Liga profesional saldrán a escena otros asuntos, como es la creación de un convenio de coordinación con la Federación española (RFEF) para reglamentar licencias, calendarios, ascensos y descensos... Además, tocará sentarse de nuevo con los sindicatos para pactar un nuevo convenio colectivo.
El primer convenio colectivo del fútbol femenino llegó hace dos años, celebrado por todos y por todas, pero tendrá que actualizarse con la creación de la liga profesional. Los sindicatos, con Futpro a la cabeza, deberán sentarse a negociar con un nuevo ente para, entre otras cosas, acabar con la parcialidad de la jornada laboral que actualmente está establecida en el 75% y que está prohibida por ley a nivel profesional.
Todavía queda mucho por avanzar en el fútbol femenino en España y en sus clubes que, tristemente, no viven la realidad de los dos protagonistas del partido del miércoles: Barça y Real Madrid. Aunque tampoco ellos se libran de asuntos espinosos, como el que estalló esta misma semana en el organigrama culé por la denuncia de una exjugadora de haber sufrido "conductas abusivas" en Can Barça siendo menor.
La futbolista se siente desprotegida, siendo recurrentes las noticias de deportistas que denuncian haber sido víctimas de acoso y otros abusos desde el inicio de sus trayectorias. También hay mucho que avanzar en otros asuntos como la conciliación familiar o los derechos de imagen, que deberán ser abordados en el nuevo convenio colectivo.
Derechos televisivos
Otro foco está puesto en la visibilidad que tiene el fútbol femenino español. El Clásico de Champions, además de ser presenciado por más de 90.000 personas en el Camp Nou, pudo seguirse también desde casa a través de las plataformas de DAZN y YouTube. Los derechos de la Champions League femenina pertenecen hasta 2025 a DAZN, que llegó a un acuerdo con YouTube para su emisión en abierto durante dos temporadas.
Alexia Putellas, estrella del Barça, dejó entonces una valiosa reflexión: "Si una niña no ve a una mujer jugando una final de Champions pensará que no se puede. Por eso es tan importante un acuerdo así para poder retransmitir todos los partidos. Y que muchas niñas y niños vean que el deporte es también cosas de mujeres".
La fórmula funciona a nivel europeo y lo demuestran las audiencias de El Clásico: más de 1,3 millones de visualizaciones en directo alrededor del planeta, siendo el encuentro más visto hasta la fecha. La fase de grupos de la competición ya tuvo un acumulado de 14 millones de visualizaciones. Pero a nivel nacional, la realidad vuelve a ser muy diferente.
La Primera Iberdrola apenas tiene espacio en la televisión. El canal de RTVE Teledeporte emite solo un partido a la semana, mientras que el resto de la jornada ha de ser vista a través de los canales de Youtube y de TV (caso de Real Madrid y Barça) de los propios clubes. Que la nueva Liga profesional llegue de la mano de un acuerdo por los derechos de retransmisión es de absoluta necesidad.
El futuro inmediato
La gran verdad que deja El Clásico histórico de este miércoles es que el fútbol femenino interesa y la gran mentira es que tenga las suficientes herramientas para alcanzar su lugar. El récord mundial del Camp Nou, la Champions del Barça y el Balón de Oro de Putellas han abierto la puerta al verdadero avance.
Hay fútbol femenino para rato. El Barça afronta el reto de levantar su segunda Champions seguida, mientras el Real Madrid (con dos años de vida) ha llegado para quedarse como otra punta de lanza de la disciplina.
El siguiente gran desafío le tocará a la Selección, que este verano afrontará la Eurocopa con la ilusión de luchar por el título. Tiene motivos para soñar con ello como la quinta mejor selección del mundo, según el ranking FIFA, y con grandes estrellas en sus filas como Putellas, Aitana o Jenni Hermoso. El seleccionador Jorge Vilda lanzó este jueves un canto al cielo: "El Barça-Madrid del Camp Nou fue una fiesta y el fútbol femenino es algo que ya no se puede parar".
[Más información: El Barcelona golea al Real Madrid en un día histórico para el fútbol femenino]