Así queda la clasificación de la Champions: sorprende el Brest y surgen problemas para Real Madrid, Barça y Atlético

La nueva Champions obliga a tirar de calculadora cada jornada. Más todavía si por el camino se producen descalabros inesperados. Como el del Barça en la jornada inaugural o los de Real Madrid, Atlético y Bayern de Múnich en el segundo partido. Aunque antes de entrar en cálculos y ecuaciones logarítmicas para hallar los equipos clasificados, conviene recordar el nuevo funcionamiento.

La Champions ha entrado en un enrevesado sistema de competición que exprime un calendario ya saturado de por sí. Los 36 equipos que forman la primera fase se enfrentarán a los ocho equipos que les deparó el sorteo. Cuatro en su feudo y cuatro a domicilio, es decir, sin partidos de ida y vuelta como en la pasada fase de grupos.

Cuando acaben todas las jornadas de la liguilla, allá por finales de enero de 2025, los ocho primeros acceden automáticamente a octavos de final. Mientras que los equipos situados del 9º al 24º puesto deberán superar un play-off a doble partido para sumarse a los ocho primeros.

En cambio, los ubicados del 25º lugar para abajo, todos los clubes quedan eliminados, sin posibilidad de ser repescados por la Europa League. Tras la 'repesca', el torneo sigue el sistema tradicional de eliminatorias hasta la final. Octavos, cuartos y semifinales a doble partido ante el mismo rival, y final a partido único. Esta edición en el Allianz Arena de Múnich.

Esto quiere decir que la carrera a las rondas eliminatorias, aunque parezca de fondo, es una de obstáculos. A más equipos, mayor posibilidad de empate a puntos existe, lo que se traduce en una mayor importancia del golaverage, primer criterio de desempate. Ello convierte la derrota del Atlético ante el Benfica (4-0) en una mochila de piedras que los de Simeone deberán ir vaciando jornada a jornada, (-3) en el golaverage.

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Quién sabe si fue el poco descanso entre partidos -cuatro encuentros en diez días-, la sanción tras los altercados del derbi -cierre parcial del fondo suir del Metropolitano-, jugar en un estadio de infame recuerdo rojiblanco o todo al mismo tiempo. Lo cierto es que el Atlético no encontró salida en el laberinto de Lisboa. El Benfica de Bruno Lage, más ordenado sin balón y con mayor verticalicad y claridez de ideas con la tenencia de la posesión, inflingió la primera derrota rojiblanca de esta temporada.

La goleada obliga al Atlético a ganar más partidos con una renta mínima o menos encuentros por más de un gol. Problema que, de momento, no sufren FC Barcelona y Real Madrid. Los de Flick barrieron al Young Boys con una manita que les permite tener golaverage positivo (+4). Misma situación atraviesa el Real Madrid, pese al descalabro ante el Lille. 

La derrota, por la mínima, unida al triunfo en la primera jornada ante el Stuttgart (3-1), permite seguir con saldo positivo (+1). De momento, la tabla la lideran el Dortmund, Brest, Benfica, Leverkusen, Liverpool, Aston Villa y Juventus. Todos con seis puntos. Sorpresa en la altura, con el debutante Brest en lo más alto y en los infiernos, con el Milan sin estrenar su casillero de puintos y relegado a los últimos puntos.