La facturación de Negreira desaparece tras la ruptura con el Barça: su empresa, a cero en solo dos años
Pasó de los 329.373 euros en el año 2018 a los poco más de 7.000 euros en 2019 y terminó 2020 sin conseguir facturar nada a través de DASNIL-95 S.L..
20 febrero, 2023 02:15Las relaciones entre Enríquez Negreira y el FC Barcelona se hicieron más que candentes durante 2016 y 2018, donde a través de DASNIL-95 S.L., el excolegiado cobró más de un millón y medio de euros en tan solo tres años. Una cantidad desorbitada para los servicios contratados por el conjunto culé.
La realidad es que tras cortarse el sustento económico del Barça, la empresa de Enríquez Negreira vio reducida de manera drástica la cantidad de dinero facturado. Una consecuencia que provocó que el exdirectivo culé amenazase a la entidad azulgrana a través de una serie de burofaxes.
Tras finalizar ese nexo de unión con la entidad presidida por Josep Maria Bartomeu, las cuentas de la empresa se quedaron prácticamente a cero. Un año después, en 2019, solo pudo facturar cerca de 8.000 euros y, en 2020, el nivel a 0. Una demostración de los favores que realizaba el exvicepresidente al Barça a través de sus servicios.
Después de acumular tres lustros realizando informes arbitrales para el Barça, Bartomeu decidió cortar las relaciones con Enríquez Negreira, que justamente finalizaba casi a la vez su vínculo con el Comité Técnico de Árbitros. Un adiós que provocó el desplome de la facturación de su empresa en tan solo dos años.
Del todo a la nada
La investigación de la Fiscalía debido a los pagos del FC Barcelona a Enríquez Negreira entre los años 2016 y 2018 dejó plasmada una relación real y duradera en el tiempo. Un escándalo por el que sobrevuela la sombra de una serie posibles amaños o posibles favores arbitrales por parte del conjunto culé a lo largo de los años.
Para ello, el club, ya fuese con Joan Gaspart, Joan Laporta o Josep Maria Bartomeu, decidió contratar al vicepresidente del CTA en aquel momento. Tras destaparse que dichas transacciones habían estado presentes a lo largo de 17 años, entre 2001 y 2018, donde el excolegiado había recibido.
Todo ello se debió a que Hacienda decidió llevar a cabo una inspección en los tres ejercicios correspondientes, ya que encontró irregularidades en la contabilidad de la empresa y se encontró una serie de facturas de las que consideraba que había una difícil justificación.
El momento más álgido de DASNIL-95 S.L. se vivió durante esos tres años, donde llegó a facturar cerca de un millón y medio de euros. Los informes y análisis arbitrales se convirtieron en un sustento más que importante para Negreira, que vio como Bartomeu, de golpe y porrazo, daba por finaliza su relación.
A partir de ahí, la facturación de su empresa pasó a ser residual hasta quedarse a cero dos años después de romperse su contrato con el Barça. Paso de los 567.136 euros en 2016, los 562.840 euros en 2017 o los 329.373 euros en 2018 a una paupérrima cifra de 7.384 euros en 2019.
Un año más tarde, dejaba de facturar y se quedaba a cero después de haber vivido un trienio muy lucrativo por una serie de actividades que han sido imposibles de demostrar ante la Fiscalía.
Arjona, como intermediario
Otro de los puntos candentes de la trama entre el FC Barcelona y José María Enríquez Negreira es Josep Contreras Arjona. El exdirectivo del conjunto culé, fallecido el pasado diciembre, fue una de las piezas claves para que se realizasen los pagos al excolegiado a través de su empresa.
Desde el Ministerio Público se está investigando una posible y estrecha relación al utilizar Tresep 2014 SL como vehículo para que Negreira cobrase comisiones procedentes del FC Barcelona. Incluso, desde El País, apuntan a que Arjona la utilizaba como un puente para que su hijo Javi recibiese las comisiones del club y que se estipulan en un 50%.
Con ella, Arjona servía como intermediario debido a su buena relación con Negreira, ya que ambos también estuvieron relacionados con la Federación Catalana de Fútbol. Tanto uno como otros se vieron salpicados por oscuros temas relacionados con el beneficio económico a través de ella.
En un primer caso, Enríquez Negreira, junto a su hijo Javier, fue señalado en 2006 por un negocio con Francesc Casajuana Rifà, máximo responsable arbitral del estamento federativo regional durante doce años. La llegada a la Federación de Cataluña de Jordi Roche destapó el negocio que se traían ambos entre manos.
El fraude consistió en que Casajuana Rifà le encargó la impresión de 4.000 reglamentos a la empresa que tenían en común José María Enríquez Negreira y Javier Enríquez Romero. Sin embargo, se trataba de una cifra muy elevada a la de colegiados que había en la región, donde se encontraban 1.400 árbitros federados. Una trama que dejó entrever que los dos desviaron fondos para lucrarse a través de dichos encargos.
No fue menos Contreras Arjona, que a través de Tresep 2014 montó sus negocios con la Federación Catalana de Fútbol. Fue acusado de corrupción tras sufrir una detención en 2018. En aquel momento se vio salpicado directamente por la adjudicación irregular de varias obras.
Junto a Andreu Subies, presidente del ente entre 2011 y 2018, al ex de la Comisión Deportiva del Barça FCF le fueron adjudicadas un total de 11 obras por un montante que rondaba los 7,55 millones de euros. Como contraprestación Contreras Arjona realizó la reforma de dos inmuebles vinculados al máximo mandatario.
Según las investigaciones de la UCO de la Guardia Civil, se estipuló que Arjona había ganado seis millones de euros en total. Le fueron pagados casi diez millones para llevar a cabo las obras y el las subcontrató por un total de cuatro, motivo por el cuál fue detenido junto a Subies en 2018.