Thiago Alcántara se retira del fútbol a los 33 años tras un curso marcado por el calvario de las lesiones

Thiago Alcántara ha decidido poner punto y final a su trayectoria deportiva al no ver la luz al final del túnel de las lesiones. Un único partido ha podido disputar desde abril de 2023, es decir, en quince meses. A lo largo de sus etapas en el FC Barcelona y Bayern de Múnich había sufrido lesiones en la rodilla y tobillo, pero nunca de tan duración como las protagonizadas en el Liverpool. 

En febrero de 2023 comenzaron sus problemas en el flexor de la cadera, reapareció dos meses después, pero sufrió una recaída que le obligó a pasar por el quirófano y enterró sus opciones de volver a vestirse de corto. De hecho, esta temporada únicamente ha podido disputar seis minutos ante el Arsenal. Pesaroso final a su etapa como jugador del Liverpool. 

"Sé que las lesiones han sido una frustración para él, pero también sé el nivel al que ha jugado y ha sido increíble. Me quedaré con eso", dijo Jürgen Klopp. "Ahora irá en una nueva dirección con su familia y solo puedo desearle lo mejor. Donde sea que juegue, estaré feliz de verle. Es un artista del juego que solo pinta las pinturas más bellas", añadió el técnico alemán.

Lo cierto es que la relación de Thiago con los problemas físicos se remonta a su época como jugador del Bayern de Múnich. Con el equipo bávaro no tuvo una sola temporada libre de lesiones. En sus siete años se perdió 163 partidos y ese currículum se agrandó durante su etapa como jugador del Liverpool con otros 130 encuentros ausente por dolencias físicas. 

Thiago cuelga las botas, según informa Fabrizio Romano, en una vitrina repleta de títulos. En ella descansan dos Champions League, una con el FC Barcelona de Pep Guardiola y otra con el Bayern de Múnich de Hansi Flick. En España alzó dos Ligas, una Copa del Rey y dos Supercopas, mientras que en Alemania conquistó siete Bundesligas, cuatro Copas de Alemania y tres Supercopas. Con el Liverpool festejó dos Copas de la Liga, una FA Cup y una Supercopa.

Con la Selección cosechó una Eurocopa Sub-17 y dos Sub-21, pero con la absoluta se quedó sin tocar metal alguno también por culpa de las lesiones. Debutó de la mano de Vicente del Bosque en 2011 y estaba en la baraja del seleccionador para la Eurocopa 2012, pero de nuevo una lesión le impidió viajar acompañar a la Absoluta en Polonia y Ucrania y a la Sub-23 en los Juegos Olímpicos.